KAPPA. <♤Kookmin♤>

Capítulo 20

El desayuno había transcurrido bastante tranquilo por ambas partes, alguna que otra mirada curiosa por ambas partes, la comida siendo disfrutada en silencio sin que nadie quisiera romperlo. Había tranquilidad.

El ambiente en Busan era frío pero en ese apartamento estaba caliente y era algo que no se podía evitar, Jimin aunque intentara controlar sus primarios instintos no podía hacerlo al 100% pero por lo menos conservaba la razón, y el pobre pero suertudo Jungkook tenía una mezcla de sentimientos imposibles de enumerar pero la excitación y el cariño se hacían presentes, además de cautela pues no quería meterse en problemas.

-Tras tus clases debes venir, te estás retrasando con tu proyecto.- Y era verdad, cuando Jimin por fin pudo leer sus nuevos correos electrónicos uno llamó su atención, proveniente del tutor de la facultad asignado a supervisar el proyecto de Jeon. Resulta que el menor ya debió haber mandado un pequeño esquema del trabajo con su correspondiente índice además de un leve estudio de la biografía de su tutor práctica y la empresa que este dirige, siendo éste Park. El mayor tuvo que responderle de forma inmediata inventándose un problema técnico.

Debían ponerse las pilas.

A Jimin no le gustaba muchas cosas y le gustaba otras pocas, eso era algo obvio, pero algo que le disgustaba y le hacía sentir bastante incómodo era defraudar o quedar mal ante terceros, no hacer bien su trabajo, no cumplir las metas dadas o simplemente hacerlo pero mal. No le gustaba por ello tenía tanta ambición porque fallar lo odiaba, repetir las cosas no era algoq ue tenía pensado y su reputación y su estatus en aquel país era fruto de esa obsesión con la perfección.

Las clases habían ido bien, amenas, para aquellos alumnos que debieron salir de la ciudad debido al sitio asignado tendrán las debidas actualizaciones de las clases medainte la plataforma online, por  ellos las clases estaban más vacías, y debido a ello el olor mezclado de Jungkook era más evidente y más para Lisa que intentaba acercarse lo máximo posible pero el extraño aroma la paro. No era el de siempre, pero tampoco había uno nuevo. Sentía como si una burbuja lo aislara del olor ambiental, como si fuera succionado hacia él mismo provocando un ambiente extraño hacia aquellos a su alrededor, una presión en su animal interior que gritana "¡cuidado!" y eso para Lisa era difícil de digerir pues era también una alfa.

Era raro.

Por otro lado Jimin intentó concentrarse en sus tareas pendientes y dejar de ahogar a Nam con tanto papeleo y estudios. Dos horas, ¡dos putas horas! había pasado con la pantalla de su ordenador encendida, en la primera página del informe, sin pasar de la primera frase, la punta de su lápiz rota sobre el escritorio debido a tantos pequeños golpes por culpa de sus nervios. No podía. No podía concentrarse.

Sus pies estaban inquietos, sus manos se encontraban calientes al giaul que sus mejillas, era un pequeño y adorable tomate , el pelo revuelto un poco mojado pues al intentar espabilarse JImin se mojó la cara con agua fría que también mojó parte de su camiseta, enviando pequeños escalafríos contra su cuerpo caliente, le gustaba.

Su mente no paraba de pensar en Jeon, en cuando volvería y por que tardaba tanto, y su lince no paraba de molestarlo por ello, aparte de martillearle la cabeza con preocupaciones por aquella extraña mujer que se restregó con su alfa, preocupado por si volvía a pasar.

-No es tu alfa.- farfulló ya perdido en nervios, pero intentando aparentar tranquilidad, aunque era inutil con su animal.

-Bueno si, perdón, nueeeestro.- se burló pues sabía el estado de Jimin sabía que seguía enfadado con él por haber salido  y aprovechado la oportunidad con su alfa.

Jimin lo ignoró.

-Es una mujer minnie.- Rechistó, cambiando su humor drásticamente, Jimin estaba acostumbrado, estaba acostumbrado a todo ya, su lince no podía sorprenderlo más. Se negaba.- Lo sé, y con ese maldito olor se que no fueron solo toques , era un olor típico de ricos, que asco.- Gruñó.

Y Jimin gruñó también.

Eso le había molestado, y no le gustaba la idea.

De un portazo salió de su despacho, era imposible concentrarse en ese estado, y su animal no contribuía. Quería aprovechar el día pero al parecer el karma no estaba con la puta idea de mierda. Nervioso, sin saber que hacer y sintiéndose mal por varias cosas no praba de dar vueltas por el salón, había pensado en limpiar, pero la escoba estaba muy lejos , se había sentado en el sofá, pero era muy blando , debía comprar uno nuevo, pensó en admirar las vistas y con eso se quedó.

Se colocó en los enormes ventanales , con una postura de superman, golpenado el suelo rapidamente con su pie, analizando a la gente pasar . Iba a volver a su caminata pero una figura conocida iba entrando al edificio.

-Jeon.- Gritó. Pero gritó de verdad.

Aunque eso no lo iba a admitir.

Cuando el menor abrió por fin la puerta del apartamento una rápida figura, un cuerpo estelar, un meteorito, una estrella fugaz colapsó contra su cuerpo casía provocando una pérdida de equilibrio, pero no cayó,  agarró con fuerza esa cosa extraña que le estaba frotando el abdomen con su cara.

Era Jimin, JImin lagrimeando.

<<joder, es adorable>> Pensó jungkook, el bonito sentimiento le provocaba mariposas en la barriga.

- Tardaste.- Se quejó el mayor, subiéndose a horcajadas encima de él, no dándole otra opción a Jeon que cogerlo por debajo de las nalgas para que no cayera, aunque no se quejaba.

El mayor restregaba cariñosamente su nariz en el cuello del menor.

- Volví al terminar las clases, como me dijiste.- Dijo mientras cerraba la puerta y se quitaba los zapatos.

Las acciones del mayor pararon, sus labios buscaban proximidad con el oído del menor.

-Y por qué hueles a ella.- dijo frío.

<<Peligro>>.