A Elle;
Hoy.
Ahora.
Por fin he tenido valor.
Cinco días después de visitar tu casa y recoger ese multicolor libro,
lo he abierto.
Tal y como esperaba,
era tu diario.
Y sí,
Sé que nadie me ha autorizado a leerlo.
Y sí,
No sé si tú me hubieras dado el permiso de hacerlo.
Pero ponte en mi lugar.
¿Y si ahí están las respuestas a todo?
¿Y si ahí está el fin de mis problemas?
¿Y si ahí, estás tú?
Huele a moras.
Y el negro inunda la mayor parte de las páginas.
Confesiones, dibujos y plegarias.
Para que tu vida cambiase.
Para que Lynn cambiase.
Para que el mundo cambiase.
Pero tú no.
Tú querías seguir igual que siempre.
Un siniestro pero sin embargo, peculiarmente bonito, me hace parar en seco.
Lágrimas de limón.
Un desesperado Marc.
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Elle
Poetry«Lo peor de la bala no es la metralla, sino el recuerdo de esta, Elle» #1 ©Prohibida cualquier adaptación o traducción total o parcial sin mi expresa autorización.