Hogar lejos del hogar. | 𝗦𝗵𝗶𝘀𝘂𝗻𝗮𝗿𝘂 |

⎯ O8 ♡ ๋

| FEBRERO 10 MESES |

Naruto estaba muy trastornada un día cuando en medio de la clase había sido convocada a la oficina principal para tener una reunión con el director.

Se paró en una habitación con muchos shinobi y kunoichi, todos chunin o superior. Alcanzó a ver los ojos de Orochimaru en la parte trasera de la habitación, ocultos en las sombras, pero optó por ignorarlo.

También vio a un Uchiha que veía a menudo, Shikaku Nara e Inoichi Yamanaka, los dos últimos a menudo buscaban a su hermano, lo que a menudo resultaba en que se unieran para comer o para una sesión de entrenamiento más corta.

Cuando los vio por primera vez, sintió un coro de emociones recorrerla. Estos hombres habían dado sus vidas por 'el bien mayor' durante la cuarta guerra, sin inmutarse ni permitir que la muerte los acobardara.

En su ocupación, la muerte era común y esperada, pero otra cosa era saber que morirías en cuestión de minutos. Shikaku les había dado consejos a los que estaban en primera línea e Inoichi los había transmitido.

Ella no permitió que ninguna de sus emociones se mostrara. De hecho, cuando vio a Shikaku por primera vez, pensó que era Shikamaru, el parecido entre los dos era realmente asombroso, especialmente porque su rostro no tenía cicatrices.

El director y su profesora también estaban allí, así como la profesora de la clase de la que formaba parte Iruka sensei.

Todos la miraron directamente, lo que hizo que se moviera sobre sus pies, nunca había sido de las que la miraban fijamente a pesar de que siempre buscaba la atención de todos cuando era niña.

"Con la condición de que hagas un examen. ¿Qué vas a hacer?", colocó el papel sobre el escritorio y cruzó las manos de manera similar a como lo hace el sandaime.

Naruto sabía lo que elegiría, avanzar un año. Mientras que el lado teórico la aburriría un poco, el lado práctico la mantendría a la altura de sus planes. Entrenar en su propio tiempo o cuando minato o jiraiya la sacaron de la escuela no sería suficiente. Sin embargo, temía lo fatigada que estaría al final del día.

Uno pensaría que ser una Uzumaki le daría mucha resistencia, y así fue. Pero no en la medida de lo que Naruto le estaba haciendo a su cuerpo de seis años.

"Me gustaría subir un año". Dijo, tratando de ocultar su nerviosismo, recordándose a sí misma que tendría que subir de rango más rápido para cambiar todo lo malo que había sucedido.

El director asintió y le entregó el papel y un bolígrafo para que firmara. Quince minutos después, estaba lista y se paró frente a la puerta de su nueva clase con su ex maestro de salón con ella.

Si bien su nueva clase todavía era aburrida, había ciertas personas a las que reconoció; Hayate de los exámenes de chunin, Mizuki el traidor, Doto del clan Akimichi y su sensei favorito Iruka. En general, todos variaban con su edad.

Iruka se sentó dos filas delante de ella y tan pronto como sonó la alarma de descanso, inmediatamente se cayeron bien. Parecía que él era muy parecido a cómo había sido ella cuando era niña; un alborotador bocazas.

Juntar a dos alborotadores bocones no era una buena idea, la única diferencia entre los dos era que Naruto podía controlarse a sí misma, para alivio de sus compañeros y maestros.

Había otra persona en la clase que anteriormente había estado haciendo todo lo posible por evitar discretamente, pero ya no podía hacerlo.

Shisui no shunshin estaba sentada justo frente a ella. Ella había estado tratando de evitarlo porque, por alguna razón, su ojo, que en realidad era el ojo izquierdo de Shisui, seguía intentando activarse.