Los nuevos Merodeadores y el Dios embaucador[terminada]

Capítulo 57: El fin del caos de Halloween

Capítulo 57: El fin del caos de Halloween

Michael, McGonagall y Crowley caminaron hacia la cámara que estaba escondida detrás de la abertura de la estatua. Cuando entraron a la biblioteca, los niños todavía charlaban con entusiasmo sobre el conocimiento oculto en ella, e incluso Flitwick estaba entusiasmado con eso.

"Niños, nos dirigimos de regreso al castillo. Me temo que tienen que venir con nosotros", dijo Michael.

"Pero... pero ¿qué pasa con todos esos libros? ¿Todo este conocimiento?" Hermione se quejó.

Michael miró a su alrededor y tarareó en voz baja antes de mirar a Crowley.

"No me importa lo que hagas con los libros", dijo el demonio encogiéndose de hombros. "Solo los agregué para el entretenimiento de Jǫrmungandr. Están encantados de leer el contenido en voz alta cuando les tocas el lomo".

"¿Los agregaste?" Draco preguntó confundido cuando se dio cuenta, y su rostro se iluminó con asombro. "Espera, ¡¿tú eres Salazar Slytherin?!"

"Lo fui hace mucho tiempo, sí", respondió Crowley. "Pero ya no más."

"¿Pero cómo puedes seguir vivo?" preguntó Neville.

"¿Quién dijo que estoy vivo?" Crowley respondió con una risita mientras sus ojos brillaban completamente rojos.

Cuando lo vieron, los ojos de Hermione se abrieron como platos, mientras que Draco y Neville saltaron hacia atrás. Sin embargo, los gemelos estaban intrigados. Sam, que ya sabía quién era Crowley, lo miró fijamente por sorprender a los demás.

"Crowley, te pediría que no asustes a mis alumnos", lo reprendió Michael con severidad, de lo que Crowley solo se burló.

"¿Eres un demonio?" preguntó Draco con incredulidad al mismo tiempo. "¿Pero cómo? ¿Por qué?"

Parecía algo perfecto ahora que Loki les había enseñado todo sobre demonios y otras cosas. Sin embargo, nunca pensó que conocería a uno en persona. No solo uno al azar, sino el que una vez fue conocido como Salazar Slytherin. Draco no sabía si debería estar asombrado o cauteloso porque el hombre era un demonio.

"Bueno, eso sucede cuando estás borracho y enojado y no le prestas atención a quién exactamente te estás quejando de tus problemas", explicó Crowley con un suspiro. "Pero esa es una historia para otro momento".

"Así es. Así que, ya que Crowley no tiene ningún problema con eso, creo que esos libros serían una excelente adición a la biblioteca de la escuela, ¿no cree usted también, Sra. Granger?"

Hermione se sonrojó porque Michael le estaba preguntando, pero asintió con entusiasmo, y parecía que ella no era la única que estaba feliz con esa solución. Draco, Neville y Sam también parecían ansiosos por poder leer algunos de los libros. Sin embargo, eso no fue nada para Flitwick, quien estaba saltando un poco con anticipación, su lado Ravenclaw saliendo con toda su fuerza.

"Bien, enviaré a un elfo doméstico para que le entregue los libros a Madame Pince", dijo Michael. "Sin embargo, por ahora, regresaremos al castillo principal. No dudo que tengas muchas preguntas y me encontraría más cómodo en mi oficina con té caliente".

Todos los demás asintieron en señal de consentimiento. Tan agradable como era estar en una parte del castillo perdida hace mucho tiempo, para la discusión que se avecinaba sería mucho mejor estar en un lugar cómodo.

Entonces, todos juntos salieron de la Cámara, Crowley la selló nuevamente aunque la cambió para que los maestros y el director pudieran entrar en cualquier momento que quisieran, y subieron los muchos tramos de escaleras hasta la oficina del director.