Bella se acercó y dejó a sus hijas junto a Draco, quien movió su manita saludándolas, pero volvió toda su atención al otro niño, Belladonna intentó acercarse a Harry pero Draco se interpuso y abrazó como peluche al niño de ojos verdes.

- Mío! No luyo Bell

- Dalo, queyo ablazal mien

- ¡Ño!

- Maaa, Dalo malo, Mil di Dalo dame

- ¿Qué pasa dulzuras?

- Ma, Hali mío di Bell no sulo

- Cariño, Harry no es un objeto puede ser tu amigo pero también puede ser amigo de tus primas.

- ¡Ño! Mío

- Ta blien Dagón yo tulo

- ¡Tii! Tú mío

- Tlia Cissy yo sholo queyo ablazal Hali

- Bien Dragón, tu prima solo quiere darle un abrazo a Harry, no te lo va a quitar.

- mmm...

- Dragón.

- Blien pelo sholo uno

- Wiii

Pero antes que Belladonna logrará abrazar a Harry Mirella se le adelantó y lo abrazó, lo jalo y se lo dió a su hermana, el pobre Harry no sabía qué hacer y se dejó.

- Muto muto! Hali dame!

Draco parecía muy protector con el pequeño Harry, pero las niñas ya habían logrado su objetivo por lo que le regresaron su amigo a Draco y decidieron jugar entre ellas, Harry no entendía muy bien que había pasado, entendía a Draco porque su propio hermano también lo abrazaba cuál peluche cada vez que podía pero no entendía a las niñas, le restó importancia cuando Draco volvió a hacer flotar los juguetes alrededor suyo, las niñas miraron el espectáculo, se miraron y sonrieron, se tomaron de las manos y pequeñas flores empezaron a brotar del suelo de madera, las cogieron y las lanzaron a Draco y a Harry bañándolos en flores, los cuatro niños rieron con eso, por otro lado Narcisa había vuelto a su asiento junto a su esposo y miraba maravillada a los niños, Bellatrix, lloraba y se quejaba de la falta de una cámara, Lucius intentaba calmarla diciéndole que siempre tenía al rededor de Draco al menos un elfo doméstico oculto con una cámara y que lo más probable es que ya todo haya quedado fotografiado, el severo maestro de pocienes tenía el rostro relajado y sus facciones estaban adornadas con una pequeña sonrisa, Sirius no pudo evitar sonreír también, tal vez sean prospecto de serpientes pero aún así se veían adorables, casi se arrepentía de no convencer a James de dejar traer a Xavier para que se uniera al grupo, casi.

- Bien Sirius, que es eso tan importante de lo que nos querías hablar?

- ¿Qué? ¡Oh sí! Tengo estás cartas de gringotts para ustedes.

- Porque el banco no nos las envió directamente? ¿Por qué nos las entregas tú?

- Es un tema delicado y preferiría estar presente para explicarles o responder dudas lo mejor que pueda, sinceramente Regulus sería mejor explicándolo ya que fué él quien me explicó el tema en un principio, pero como nueva cabeza de familia asumo la responsabilidad.

Ambas miraron dudosas a Sirius, luego se miraron entre ellas, asintieron y abrieron sus sobres al mismo tiempo, mientras leían ambas parecían cada vez más asombradas.

- ¿De verdad hay una cura para la locura Black?

- Si Cissy, es un poco tediosa, pero funciona, Reggie, un primo nuestro y yo hemos tenido nuestra primera sesión y realmente noto la diferencia, estoy aquí sobretodo para recomendarlo y recomendar que lo hagan con sus hijos también, es indoloro, al menos para los pequeños, y solo te deja un poco cansado por lo que no les haría daño a los niños.

- Aquí dice que es una vez al año por cinco años.

- Quizá más quizá un poco menos, todo depende de cuan profunda es la locura en cada uno de nosotros y por lo que puedo ver Draco ya está dando una muestra de esta con Harry, pude notar un aumento de su magia mientras intentaba alejar a sus primas de Harry, pero como aún es pequeño creo que no categorizaría como locura aún.

- ¿Qué dices Bella?

- Yo... Quiero lo mejor para mis hijas, sé muy bien que estoy un poco loca y no quiero eso para ellas, lo haré Cissy, y también llevaré a mis hijas.

- Lucius...

- Es tu decisión querida, pero si quieres mi opinión yo lo haría, por lo que me has contado es algo que puede ser contraproducente, a pesar de ser tradición de tu familia.

- Mmm... Bien, yo también lo haré y llevaré a Draco.

- ¡Genial! Debo admitir que se lo han tomado mejor que Andy, ella casi me hechiza por insinuar que podría tener momentos de locura.

- Andromeda nunca creyó en esa tradición en específico, es normal que no quisiera escucharte.

- No hablemos de esa traidora de sangre.

- Bella...

- No

- Bien, cambiemos de tema, creo que es momento de que Draco abra sus regalos.

- Si ibas a esperar hasta este momento porque le diste el mío temprano?

- Porque mi Dragón se dió cuenta que era de tu parte, si el envoltorio negro con verde no es una señal, y no pudo esperar.

Los adultos se pusieron de pié y se acercaron a los niños.

- Dragón es hora de los regalos.

- Shii, Sev me pudo quelar con Hali?

- No Dragón, Harry tiene que volver con su mamá.

- mmmm, pelo vendla a velme?

- Si tus padres quieren.

- Pa! Ma!

- Tendremos que hablar con los padres de Harry, pero creo que no habrá inconvenientes, ahora Dragón, ¿quieres tus regalos?

- Shiiii! Legalos!

Primero Bellatrix hizo que su hija mayor, Belladonna, le diera su regalo, un castillo de bloques mágico, luego fue el turno de Mirella, que le dió crayolas que cambian de colores, de parte de Bellatrix su esposo y el hermano de éste le dieron varios conjuntos de ropa que combinaban con sus ojos, sorprendentemente de Sirius recibió unos libros de cuentos que soltaban música y sonidos cuando se tocan ciertas imágenes, Harry le dió un peluche de Dragón verde con gris, Severus le dió un collar con encantos protectores, y de parte de sus padres una escoba de juguete que no se levantaba más de cinco centímetros del suelo y mucha ropa.

Draco estaba feliz pero no soltó en ningún momento a Harry y luego en su otro brazo no soltaba su nuevo dragón de peluche, los niños jugaron un rato más y los adultos los veían y conversaban de cosas banales, Lucius les sirvió a todos una copa de licor élfico y pasaron un buen rato, Severus logró pasarle el mensaje de Lily a Narcisa y de paso le dió una carta de parte de la pelirroja, en total fué un buen día, un poco más tarde los niños comieron un poco de pastel con leche y se quedaron dormidos, Draco abrazado a Harry, Bell abrazaba a Harry por la espalda y Mir a Draco también por la espalda, era un cuadro muy bonito, dejaron que durmieran un par de horas mientras los primos se abrían un poco más entre ellos gracias al licor y Lucius y Severus hablaban en voz baja sobre las últimas órdenes del Señor Oscuro.

Una vez pasadas las dos horas los niños se despertaron y los adultos decidieron que ya había sido suficiente diversión por el día y cada uno debía volver a casa, Bellatrix fue la primera en hacer que sus hijas sé despidieran con un abrazo y de parte de Belladonna, que era la más expresiva, un beso en la mejilla a cada niño, se despidieron de los adultos y del nuevo tío Siri, o como ellas lo llamaban Silli, lo que hizo reír a todos, Sirius se despidió de Draco, quien también lo llamó Silli, y fue el turno de Severus de intentar despedirse e intentar hacer que Draco soltara a Harry, lo cual parecía imposible, entre palabras dulces, que nadie creía posible que el hombre fuera capaz de decir, y muchas promesas de volver a venir a verlo con Harry, Draco soltó al pelinegro, que nuevamente tenía un nido de pájaros por cabello, se despidieron todos y usando un traslador especial que los llevaría a casa de Lily y James ambos hombres con Harry se aparecieron de ahí.

Un simple errorWhere stories live. Discover now