Capítulo 11

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Había pasado algunas dias desde aquel acontecimiento en el baño, todo a estado un poco tranquilo  y es por ello que ahora junto a Minki y unos cuantos más de sus sirvientes estaban jugando en el jardin al té con sus muñecas y una linda panza dificultando sus movimientos, Minki no se sentía capaz de juzgarlo, prácticamente crecieron juntos y ver desde pequeño como el menor era privado de los juegos enterneció su corazón al verlo jugar ahora mismo.

— La princesa Klarin quiere más té— Dijo el menor con dulzura levantando la tacita de porcelana a Minki quien simuló poner el líquido en él, con cuidado Hoseok dejo la taza en el pequeño plato que le correspondía a la muñeca mientras sonreía a las demás que estaban alrededor de él, vistiendo ropas hermosas y finas.

— ¿No te quieres unir a ellas Minki?

— Sería un honor para mí tomar el Té junto a usted y las princesas majestad— Le siguió el juego.

Hoseok soltó una risita juguetona moviendo sus muñecas jugando con ellas.

Taehyung recién llegaba de la cacería junto a sus hombres, unos cuantos aun salpicados de sangre, rápidamente unos sirvientes se acercaron a hechos para brindarles agua y llevar a los caballos a sus establos

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Taehyung recién llegaba de la cacería junto a sus hombres, unos cuantos aun salpicados de sangre, rápidamente unos sirvientes se acercaron a hechos para brindarles agua y llevar a los caballos a sus establos.

El rey Kim muy sonriente tomo el regalo que preparo con tanto esmero para su reina y pregunto por el, rápidamente se dirigió al jardín con dos hombres siguiéndole de atrás.

Muchos sirvientes los vieron asustados haciéndole una reverencia con sus cuerpos temblando, cuando llego a dicho lugar observo desde la entrada a su esposo jugando a las muñecas con sus sirvientes, estos lo miraban con dulzura, pero cuando por fin  se dejó observar, estos cambiaron su expresión rápidamente.

Hoseok los miro sin entender, aun no notaba la presencia de Taehyung, pero cuando este mismo arrojo a la mesa una cabeza decapitada grito con todas sus fuerzas y se levantó, la sangre alcanzó su vestido y el de sus muñecas, todo estaba arruinado.

— He cumplido con mi promesa mi Reina— Mencionó el mayor tomando sus hombros aun dándole la espalda —Té dije que haría lo que sea por tu perdon—

El menor observo horrorizado la extremidad, los colores abandonaron su piel al punto de quedar casi tan blanco como la nieve, con lentitud comenzó a mover su cabeza de manera negativa, abrió su boca para mencionar algo, pero solo se le escapo un gémido asustado, con lentitud y su mano temblando se la llevó a la boca para callar sus sollozos, comenzó a negar con más fuerzas y sus lágrimas ahora ya eran más que evidentes.

Frente a el estaba la cabeza del esclavo al que no toleraba, con una expresión horrible, su boca abierta su cara sucia y pálida, incluso uno de sus ojos no estaba en su lugar y solo contaba con una flecha en el.

El shock fue tan grande que Hoseok se desplomó en el piso, rapidamente sus sirvientes se acercaron a el, Taehyung lo levanto con cuidado y miro a sus súbditos hablando con autoridad.

El Tesoro Entre Tus PiernasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora