El Reencuentro De 16 Años

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Mi papá abandono a mi madre antes de que naciera yo. Por lo que con el paso de los años crecí sin saber nada de mi padre realmente no le tome importancia obvio era un niño que crecía que la vida era como en los cuentos y cosas así, nunca le pregunté a mi madre como se llamaba, cuántos años tiene, porque nos dejó, acaso mi existencia ocasionó aquello, nada de nada siempre guarde silencio.

Entre a la primaria todo normal hasta que veía a los demás niños con su madre y padre, lo normal, pero ¿por qué mi familia solo conformaba a mi mamá y a mí? Así que con tan solo 8 años le pregunté a mi mami ¿Por qué no tengo papá? Al principio creyó que era una pregunta medio casual por ser de un niño pequeño, pronto se dio cuenta que no era así realmente quería saber de mi padre por lo que solo me dijo que no lo mencionara más. Decidí mejor averiguar por mi cuenta donde estaba mi papá, no encontré nada de nada en las cajas que teníamos en el ático, ni siquiera en la casa de mi abuelita Francia. Se me hizo raro así que sin más opciones en casa se lo pregunté a mis tíos ellos se me quedaron viendo y después se miraron entre ellos, no hubo respuesta tampoco. Tal vez cuando creciera más me darían la respuesta que buscaba....eso creí yo al ser un niño tan inocente que solo buscaba una respuesta, no es que no sea feliz con mi mamá pero una figura paterna fue lo que faltaba en mi vida.

Derek: soy Derek tengo 16 años, amm me gusta mucho leer, al igual que pasar tiempo con mi mamá -se volvió a sentar en su asiento mientras los demás compañeros le aplaudían por su presentación acerca de las cosas que hacía en casa-

Maestra: bien con eso terminamos las presentaciones del día de hoy. Les deseo un feliz año lleno de enseñanzas, descubrimientos, tareas y sobre todo espero que aquí encuentren lo que están buscando. Bien saquen su cuaderno para comenzar a anotar lo que trabajaremos en este año -se fue rumbo al pizarrón para comenzar a escribir en él-

Para ser sinceros las clases de Derek se pasaron volando, llegó la hora del recreo bueno al menos tendría tiempo de poner las cosas en orden para el mismo, cuando les dieron la indicación de poder salir tomó sus audífonos para colocar su música e ir a sentarse bajo un árbol, el lugar perfecto para estar dibujando a varios posibles retratos de su padre, porque si desde que nunca contestaron su pregunta decidió hacer su propio posible padre, bueno al menos lo que más o menos se parecía a él. Después de un rato estar ahí sentado pasando el lápiz sobre el papel su vista fue a dar hacia enfrente topándose con una chica, parecía perdida, tal vez debía de ir con ella y ¿Ayudarla? Bueno al menos no pierde nada con hacerlo, se levantó para cerrar la libreta e ir donde se encontraba aquella chica.

Derek: ¿Estás perdida? -pregunto captando la atención de la contraria, parecía que iba apenas ingresando-

María: ammm si estoy perdida, soy nueva en esta escuela y no sé dónde queda mi maldito salón -volvió a ver su papel donde tenía las indicaciones- no tiene sentido esto

Derek: es que el papel lo tienes al revés por eso estás desubicada -dijo mirando lo que tenía la de nuevo ingreso en su mano- es solo un pequeño detalle

María: -su rostro se puso rojito muy poco al mirar que efectivamente su mendigo papel estaba al revés, lo volteo y ahora sí que todo tenía mucho sentido- gracias.... Ahora sí que no me pierdo, me salvaste la vida

Derek: eso pasa a veces, soy Derek -extendió su mano para presentarse con la menor- mucho gusto

María: un gusto Derek, me llamo María y gracias por salvarme la vida hace unos momentos -estrecho su mano con el mayor- bueno ya me tengo que ir, si es que quiero llegar rápido, nos vemos -retomo su camino para irse a su salón-

Al final de las clases todos y cada uno de los estudiantes se iban por rumbos muy diferentes con sus respectivos acompañantes o familiares, algunos se iban al parque, otros al centro comercial a pasar el rato, o si de plano se iban a sus respectivas casas por órdenes de sus padres u otra cosa. Derek siempre se iba a casa no importara si lo invitaban a ir a algún lado les decía que no gracias preferiría ir a casa, obvio sin ofender debía de ir para ayudarle a su mamá con algunas cosas de la casa, su tarea y buscar de a poco a poco algo de información sobre su papá, de reojo vio pasar a María en su carro con quien parecía su padre bueno ahora le tenía envidia.

Cortos AlecanDonde viven las historias. Descúbrelo ahora