cap 14

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Ninguna de las fantasías que había tenido sobre su pequeña saltamontes se acercó a la realidad. Sus labios eran llenos y cálidos contra los de él mientras se movía sobre ellos en un beso hambriento.
Él le dio una oportunidad. Demonios, él la dejo correr fuera de su casa en
nada más que sus bragas y una camiseta muy corta. Tendría que hablar con ella sobre su exhibicionismo, pero más tarde… mucho más tarde. Ahora mismo estaba ocupado pasando sus manos sobre los pechos más perfectos en la creación. Eran grandes, pero no tan grandes. Ellos simplemente eran perfectos para sus manos.
Ella gimió y él ataco, deslizando su lengua dentro del cálido cielo que ella
llamaba boca. Su lengua salió a jugar y deslizarse contra la de él, haciéndolo gruñir en su boca.
Las manos de ella se deslizaron por su pecho, enviándole olas de placer a
través de su cuerpo. Él había soñado con ella tocándolo. Amaba la manera que pasaba sus dedos a través de su cabello en la noche cuando se sostenían al otro.

Había fantaseado con ella pasando sus dedos sobre el resto de su cuerpo.
Con un último profundo beso él movió su boca abajo a lo largo de su
mandíbula y pasó la lengua por su cuello y entre sus pechos. Sus manos nunca dejando de tocar. Agarró un pecho y lo sostuvo hacia su boca como un ofrecimiento. Corrió su lengua alrededor de un gran, duro pezón, ganándose el gemido más erótico que jamás hubiera escuchado de una mujer antes de chuparlo entre sus labios.
Liberó el pezón con un ruidoso pop y cambó su atención al siguiente.
Después de un momento sus manos se deslizaron bajando por su estómago
donde agarró sus bragas. Ella no vaciló y alzó sus caderas. Su pequeña saltamontes era una buena chica. Empujo sus bragas mientras besaba su camino hacia abajo.
Cuando se habían ido, él gentilmente la empujó de espaldas hacia la cama y movió su boca de un muslo interno al otro.

—Me pregunto si eres tan dulce como te imagino, Sakura —dijo él, besando
su muslo antes de abrir más sus piernas. Incluso en la débil luz de la habitación él podía ver su sexo claramente. Los rosados labios estaban hinchados por la excitación y cortos rizos estaban empapados, haciéndolo lamerse sus labios con
anticipación.
Él presiono un beso provocador cerca de su punto.
—¿Eres dulce, Sakura? ¿Hmmm?
Su respuesta fue un gemido.
—Apuesto que eres más dulce que la miel —murmuró mientras se inclinaba y pasaba su lengua entre los hinchados labios rosados en una larga lamida. Cerró sus ojos mientras gemía profundamente. Más dulce. Mucho más dulce de lo que imaginaba.
Las caderas de Sakura se dispararon fuera del borde de la cama, pero él
estaba listo para eso. Agarró sus pies y los colocó sobre sus hombros.
Usando sus pulgares, la extendió abriéndola más y casi se vino por la vista.

Con sus pulgares extendió el líquido caliente transparente sobre su pequeña protuberancia.
Sakura gimió.
—¿Te gusta eso? —preguntó él con una voz ronca—. Entonces te encantara esto.
Él corrió la punta de su lengua alrededor de la pequeña protuberancia, con cuidado de no tocarla. Sakura se retorció bajo sus manos tratando de encontrar su
alivio. Él deslizo dos dedos dentro de ella, pero cambió a uno cuando se dio cuenta cuán apretada estaba. Estaba feliz de no ser el único que no había tenido sexo en un tiempo. La quería desesperadamente para él.
Finalmente corrió su lengua sobre su sensible pequeña protuberancia,
ganándose un gemido entonces lo hizo otra vez y otra vez mientras lentamente deslizaba su dedo dentro y fuera de ella. Él tuvo que cerrar sus ojos. Estaba muy cerca de venirse y ella ni siquiera lo había tocado.

Rezó para no avergonzarse a sí
mismo esta noche. Había planeado estar dentro de ella la mayor parte de la noche.
Su vagina estaba apretándose alrededor de sus dedos como una tenaza. Él chupó su clítoris con sus labios mientras movía su lengua sobre ella.
—Sasuke… Sasuke… —se quejó ella diciendo su nombre suavemente—. ¡Sasuke! —gritó su nombre mientras su cuerpo palpitaba fuerte alrededor de su dedo.
Él espero hasta que ella yació sobre la cama jadeando antes de alejarse y
lentamente lamer sus labios y dedos para limpiarlos. Se inclinó y la besó.
—Condón —dijo él a través de dientes apretados. Estaba al borde de
correrse. Nunca antes en su vida había estado tan excitado. Quería follarla en cada posición imaginable y otras que estaba seguro que eran físicamente imposibles,
pero estaba dispuesto a intentarlas.
Sintió a Sakura moverse debajo de él. Fue tan rápido que casi no lo notó.
Antes de que pudiera preguntar que estaba mal ella lo empujó. Mierda. Ella todavía estaba molesta por lo de antes.
—Sakura, Yo… mierda —gimió fuerte, bueno gritó realmente, mientras Sakura en un rápido movimiento tiraba de sus bóxer hacia abajo y lo tomaba en su caliente y mojada boca.

EL VECINO INFERNAL (Sasusaku)Where stories live. Discover now