𝑻𝒐𝒙𝒊𝒄 𝑳𝒐𝒗𝒆 | 𝑩𝒆𝒍𝒍𝒂 𝑺𝒘𝒂𝒏

𝑷𝒓𝒊𝒎𝒆𝒓 𝑩𝒆𝒔𝒐

Alexandra  pov.

- ¡Charlie!.- Exclamó Bella como si de pronto hubiera recordado que existía, al mismo tiempo que examinaba el cielo, me reí entre dientes por su expresión.-¿Es muy tarde?.- Me preguntó al tiempo que miraba su reloj.

-Es la hora del crepúsculo.-respondí encogiendome de hombros, ¿Cuantas veces lo había contemplado?. En todos estos largos años era el bicho mas
raro de mi familia, según ellos. Aunque yo los tenía a ellos en el fondo no tenía a nadie hasta que apareció Bella. Mis noches eran solitarias y monótonas, incluso en algunas ocasiones aceleraba el tiempo, algo que a mi familia le disgustaba.

Solo Esme era la más comprensiva conmigo y Carlisle... Suspiró, cada día parecíamos más lejanos y con mis hermanos nunca fuimos muy unidos con Edward tal vez al principio aunque todo cambio cuando supe sus verdaderas intenciones, todavía seguía sin entender como Carlisle pensó que Edward podía ser mi compañero.

Pero todo eso quedaba atras, ya podía contemplar mi futuro. Bella junto a mi por toda la eternidad siendo mi compañera. Toda la etermidad
para nosotros y yo no me cansaría nunca de ella, de su piel de
sus ojos, de su boca y su compañía.

Y si de lo contrario ella quería seguir siendo humana yo respetaría su decisión.

Al extender mi mano para abrir la puerta sentí su calor quemandome la piel del brazo. Su corazón latiendo más y más rápido. Pero algo me paralizó al momento, alguien se
aproximaba.

-Mal asunto.- Pensé en voz alta evitando soltar un gruñido.

-¿Qué ocurre?.-Automáticamente y al sentir la presencia de esa familia
descendiente de los licántropos, mi cuerpo se tensó y apreté la
mandíbula.

Definitivamente no me iría.

-una complicación.-conteste haciendo una mueca. Abrí la puerta de golpe con un rápido movimiento y, casi
encogido, me aparté de Bella. Al mismo tiempo que el coche negro subía el bordillo, dirigiéndose hacia nosotros.-Charlie ha doblado la esquina.-le dije, sin dejar de vigilar el
otro vehículo.

Me importaba poco meterme en problemas con los lobos pero no quería que le metieran ideas equivocadas a Bella y a su padre.

Posiblemente Bella no había identificado a los ocupantes del coche negro, pero para mi ya estaba claro quienes eran. El joven que estaba al volante debía ser el hijo de Billy Black, Jacob. Me habían reconocido, la cortina de lluvia era muy espesa pero
me habían reconocido, bueno el viejo me había reconocido.

-¿Te irás?.-pregunto Bella como si la idea le disgustara, sonreí levemente y negué con la cabeza.

-y dejarte sola con Jacob Black.-repuse haciendo una mueca de disgusto.

-Solo es un amigo Alexandra, él no me interesa de otro modo.-dijo Bella mientras nuestras manos estaban entrelazadas.

-Hola, Bella.-llamó una ronca voz, desde el asiento del conductor del
pequeño coche negro.

-¿Jacob?.-preguntó Bella, parpadeando bajo la lluvia.

Sólo entonces dobló la esquina el coche patrulla de Charlie y las luces del mismo alumbraron a los ocupantes del coche.

Jacob ya había bajado. Su amplia sonrisa era visible incluso en la oscuridad. Él me miro de seguro preguntándose quien era yo y por otro lado en elasiento del copiloto se sentaba un hombre mucho mayor. Era el padre de Jacob, Billy Black. Lo supe inmediatamente. Me miraba fijamente, analizandome, por lo que levanté la mirada no le tenía miedo.

Él que si debería tenerlo es él.

Billy tenía los ojos desorbitados por la sorpresa o el pánico y resoplaba por la ancha nariz. Mi sonrisa no desapareció.

-Papá te presentó a Alexandra Cullen.-la voz de Bella me hizo desviar la mirada de los Black, voltee a ver a Charlie Swan.

-Bella me ha hablado tanto de ti. Es un gusto conocerte Alexandra.-Las mejillas de mi compañera se pusieron rojas, reí entre dientes.

-igualmente señor Swan.-digo amablemente.

-llámame Charlie.-asiento mirando como Billy me dirigí una mirada incrédula.

La tarde para mi fue tranquila tal vez él único que se la pasaron mal fueron Billy y Jacob, pero que culpa tenía yo.

¿A quien quiero engañar?

Billy se sentía incomodo e intimidado por mi presencia y Jacob no pudo tener ningún momento a solas con Bella.

-¿Enserio Billy cree en esas leyendas?.-inquirió Bella.

-Si él sabe que los Cullen somos vampiros.-respondí, poniendo mi mano en su mejilla, la mire hacía sus ojos color chocolate como si estuviera preguntándole si podía, para mi absoluta felicidad ella cierra sus ojos.

Incline mi cabeza y uní mis labios con las de ella, y la bese justo como deseaba hacerlo.

Poco a poco él beso fue subiendo de intensidad, ignoré la sed que sentía y rompí él beso alejando a Bella suavemente de mi, ambas sonreímos.

-Ha sido mi primer beso.-confiesa Bella, sonrió orgullosa por la primera en todo en la vida de mi compañera.

Me gustaría decirle lo mismo pero yo ya había besado a alguien cuando era humana, pero nada se comparaba a este momento.

-Nos vemos mañana Bella.-le guiño un ojo y le doy un beso en la mejilla.

Camino a casa no deje de pensar en aquel beso, cuando entró a la casa puedo ver la mirada molesta de Edward, sin embargo Esme estaba tan contenta.

Ojalá así fuera toda mi familia.

Le sonrió a Esme e ignoró la presencia de los demás.

-¿Cuando la traerás a casa hija?.-Me preguntó al tiempo que se sentaba a lado mío.

-Mamá creo que es un poco anticipado hablar de eso.-respondí sabiendo como los demás actuarían tal vez solo Emmett me apoyaría o Carlisle un poco.

-Hija, yo también quiero ser parte de tu felicidad, estaremos muy contentos de conocerla. Yo quiero conocer a linda chica que ha despertado tu hermoso corazón.-sonrió levemente ante las palabras de Esme.

Suspiró.

-Dudo que todos aquí estén contentos por mi.-repuse haciendo una mueca.

-Lo estarán.-afirma poniendo una mano en mi hombro.

-Lo pensaré.-murmuró, aunque sigo pensando que no sería buena idea sobre todo por Rosalie y Edward.