Capitulo 41: ¿esto es morir?

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Llegaba música de algún lugar, Ryddle se volvió para comprobar que en la cámara no había nadie más, pero aquella música sonaba cada vez más y más fuerte; tanto que se me pusieron los pelos de punta. Y cuando la música sonaba más fuerte surgieron llamas de una columna, apareció de repente un pájaro con una cola dorada y brillante, muy larga, y garras doradas en las que sujetaba algo. El pájaro se dirigía hacia mi dejando caer el objeto a mis pies, posándose en mi hombro; levanté la mirada y vi que tenía un pico dorado afilado, los ojos redondos y brillantes. El pájaro dejó de cantar y acercó su cuerpo cálido a mi mejilla

Ryddle: Es un fénix —dijo mirándolo detalladamente

Harry: ¿Fawkes? —cuando pronuncie su nombre sentí una leve presión de sus garras

Ryddle: Y eso —miro el objeto que Fawkes había dejado caer— eso no es más que el viejo Sombrero Seleccionador del colegio— lo miré y era verdad, estaba remendado e inmóvil, causando que Ryddle volviera a reír pero esta vez más fuerte—¡Eso es lo que Dumbledore envía a su defensor: un pájaro cantor y un sombrero viejo! ¿Te sientes más seguro, Harry Potter? ¿Te sientes a salvo?—no respondí porque no veía la utilidad de Fawkes ni del sombrero, pero al menos no me sentía solo—A lo que íbamos, Harry... en dos ocasiones, en tu pasado, en mi futuro, nos hemos encontrado, han sido dos ocasiones en que no he logrado matarte. ¿Cómo sobreviviste? Cuéntamelo todo...Cuanto más hables, más tardarás en morir

Pensé en cuáles eran mis posibilidades de ganar, pero Ryddle tenía mi varita y yo a Fawkes y el sombrero; pero cuánto más tiempo Ryddle estaba ahí Ginny moría lentamente; y ahí me di cuenta que mientras que el tiempo transcurrió el contorno de Ryddle se hacía más claro, y si teníamos que luchar tenía que ser lo más pronto posible

Harry: Nadie sabe por qué perdiste tus poderes al atacarme, yo tampoco... pero sé por qué no pudiste matarme; porque mi madre murió para salvarme, mi vulgar madre de origen muggle; ella evitó que me mataras... y yo te he visto de verdad, te vi el año pasado, eres una ruina porque apenas estás vivo. A esto te ha llevado todo tu poder; te ocultas. ¡Eres horrible, inmundo!

Ruddle: O sea que tu madre murió para salvarte, sí... ése es un potente contrahechizo. Tenía curiosidad, ¿sabes? Porque existe una extraña afinidad entre nosotros, Harry Potter... incluso tú lo habrás notado; los dos somos de sangre mezclada, los dos huérfanos, los dos criados por muggles, tal vez somos los dos únicos hablantes de pársel que ha habido en Hogwarts después de Slytherin. Incluso nos parecemos físicamente... Pero, después de todo, sólo fue suerte lo que te salvó de mí... eso es lo que quería saber—permanecí quieto esperando a que él sacara mi varita pero el solo sonreía cada vez más —Ahora Harry, voy a darte una pequeña lección... enfrentemos los poderes de lord Voldemort, heredero de Salazar Slytherin, contra el famoso Harry Potter, que tiene de su parte las mejores armas de Dumbledore

Ryddle dirigió una mirada soncarrona a Fawkes y al Sombrero Seleccionador, luego anduvo unos pasos en dirección opuesta. Yo notaba que el miedo se extendía dentro de mi, vi que Ryddle se detenía entre las columnas y dirigía la mirada al rostro de Slytherin

Ryddle: Háblame, Slytherin, el más grande de los Cuatro de Hogwarts.

Mire que la boca de la estatua se abría cada vez más, quedando un enorme agujero. Cuando vi que algo se movía dentro, retrocedí hasta llegar a una pared, cerre los ojos y Fawkes empezó a volar. Sabía lo que pasaba, podía sentir como la serpiente gigante se desenroscaba y en un instante se escucho un silbido

Ryddle: Mátalo

El basilisco empezó a moverse en mi dirección, lo sabía porque se escuchaba como se deslizaba; me empecé a mover con los ojos cerrados, intentando encontrar el camino con mis manos y torpemente me tropecé cayendo contra una piedra sintiendo el sabor a hierro en mi boca. Se escuchaba cada vez más cerca, pero en ese instante se escucho un estallido, y en un momento algo muy pesado me golpeo haciéndome llegar hasta el muro; ya podía sentir como los colmillos se encajaban sobre mi, pero no fue así; se escuchaban silbidos de desesperación y algo que golpeaba contra las columnas, no pude evitar abrir los ojos. Mire como una serpiente gigante y gruesa estaba alzada sobre el aire y su gran cabeza roja se movía de un lado a otro, entonces miré a Fawkes volando sobre esta mientras que el basilisco intentaba atraparlo con la boca

Siempre fue ella (Harry potter y tú) [segundo año]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora