𝕯𝖆𝖓𝖟𝖆 𝖉𝖊 𝖈𝖚𝖈𝖍𝖎𝖑𝖑𝖆𝖘 [MLBB] ᵃᵃᵐᵒⁿ ᵖᵃˣˡᵉʸ

18

La conversación de los jóvenes se cortó cuando los patriarcas de la Segunda Casa se acercaron, pidiendo la presencia de Aamon. Rechinando dientes, el muchacho les siguió. Morgana decidió irse con ellos (ya que no presagiaba nada bueno) y se despidió de sus amigos. Los patriarcas los guiaron hasta una esquina del gran salón.

-Nos gustaría hablar sobre la unión de nuestra hija Arriane con vuestro hermano con los Paxley.-habló dulcemente (hipócritamente, según Morgana) la mujer. Lilith Riell, antes Saveliev, de cabello negro y ojos castaños; casi idéntica a su cuarta hija.

Aamon sonrió falsamente y cuestionó:

-No recuerdo haber prometido ningún matrimonio de ninguno de mis hermanos con ustedes, señores Riell. -hubo una pausa. -¿O acaso están cuestionando mi memoria? -Morgana tuvo que contenerse para no dejar escapar una sonrisa. Su novio era bueno en la política. Muy bueno.

-Por supuesto que no, Lord Paxley. Pero estuvo presente cuando lo hablamos con vuestro consejo y no os negasteis. -dijo suavemente Ilius Riell.

-Que no me negara no significa que apruebe dicha unión.

-Pero el Consejo Paxley...

-¿Acaso es el Consejo quien decida sobre la Casa Paxley, Lord Riell? ¿Me estás diciendo que son ellos los líderes? -la amenaza era tan obvia que los lores de la segunda casa bajaron la cabeza.

-Sentimos haberlo ofendido, Lord Paxley. -Morgana apretó el brazo de su novio cuando lo notó tenso. Y sonrió imperceptiblemente cuando el chico se relajó.

El silencio duró unos segundos antes de que la mujer lo rompiera.

-¿Entonces el matrimonio no se celebrará?

-Lo siento señores Riell, pero no lo veo probable.

-Espero no ofender Lord Paxley, ¿pero acaso no quiere una alianza con la Segunda Casa ? 

-Por supuesto que la deseo Lady Riell. Pero no podrá ser mediante el matrimonio.

-¿Y por qué no Sir? ¿No es la mejor alianza el convertirse en familia? -cuestionó la azabache. Morgana debía admitir que tenía un punto.

-No lo niego, sería un honor convertirnos en familia. Mas les prometí a mis difuntos padres que nadie de nuestra familia sería obligado a casarse hasta los 25. Si sobrepasan la edad, entonces yo decidiré si mis hermanos se casan o no, y con quién lo hace. ¿Entienden Lores Riell?

-...entonces no seguiremos insistiendo.

-Gracias por su comprensión Lady Riell - tras aquello, se fueron. Morgana apoyó su cabeza en el hombro de su pareja.

-Eso ha sido un gran detalle por tu parte. El respetar la voluntad de tus padres y la libertad de tus hermanos. -él suspiró.

-No es fácil. Cada semana hay una nueva propuesta de matrimonio.