Basada en la canción de Miranda! "Tu misterioso Alguien".
Todo era claro, la relación de Marcy y Sasha se había convertido en una pesadilla, una tercera persona era la culpable.
¿Por qué? Penso que todos estaba bien.
Pero parecía que ella prefería a...
Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.
Aclaración: No soy juez, ni soy abogado ni soy de recursos humanos o donde sea que manden los correos. Espero se entienda, antes de hacer los episodios investigo un poco sobre esto pero no encontré mucho de este tema. Si me puedes corregir te lo pido que sea con respeto.
Una semana, una semana que no sabe nada de Marcy. Pareciera como si la menor nunca hubiera existido pues nadie le deba alguna noticia de ella.
Suspiró mientras tallaba sus ojos, estaba cansada y tenia que dormir, el trabajo la estuvo matando esa semana.
Se recostó en el sillón de su departamento, extrañaba la comodidad de su casa pero no iba a dejar que Marcy se fuera de ella, si, fue ella quien la compro pero ese hogar igual era de Marcy.
Prendió el televisor, necesitaba escuchar ruido en ese hogar para no sentirse en soledad. Observo su celular, tenía mensajes de Luz, Boscha, Gus, un tipo llamado Caleb y su antiguo vecino, Steven. Pero no había rastro de Marcy.
Se mordió su pulgar, podría llamarla o llamar a Anne, pero esta última seguramente estaría enojada, se supone que igual era su mejor amiga pero Anne siempre se pondrá del lado de Marcy.
Suspiró mientras contestaba los mensajes, el de su antiguo vecino era un recordatorio de una fiesta a la cual jamás iba, pero Steven era de tan buen corazón qué siempre las invitaba desde que llegaron a ese vecindario, y los otros mensajes eran de una fiesta qué los amigos de Boscha estaban organizando.
Se levantó del sillón, dispuesta a irse de ahí pero el timbre de aquel hogar sonó y con las esperanzas de que fuera Marcy corrió hacia la puerta.
Pero sus esperanzas se fueron al piso al ver a su vecino, Marco Díaz.
—Oh, hola.— Saludo secamente asustando al Mexicano.
—¡Buenas noches! Perdona qué te moleste Waybrigth, pero revisando mi correo note que se equivocaron y pusieron el tuyo en mi buzón ¿puedes creer eso?
"¿A donde me vine a meter?" Pensó mientras recibía su correo.
—Solo era eso y ¡ah! Quería pedirte si puedes dejar o cambiar tu saco se boxeo a otro lugar. Tengo un bebé de 3 meses y le cuesta un poco dormir, yo no digo que no hagas ejercicio solo te pido que lo hagas en otro horario o que sea en otro lugar.— Sasha de 13 años le hubiera cerrado la puerta cuando dijo la palabra "bebé" pero no, ella ya había cambiado.
—Claro.— Dijo entre dientes.
—¡Genial! Gracias vecina.— Y con eso, el chico se fue.
Entro de nuevo a su hogar, observando su correo.
—Basura.— Dijo botando el primero.— Basura. Basura. Basura. Basura.— Le molestaba qué le enviaran correos de suscripciones a servicios sin sentido.— Basu... ¿ah?
"Orden del Juez"
Abrió el sobre, leyendo cada párrafo y entre cada línea qué leía su cara enrojecia de la irá.
