SNK/AOTxLectora «Pack»

ConniexLectora: Formal (AU)❗️Lime❗️

Su carismática personalidad siempre logró simpatía en la gente a su entorno, una broma, un comentario a menudo solía provocar risas en sus compañeros y hasta cierto punto en sus profesores.

Sin embargo el llevar su vida por ese divertido pero extremadamente relajado camino traía como consecuencia que a menudo no pudiesen tomarlo enserio. Eso jamás lo afligió, hasta que uno de sus amigos añadió en tono de broma que no podía creer que tuviese una novia como la que tenía, "Tan diferente" a él, que "aun si los polos opuestos se atraen" su relación sobrepasaba esa barrera.

¿Era por su falta de elegancia?

Que podía argumentar, lo casual predominaba en sus gustos, aun en el equipo de tenis prefería simplemente no intercambiar su atuendo entre clases, de todas formas eso iba a usar mas tarde, a diferencia de sus colegas que debido a las presentaciones o proyectos debían utilizar etiqueta o atuendos que irradiaran seriedad. ¡Bah! Eso nunca fue lo suyo y nunca le importó, el usar gorra en una presentación en el aula magna le era normal, si bien el atuendo formal no estaba especificado la mayoría de los alumnos lo llevaban. Era universidad después de todo.

Pero no era solo eso, (Nombre) era tranquila si bien podía bromear de vez en cuando, en momentos en que una meta era captada por su mente la culminación de la misma era su principal y mas firme objetivo. Al contrario de él, que prefería dejarlo si la dificultad se veía ligeramente elevada y sin perjuicios iniciar otra cosa.

La idea de que ella se pudiese cansar de esa desinteresada actitud lo comenzó a abrumar, al punto de que si la veía con otro chico mas "sensato" Cada gesto que ella manifestaba ante sus ojos emanaba una simpatía mas allá de la común.

Su preocupación se precipitó a tal grado, que pidió ayuda a Sasha, una de sus amigas mas cercanas ¿Como podría llegar a ser mas "elegante"? ¿Como podía darle a entender a (Nombre) que él también podía ser "serio"? Justo como aquel chico de cabello negro y serenos orbes cafés cuyas pecas salpicaban por todo su rostro. Marco, que también era su amigo sin embargo las constantes y poco agradables interacciones entre ambos lograron incrementar en él la paranoia de una posible fractura, ya que como hombre, él se percataba de las miradas que este le dirigía, dado que eran las mismas que él trajo consigo desde que la conoció.

Soltó un resoplido frente al espejo de su cuarto. Él "formal" atuendo ahora impuesto en él describía lo que Sasha percibía por distinguido.

—No sienta bien en mi— Murmuró aflojando levemente el implacable nudo de la corbata amarrada como soga en su cuello.

La castaña sentada en la cama detrás se levantó y colocó ambas manos sobre sus hombros —Claro que si, solo debes intentar sonreír— Anunció liberándolo y encaminándose al refrigerador de su departamento.

Efectivamente era lo contrario a lo que él pensaba, si bien obtenía un diez en estilizada vestimenta y pulcro porte, este era opacado por el evidente gesto desagrado en su rostro.

Odiaba esa ropa, la odiaba profundamente, la única vez que se esperó ver dentro de esas prendas, que en su opinión eran de un pretensioso y amanerado cretino, solo serían dignas de un funeral o una boda. En cuyo caso antes lo hubiese considerado lo mismo.

Si antes, antes de (Nombre).

Al llegar a las instalaciones donde su misión era sorprender a esa delicada hembra de resplandecientes luceros (tono), la seguridad con la cual se adentraba entre cada pasillo al principio sometida por su nerviosismo aumentaba al percatarse del impacto que su drástico cambio de "imagen" causó. Las miradas de la mayoría de las estudiantes femeninas estaban siendo dirigidas sin ningún rastro de pudor a él, incluso leves choques y risillas de las mas osadas.