Hogar lejos del hogar. | 𝗦𝗵𝗶𝘀𝘂𝗻𝗮𝗿𝘂 |

⎯ 12 ♡ ๋

Naruto comenzó a caer, que fue cuando Kakashi instintivamente la agarró. Ella se había quedado dormida, sorprendiéndolo de cómo podía dormir tan rápido.

Miró el reloj y maldijo, Minato sensei o Lord Jiraiya estarían allí en cualquier momento, y aquí la chica dormía. Levantó su esbelta figura, sorprendido por lo poco que pesaba mientras debatía dónde ponerla.

Podría ponerla en el sofá donde le gritarían por no ser muy hospitalario, y si la pusiera en su cama, Minato se volvería loco y no escucharía razones.

Sintió que era más seguro ponerla en su cama y quedarse en una habitación diferente a la de ella, de esta manera no sería regañado por el sennin y su sensei combinados.

Colocándola en su cama, envolvió sus sábanas alrededor de ella y observó cómo se enterraba en ellas, enroscando su cuerpo alrededor de las sábanas mientras las agarraba con fuerza. Miró a su alrededor y encontró una almohada extra y la colocó donde estaba su brazo, una pequeña sonrisa abriéndose paso en su rostro mientras la veía abrazarla.

Una vez que se dio cuenta de que básicamente estaba siendo un mirón, salió de la habitación, con la puerta entreabierta, y se sentó en su sillón.

Pensó en lo que había dicho Naruto, sobre su padre y los aldeanos. Tenía razón en una cosa, él no cambiaría de opinión. No importa cuán determinado fuera la rubia hiperactiva, él era igual de terco.

En algún momento debió haberse quedado dormido porque se levantó de un empujón, sorprendido por los golpes en la puerta. Vio a Naruto frotarse los ojos mientras se sentaba en la cama, rápidamente miró la hora y vio que solo había pasado media hora desde que se había quedado dormida.

Fue a la puerta rápidamente. Las únicas personas que vinieron aquí fueron Lord Jiraiya, Kushina y Minato sensei. Para su sorpresa, Minato y Jiraiya estaban en su puerta, Minato había sido el que abusó de su puerta causando que él mirara a su sensei.

"¿Estaba tratando de romper mi puerta, sensei?"

Les hizo un gesto para que entraran, caminando detrás de ellos después de que lo hicieran. "No respondiste cuando llamé por primera vez... ¿dónde está Naruto?"

Señaló la puerta de su dormitorio cuando salió la rubia, con una sonrisa brillante pero con ojos cansados. Corrió pasando a Minato y directamente a los brazos de Jiraiya. El sennin la levantó en alto, con una amplia sonrisa mientras ella se reía y saltaba en sus brazos.

"¡Papá! ¿A dónde fuiste?" ella hizo un puchero y se cruzó de brazos frente a ella. Este comportamiento hizo que él diera un paso atrás. Cada vez que había visto a la niña, ella había sido nada menos que una niña madura, pero ahora está actuando como una niña real.

Ignoró por completo a su hermano que estaba parado no muy lejos de Jiraiya, una tristeza distante nublaba sus ojos.

Jiraiya se rió entre dientes, "Sensei me llamó a su oficina, eso es todo".

Ella inclinó la cabeza hacia un lado mientras dejaba que sus brazos se envolvieran alrededor de su cuello, "¿Tienes que ir a otra misión?"

"No, mocosa. Solo quería que respondiera algunas preguntas, eso es todo". Le revolvió el cabello y miró a Minato. La sonrisa en su rostro se desvaneció cuando miró a su alumno, "¿No quieres despedirte de tu hermano, Naru?"

Ella hizo un puchero antes de mirar a su sensei, la luz en sus ojos se atenuó ligeramente al igual que su sonrisa, pero mantuvo su gran sonrisa, "¡Adiós, aniki!" ella saludó con la mano y luego miró a Kakashi, que ahora era muy bajo en comparación con ella, "Nos vemos, senpai", levantó una ceja ante el cariño, pero le devolvió el saludo cuando se fueron.

Una vez más un silencio incómodo cayó en su hogar. Miró a su sensei que se había sentado, sus manos arrastrándose por su rostro, "¿Sensei?"

"Creo que acabo de arruinar las cosas con Naruto de verdad. Y no sé cómo arreglarlo".

[...]

"¿Qué quieres decir con que quiere decirle a la gente?" gritó una muy sorprendida Naruto. Jiraiya y ella acababan de llegar a casa cuando él le contó lo que había pasado en la oficina.

"No se lo dirá a todo el mundo. Pero se lo dirá a tu sensei y a quien termine como tu instructor jonin, a tus compañeros de equipo y a quien te cuide. Todos los ANBU estarán informados, al menos los que te vigilan. También te vigilarán más de cerca mientras estés en el pueblo. También deseaba hablar contigo pronto". Él respondió de mala gana, preocupado por cuál sería su reacción.

"¿Quieres decirme... el sandaime tiene la intención de hacerme la vida imposible por segunda vez y ni siquiera lo sabe?"

"Al menos esta vez no te culparán por la muerte de sus seres queridos…" ofreció Jiraiya, sin saber qué más podía decir para consolarlo.

Cuando el ANBU vino a escoltarlo a la oficina, sabía de qué se trataría, pero había esperado más allá de toda esperanza que estuviera equivocado. Había pensado que Minato valoraba el amor de su hermana más de lo que mostraba, pero claramente se había equivocado.

No culpó a su alumno, después de este incidente no había forma de que el sandaime no fuera informado ya que los ANBU estaban observando a Naruto de cerca. Eso no impidió que sintiera desconfianza hacia su alumno. Dijo que no había deseado esto para Naruto y aquí estaban.

La historia se repetía.

Algo así como.

"Estoy seguro de que con la cantidad limitada de personas informadas, las cosas deberían funcionar mucho mejor". Él le sonrió y se levantó del sofá, afirmando ampliamente que iba a preparar la cena, lo que a su vez hizo que ella pareciera completamente asqueada.