Cortos Alecan

Mi Ángel

Un alemán llegaba de trabajar después de un largo día sentado en su oficina sólo quería llegar a su hogar y encontrarse con su maple a quien amaba con toda su alma, llegaría a darle amor, besos, y muchos mimos.

Abrió la puerta esperando a que su maple llegara corriendo y lo abrazara se preocupo y fue corriendo a la habitación esperando que estuviera en ese lugar.

Alemania: ¿Canie? -lo encontró sentado en la orilla de la cama llorando-

Canadá: ¿Ale? -reaccionó al instante tratando de ocultar sus lágrimas- no te vi llegar -limpiaba sus lágrimas y abrazó a su esposo- vamos abajo para que puedas cenar -trató de irse de aquella habitación pero Ale lo tomó del brazo para evitar que se fuera-

Alemania: ¿Por qué estabas llorando? -se preocupó mucho al verlo así-

Canadá: -lo abraza estallando en llanto de nuevo- ¿Qué pasa amor? -correspondía aquel abraza tratando de tranquilizarlo-

Canadá: no puedes irte de mi lado -lloraba y lloraba en el hombro del alemán-

Alemania estaba confundido no sabia de que hablaba su maple, luego de tranquilizarlo lo sentó en la cama para que pudiera explicarle, hace días atrás el chico de cabellos negros se sentía muy mal, fueron al hospital para que le dijeran que era lo que tenia, cuando sus resultado estarían listos los llevarían a su casa.
Esa tarde llegaron le diagnosticaron al alemán cáncer terminal, esa fue la razón por la cual Canadá estaba llorando se había enterado primero, Alemania estaba en shock no sabia como reaccionar no había nada que hacer no había cura alguna para aquella enfermedad. Volvió a abrazar a su esposo sería muy difícil para ambos más para el canadiense no podía dejar ir al amor de su vida.

Canadá: no puedes dejarme Ale, está marca que tengo en el cuello me la hiciste tú, soy tu omega no puedes dejarme solo -sus ojos estaban llenos de lágrimas y no se quería separar de su esposo-

Alemania: yo tampoco te quiero dejar -no era de las personas que lloraban, esta no era excepción y lloro en silencio-

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Los meses pasaban y no se separaban uno del otro, estaban unidos en todos los momentos Alemania estaba cada vez peor, ya no podía ni si quería pararse de su cama por lo débil que estaba Canadá estaba al pendiente de él, solo que empezó a sentirse muy mal solo que se quedó callado para no preocuparlo sin embargo, Ale ya se había dado cuenta algo había cambiado en Canie era más dulce de lo que ya era y sabia que era lo que pasaba.

Ya era hora de dormir para ambos Canadá siempre era abrazado por Ale de cucharita disfrutaba que le hiciera piojito con eso se quedaba profundamente dormido en ese momento el hijo de Nazi acarició el vientre de su amado formando círculos con la palma de su mano

Canadá: ¿Qué haces? -eso extrañó al chico ya que no le estaba haciendo piojito-

Alemania: eh notado que te está creciendo tu pancita -estaba en ese momento tranquilo hasta que Canie volteó a verlo sentándose en la cama acción que repitió-

Canadá: no lo había notado, como estoy ocupado contigo no tengo tiempo para ver como estoy -tocaba su pancita algo nervioso- no puedo estarlo no

Alemania: mañana irás a un chequeo para saberlo, yo te eh sentido más dulce de lo habitual, no me digas que no has estado con dolores de cabeza, que te mareas y esas cosas yo te veo como estas, pero me lo ocultas

Canadá: no te querido preocupar más, además si estoy esperando un bebé, no tendrá a su padre a su lado para criarlo conmigo, no sabes lo difícil que seria para mi -se levantó de la cama- no quiero pensar que será de mi con un bebé sin que tú estés a mi lado, quería formar una familia contigo, si no te tengo a mi lado que sentido tendría -su voz sonaba muy cortante, lágrimas recorrían sus mejillas por lo que acababa de decir-

Alemania: Canie tendrá una parte de mi contigo, yo también quería una familia pero sabes que no estaré en vida para ti y para el/la pequeño (a) que viene en camino, en alma estaré para ti protegiéndolos -hizo una señal de que fuera a abrazarlo y acción que fue entendida por el maple no podía imaginarse no estar para su esposo y para quien venia en camino- Te amo mi Canie y mucho

Alemania: prométeme que cuidarás a nuestro hijo (a) muy bien, le enseñaras todo lo que puedas y le hablarás de mi

Canadá: lo prometo, no dejaré que te olvide nunca le hablare de lo asombroso que eras -lloraba en el pecho de su alfa, no quería dejarlo, le era muy difícil hacerse a la idea de estar sin él-

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Ya habían pasado 7 meses desde que Alemania falleció una semana después de haberse enterado que seria papá su cáncer había dado fin a su vida Canadá estaba destrozado y decaído por la partida de su esposo, tenia una promesa que cumplir, su cuñado Rusia lo apoyo en todo momento, México igual y claro su hermano Usa no lo dejaron solo ya que lo quieren y mucho Ale hubiera quería eso para sus dos amores... Canadá lloraba en silencio en su cama recordando a su Alemania, su amor de su vida y padre del pequeñito que crecía en su vientre, pensaba en nombres su pasatiempo se entretenía bastante buscándolo el indicado para él o ella, recibía sugerencias de sus amigos se pasaban las horas pensando en aquello.

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Enfermera: ya salió su cabecita puje un poco más -tomaba con cuidado una parte de ella-

Canadá: ¡AAARGH! -pujaba con todas sus fuerzas para que saliera su bebé- y~ya no puedo estoy can~sado -trataba de regular su respiración le costaba trabajo ya no tenia las fuerzas necesarias para seguir-

Enfermera: no digas eso, tienes que tener a este bebé hazlo por su marido Canadá -trataba de animarlo para que pujara y ya estuviera con su bebé, después podría dormir por horas-

Canadá: -Alemania, ese nombre le dio las fuerzas para seguir tenia que cumplir la promesa, siguió pujando quejidos de dolor salían de su boca hasta que escuchó los llantos de un bebé había nacido ya-

Enfermera: gran trabajo Canadá, es un niño precioso -lo envolvió en una manta, volteó a ver al canadiense estaba dormido se agoto lo suficiente para quedar rendido-

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México: maple que bueno que despiertas

Canadá: ¿Dónde está mi bebé? -sonaba lago preocupado ya que se quedo dormido después del parto-

México: tranquilo, está en unas camitas pequeñas en un rato lo van a traer -sonrió para el maple-

Canadá: esta bien -pudo escuchar como se abrió la puerta dejando pasar a su hermano y cuñado- hola chicos

USA: hola brother -lo abrazo y se separado unos segundos después para sentarse en la orilla de la cama- ¿Cómo te sientes?

Canadá: bien, cansado pero bien, Rus hola

Rusia: Hola Canadá, me alegro que estés bien, la enfermera me dijo que pronto traerá a mi sobrino

Canadá: está bien -se recostó en la cama deseaba dormir más pero su nene lo esperaba-

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Canadá: y eso es todo mi Ale -cargaba a su bebé en brazos mirando en dirección de la tumba de su difundo esposo- gracias por no dejarme, dijiste que no estarías en vida pero en alma si mi ángel, ahora tengo que cumplir mi promesa de criar a Goliath nuestro hijo -un viento se hizo presente en esos momentos dando a entender que Ale estaba presente-
Te amo mi ángel.

Alemania: y yo a ti mi Canie...