𝐌𝐈𝐍𝐎𝐑 | 𝒩𝒶𝓃𝒸𝓎 𝒲𝒽ℯℯ𝓁ℯ𝓇

𝗔𝗖𝗧 𝗧𝗪𝗢

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En la habitación se escuchaba el toca discos, el cuál reproducía la canción Nothin' at all la canción favorita de Windsor.

Dos chicas se encontraban sentadas en la cama, viéndose fijamente con una leve sonrisa.

Sia Windsor miraba con atención los labios de la castaña, realmente algo desesperada porque sus labios tocaran los de la chica.

Nancy soltó una leve risa al notarlo. Sin hacerla esperar más, llevó sus manos al mentón de la chica, ejerciendo un poco de fuerza para atraerla hacia ella, y romper el pequeño espacio que había entre sus labios.

La ojiverde de inmediato se acopló al besó, posicionó una mano en el hombro de la castaña, mientras que con su otra mano retiraba los mechones de cabello que se encontraban en el rostro de la chica.

El aire les comenzaba a faltar, por lo tanto Sia terminó alejándose con una sonrisa en su rostro. Ambas tenían sus respiraciones algo agitadas, mientras intentaban recuperar el aliento.

La chica rubia detuvo el toca discos, acomodando todas las cosas que había en su mesa de noche. Nancy la veía con una leve sonrisa, admiraba todo lo que la ojiverde hacía.

La mayoría estaban algo confundidos.

¿Cómo habían llegado a tal escena?

Después de aquel día de confesiones, pasó un largo mes de algunas citas entre las chicas.

Solían pasar sus tardes viendo películas, en algunos locales en donde compraban accesorios o simplemente para pasar el rato. Pero las citas favoritas de la rubia, siempre eran en las que recorrían el pueblo en el auto de la Wheeler mayor.

Entre tantas citas que llegaron a tener, se llegó el día en que Nancy Wheeler había aceptado al máximo que realmente había en ella nuevos sentimientos hacía una única persona, Sia Windsor.

Y ahora, eran la pareja que tanto deseaba la ojiverde desde hace tiempo.

Claramente había amigos que sabían sobre su relación, muy pocos, a decir verdad, ya que la castaña aún tenía ese miedo de que dirían al estar con la rubia, quién era menor que ella.

Aunque la ojiverde siempre la apoyaba sin importar algo, Nancy realmente agradecía el apoyó que Sia le brindaba.

— Según veníamos por un café — mencionó la castaña con una leve risa.

— Tranquila, yo lo traego — salió de la habitación apurada.

Nancy observó el cuarto de su novia, tenía las paredes pintadas de color gris. Al igual que tenía varias fotografías en collage de la cantante Heart.

Cuándo la ojiverde volvió a la habitación con la bandeja, la coloco en una pequeña mesa. Finalmente sirvió el café en una taza de color blanco, con algunas flores rosas de decoración.

Nancy tomó la taza, agradeciendole con una sonrisa.

El club audio-visual se encontraba en el sótano de los Wheeler's. Los había llamado el pelinegro, según el para algo muy importante.

Todos escuchaban con atención a Mike, a excepción de la pelirroja, ya que tenía sus audífonos puestos, los últimos meses parecía que se había desconectado del mundo.

— ¿En serio? — cuestionó Dustin incrédulo — Sospechas que Nancy y Sia son ¿Algo más?.

Mike asintió una vez más cansado — Sia me dijo que le gustaba Nancy, últimamente están muy juntas — comentó algo frustrado — Es malo.

— ¿Si? Y eso que te vendría involucrando a ti — cuestionó Max mientras se quitaba los audífonos.

— Bueno, en nada — aceptó — Pero ella es de nuestra edad, y Nancy es mayor de edad, es ilegal
¿Captan el problema? — mencionó mientras veía a cada uno.

— Claro que lo captamos — Lucas se paró del sofá — Te gusta Sia y estás celoso de que a ella le guste tu hermana.

— Cállate Lucas — pidió el pelinegro algo serio.

El de rulos abrió su boca sorprendido — ¡¿Te gusta Sia?! — alzó la voz sin creerlo.

Ante el silencio de Mike, Dustin negó levemente — ¿Entonces por qué le haces creer a Ce que todavía te gusta? — cuestionó — Y aún peor, le dices en la cartas que todavía la quieres.

— Ya lo sé — aceptó — Sólo de repente me gustó Sia, no puedo desaparecer ese sentimiento como si fuera fácil — explicó — Y pronto le diré a Ce, sobre todo ésto.

Dustin se sentó de nuevo en el sofá, está vez, con sus manos en el rostro mientras negaba con su cabeza — Ésto va acabar muy mal.

Max por su parte había fingido volver a escuchar su música, ella ya había deducido que al chico Wheeler le gustaba su amiga. Cómo también ella, era de las pocas personas que sabía sobre su relación con Nancy.

Max tenía que contarle a su amiga, y lo haría pronto.

— Eddie es su mejor amigo, seguro el tiene que saber algo — comentó Mike dándo vueltas por todo el sótano.

— Es mejor que si realmente es lo que supones, que ellas nos digan cuando estén listas ¿No? — propuso Lucas encogiendo sus hombros.

— Cómo sea — el chico tomó asiento — De igual forma me voy a enterar.

Los tres adolescentes se miraron entre sí, realmente Mike podría llegar a hacer muy intenso, y era uno de sus defectos que a nadie le gustaba.

Mucho menos a Sia, quién cada vez se alejaba más de él, ya que la incómodidad empezaba a crecer.