Llega el momento....

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Cómo os prometí comienzo una nueva historia, esta vez sin seguir el día a día de sus vidas sino dejándome llevar por mi imaginación, con guiños a la realidad pero no tanto como en mis dos historias anteriores.

Gracias a todos por seguirme, dejar likes y comentarios.

Vamos con Llega el momento..... espero que os guste.


Narra Mónica

Estaba reventada de manera literal de toda la semana trabajando y madrugando. Hacer el telediario matinal era un caramelo periodísticamente hablando, lo presentaba en solitario, me veían en américa latina un montón de gente pero los madrugones que tenía que pegarme no se los deseaba a nadie. A las 4 de la mañana ya tenía que estar en la redacción dando el callo, así que llegaba el viernes y sólo tenía ganas de tirarme en el sofá y dormir. Pero este viernes había quedado con amigas de la redacción, íbamos a un garito donde cantan en directo, gente que está empezando y tal.... la verdad no me apetecía mucho pero no podía poner más excusas, les estaba dando plantón desde hace varios viernes.

Así que allí nos presentamos en el garito, se llamaba "El búho real", hoy tocaba Conchita, Pedro Blues y una tal Vanesa Martín, bueno.... no conocía a nadie pero la música es una de mis pasiones y de vez en cuando acudía a sitios de música en directo, estar cerca del artista me gustaba y hace que la música se sienta más y mejor.

Cenamos de picoteo antes de ir, y allí comenzaron a correr las rondas de cerveza casi sin descanso, yo no estaba nada acostumbrada a beber, entre semana no salía apenas nada y el fin de semana lo dedicaba a descansar y recuperar algo de sueño.

Escuchamos a los dos primeros artistas y ya le tocaba el turno a Vanesa Martín...pasó justo a mi lado y al mirarme una conexión se creó entre sus ojos y los míos o eso me pareció o no se la verdad.... pero algo paso. Ella nos dedicó una sonrisa y se subió al escenario a cantar.

Patri.- ¿Te gusta?

M.- ¿Eh?

Patri.- ¿Si te gusta como canta?, yo la he oído varias veces ya, cuando la veo anunciada suelo venir y cada vez traigo a alguien nuevo para que la escuche, esta vez te ha tocado a ti oírla por primera vez.

M.- La verdad es que me gusta, las letras son muy intensas, la verdad... me gusta si...

Patri.- Me alegro, a ver si tiene suerte y saca un disco pronto, venga voy a por otra ronda

M.- Buff, yo no se si puedo beber más la verdad, llevo un buen pedal creo....

Patri.- ¡Venga Mónica!, la noche es joven

Narra Vanesa

Otra noche el búho real, cada vez venía más gente a verme, el boca a boca comenzaba a funcionar, por fin veía que quizás mi sueño podría realizarse.... o no...

Poco a poco y pasito a pasito he pasado de tocar los días que no acudía mucha gente al bar, es decir los lunes y martes a tocar en los días que se solía llenar, los viernes y fines de semana.

Aquí me planté en Madrid, para intentar cumplir mi sueño, escribir canciones y que la gente disfrute con ellas y las haga suyas. Sólo me falta un golpe de suerte.

Termino ya de cantar y me dirijo un momento al baño, comienzo a notar el cariño de la gente cuando paso entre las mesas, antes he visto a una chica muy guapa, nos hemos mirado pero ahora no está en la mesa en la que la he visto antes, igual se ha marchado sin verme cantar.

Llego al baño y veo que está ocupado, toco en la puerta pero no obtengo respuesta, al rato oigo como alguien está vomitando...

V.- ¿Hola?, ¿Estas bien?

No obtengo respuesta, pero al momento oigo tirar de la cadena y salir a la chica que me había parecido tan guapa antes, ahora la verdad no tenía buen aspecto.

M.- Perdona, puedes pasar si quieres... está todo limpio tranquila

V.- ¿Estas bien?, estas algo pálida

M.- Eh, si, bueno, ahora mejor, creo que he bebido demasiado, no estoy acostumbrada últimamente a hacerlo la verdad y se me ha revuelto el estómago...

V.- Bueno, a veces viene bien echarlo todo fuera, si me esperas te invito a algo

M.- Te lo agradezco pero hoy creo que no voy a beber nada más, otro día si eso, ¿Vale?

V.- Vale, ey, ey, cuidado...- le dije cuando dio un traspiés, la sujeté con fuerza y la atraje hacia mí dejando su cara a escasos centímetros de la suya, nos miramos y la conexión de nuestros ojos volvió a surgir, Vanesa que es esto, no se lo que es pero es algo nuevo para mí la verdad.

M.- Perdona, ya está, estoy bien de verdad, me he tropezado, será mejor que me vaya, me ha encantado tu música, tus canciones...

V.- Gracias, puedes volver otro día y hablamos si quieres...

M.- Si, otro día.... chao Vanesa

V.- Chao....- dije mirándola a la cara sin saber todavía su nombre

M.- Mónica, me llamo Mónica. Me fui de ese baño con una extraña sensación interior, no por mi estómago revuelto sino por otra sensación a la cual no sabía ponerle nombre, Vanesa... Vanesa Martín que me pasaba contigo. 

Salgo del baño todavía con los ojos de la morena en mi retina, me gustan las mujeres.... si... los hombre también..... me gustan las personas que me generan inquietudes, no me importa de que sexo sean si me gusta, me gusta. Y Mónica.... no se que había pasado pero algo había pasado. Con esos pensamientos llego para recoger la guitarra y veo Oscar  el dueño del bar está con alguien en la barra, me llama y me indica con el brazo que vaya allí.

O.- Ey Vanesa, te estábamos esperando, te presento Luis, es un buen amigo que de vez en cuando viene por aquí a escuchar música, trabaja para Warner

L.-Hola Vanesa, encantado

V.- Hola.- dije nerviosa. Warner, la discográfica. Esto era real....

L.- Oye llevo escuchándote unas cuantas semanas, he oido distintas canciones y creo que podemos trabajar juntos si quieres, creo que hay temas para un disco, no se... ¿Cómo lo ves?

V.- Bueno...- Miraba a Oscar que sonreía complacido, yo también sonreía y casi no me salían las palabras. Ya por fin pude hablar. Bueno... me encantaría grabar un disco la verdad

L.- ¿Tienes alguna otra oferta?

V.- Sinceramente de momento no

L.- Vale, mira vente el lunes a las oficinas, ten mi tarjeta, quedamos allí, hablamos y vemos como podemos comenzar a trabajar juntos, si te parece.

V.- Vale, el lunes... allí estaré...¿Llevo la guitarra?

L.- No tranquila, je, je, si tienes que tocar algo tenemos guitarras de sobra, no te preocupes

V.- Vale, vale...gracias, nos vemos.

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O.- Bueno ¿Qué?

V.- Ay Oscar, una discográfica... no me lo puedo creer, estoy... estoy... no me salen las palabras, Oscar voy a grabar un disco

O.- Eso parece.....ven aquí y dame un abrazo, artistaza

Nos fundimos en un abrazo, Oscar era en Madrid uno de mis mejores amigos, no tenía muchos la verdad, como mi trabajo era tocar de noche no hacía muchos amigos pero Oscar si que era uno de ellos, se alegraba por mí tanto o más que yo.

El lunes cita en la Warner.... mi sueño estaba cada vez más cerca pero yo tenía en mi cabeza los ojos de Mónica. 

Aunque seguramente no los volvería a ver más. 



Llega el momento.....Where stories live. Discover now