Quédate Conmigo # 2 Llévame al límite.( Completa) Wattys 2020

Capitulo 20 ( Te quiero fue...)

Deje que manejara, más bien estaba enojada conmigo, asi que no me dejo manejar. Subió el volumen del estéreo, ahora escuchábamos country. Aparte de enojada, estaba pensativa y suponía que era porque Cristina estaba con Alejandro. Tenía los nudillos blancos por tanto apretar el volante, suspiro. Le bajo a la radio, me miro de reojo.

-Mientras estemos aquí, no puedes tratarme de esa manera.

- ¿Por tu reputación? Todos hablaran de ti... trajiste a un hombre a la junta, estoy seguro que es algo que casi nunca haces.- resoplo.

- Exacto, prefiero que solo crean que eres alguien de una noche, asi te superan cuando regrese a la empresa... pero sobre todo no puedo verme frente a ellos, como una mujer que puede ser controlada por un hombre... ósea una romántica.

- ¿Qué me quieres decir?

- Que no puedo besarte frente a ellos, no quiero caricias, abrazos... demostraciones de amor.

- ¿Quieres que me quede encerrado en la habitación?

- Tienes un hotel con alberca, diviértete... hay televisión.- miraba el camino, seguía enojada y ahora era indiferente. No entendía que había pasado con la mujer risueña que tenía en la habitación.

- No quiero quedarme encerrado.

- Esta noche no puedes ir a la cena, lo sabes, mañana preferiría que te quedaras en la habitación... no puedes ir al desayuno.- me burle.

- ¿Pagaste por el servicio... firme un contrato? Porque si no es asi...

- Aarón...- mire hacia a fuera.

- ¿Esto es por tu reputación o porque te avergüenzo?- freno, aunque el semáforo estaba en verde.

- A mi nada me avergüenza, esto es porque tarde mucho para que todos me respetaran, no puedo perder ese respeto. ¿Puedes ayudarme con esto?

- ¿Crees que estás hablando con un niño?

- Entonces, madura.

- Tu primero... lo intento, pero tus respuestas son contradictorias, ya no sé qué es lo que quieres.

- Solo divide mi trabajo y mi vida personal.

- Creo que quieres que divida más. ¿Quieres conocerme? ¿Quieres que lo haga a mi manera?

- Quiero que la hagas a la mía.

- Desde que nos conocemos lo hacemos a tu manera.

- Pensé que era al revés.

- No soy tu mascota, no me puedes esconder, y no debería de dividir tu vida personal y tu profesión, ambas eres tú, asi que no, no te ayudare a mantener una farsa.

Jane me fulmino con la mirada y nos quedamos en un incómodo silencio. Apenas llegamos al centro comercial, y se bajó sin esperarme.  

Caminaba a paso rápido e intente seguirle el paso, no es tan difícil, porque se detiene en cada tienda para mirar la ropa. Por fin, cuando entramos en una, me separo de su lado, para buscar algo para mí. Tomo lo más barato que encuentro.

-¿Llevaras eso?

- Es lo que completo.- me deja a solas, al ver que voy al probador.

Cuando salí encontré a Jane, viendo ropa interior. Tenía dos piezas en la mano, una era morada y la otra negra. También tenía una canasta en los pies, con diferentes vestidos, todos tenían una etiqueta roja, no quería saber cuál era el precio. Alejandro podía pagar por eso, pero yo tendría que ir a cinco despedidas para pagar algo así.