Capítulo 31

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Tony observó como tanto Wade como Harry se llevaban la peor parte del ataque de frente, ambos estaban mucho más en sintonía con los poderes que les había concedido Lady Muerte, además ambos estaban mejorados al margen de ser un elegido de Lady Muerte.

Saliendo a hurtadillas por la parte de atrás, subió a la estructura de la que colgaban tanto Rhodey como el Presidente, dirigiéndose en primer lugar a su mejor amigo, ya que el otro hombre no tenía muy buen aspecto. Estaba sudando y parecía jadear de agotamiento.

-Ornitorrinco, ¿estás bien?-.

Rhodey sacudió la cabeza, -me inyectaron algo después de que me quitaran el traje-.

Tony frunció el ceño, -¿algo naranja?-.

Rhodey se limitó a asentir con la cabeza, haciendo que Tony rechinara los dientes, por lo que parece que a Rhodey le inyectaron extremis, muy probablemente como respaldo cuando lo que sea que estuvieran montando aquí no funcionara. Frunciendo el ceño, soltó al militar, ayudándole a acomodarse en una de las barras de la perforadora de petróleo.

-Voy a soltar al Presidente ahora, de acuerdo, parche agrio, ¿vas a estar bien?-.

Rhodey se agarró a uno de los barrotes, antes de asentir -Lo haré, ve a sacar al Presidente de aquí-.

Asintiendo, Tony fue y sacó al presidente de sus límites, ayudando al hombre mayor a ponerse de pie y comprobando que no tuviera ninguna herida que no pudiera esperar. Al no encontrar ninguna, ayudó al presidente a bajar, justo cuando llegó el primero de sus trajes.

-Sr. Presidente, le voy a llevar a casa, ¿de acuerdo? Pero necesito que cierre los ojos, ya que sé que no podrá pilotar un traje-.

El Presidente Ellis tragó grueso, antes de asentir -Lo haré. Gracias, Sr. Stark-.

Asintiendo, hizo que uno de los trajes de búsqueda y rescate envolviera al presidente antes de salir disparado hacia el Pentágono, llevando al presidente a un lugar seguro, donde él, junto con los salvados del Air Force One, debería poder encontrar a los responsables de esto, entre ellos su propio vicepresidente.

Mientras su traje se llevaba al Presidente, Tony fue sacado de su estupor por Rhodey que le gritaba, esquivando, encontró a Killian de pie frente a él su piel brillando de un naranja muy poco saludable probablemente el extremis que había desarrollado y se había inyectado.

Frunciendo el ceño, se dio cuenta de que podía esquivar los puñetazos y patadas mejorados que el hombre intentaba asestarle, lo que le hizo bromear sobre problemas de rendimiento. Al fin y al cabo, se trataba de alguien que se había convertido en un supervillano sólo porque Tony no se presentaba a lo que se le invitaba. Pero incluso entonces, este loco se había acercado a él en una fiesta de año nuevo en los años 90, cuando era conocido por ser un gran bebedor y alguien que llegaba tarde a las reuniones todo el tiempo.

Poniendo los ojos en blanco, se apartó del alcance de un puñetazo que Killian lanzó una vez más, para su ira, el golpe hizo contacto con la barandilla en la que Rhodey seguía de pie, llevándoselo todo por delante, su mejor amigo con él.

Mirando al hombre que tenía delante, Tony miró a su alrededor y vio a Harry y a Wade luchando contra los matones que Killian había contratado, o convencido para que le siguieran, más de la mitad de ellos los reconocía de los archivos que había encontrado en la página web de AIM.

La forma en que ambos danzaban a su alrededor, Harry con una guadaña y Wade con sus katanas, hizo que Tony se sintiera un poco más seguro, todos los que recibían un golpe directo nunca se levantaban, haciéndole notar el brillo alrededor de las katanas y la guadaña, así que ambos estaban canalizando su don de la Muerte, asegurándose de que esta gente recibía su cuota y era transportada, o sus almas eran transportadas, a cualquier otra vida después de la muerte en la que creyeran.

BETWEEN TECHNOLOGY, MAGIC AND DEATHWhere stories live. Discover now