Hola, te amo. | C.BG + K.TH | OBRA CANCELADA

"28"

TaeHyun estaba hecho una furia.

SooBin tenía miedo de acercarsele al verlo en ese estado. Y la cosa empeoró cuando HueningKai se sumó a Kang.

—¡Esto es inadmisible! —chilló Kamal, tomando uno de los cojines con estampado de conejitos y lanzándolo con fuerza contra la puerta de la habitación de SooBin.

Choi simplemente hizo una mueca de dolor al ver a su preciada almohada volar y rebotar contra el frío y desolado suelo del lugar.

—Chicos... ¿p-podrían explicarme qué es lo que sucede? —murmuró bajito el dueño de la habitación, viendo esta vez a TaeHyun tomar otra de sus almohadas y lanzarla hacía el escritorio, haciendo volar unos cuantos papeles que allí habían y asustando al menor.

En otras circunstancias, SooBin se hubiese quejado, pero al tener a esas dos fieras dando vueltas por su habitación lanzando al aire todo lo que encontraban y de paso soltando insultos y maldiciones a diestra y siniestra, de cierto modo le daba algo de miedo y sabía que hacerse el valiente no era una gran idea en esos momentos.

HueningKai dio la vuelta sobre sus talones de manera brusca para mirar a Bin, y cuando lo hizo, el alto no supo si hundirse más en su pequeño sofá hasta enterrarse en él o ponerse a correr lejos de allí para que no le hagan daño.

—YeonJun hyung fue hasta la casa de BeomGyu y le lavó el cerebro para que se aleje de TaeHyunnie, ahora BeomGyu no se quiere acercar a él —señaló a Kang, quién a sus espaldas estaba en proceso de lanzar otra almohada para algún sitio—, y hasta lo evita. No sé qué diablos le dijo o porqué mierda se mete, ¡pero ya se metió y ahora dejó a Tyuncito sin su BeomGyu! —farfulló, hablando tan atropelladamente que a SooBin le costó trabajo comprender lo que había oído.

¿Qué YeonJun había hecho qué?

—¿Yeon... qué? ¿cómo? pero... ¿e-están seguros? —balbuceó, incapaz de comprender lo que Kamal le decía.

—JungKookie-ssi nos lo confirmó. —aclaró Kai, logrando que el azabache abriera la boca en un gesto de genuina sorpresa— Y ahora la cuestión es, ¿cómo diablos hacemos para solucionar esto?

SooBin parpadeó reiteradas veces, tratando de asimilar la situación. Y ni bien lo había hecho, escuchó de fondo el jadeo frustrado de TaeHyun.

Tanto Kai como SooBin miraron hacia el mayor, e inmediatamente hicieron muecas de preocupación al ver a Kang tumbado boca abajo sobre la cama del azabache.

—Yo creo que el primer paso aquí, vendría a ser que él aclare de una vez lo que siente por BeomGyu hyung. —alegó, señalando a TaeHyun.

E inmediatamente el aludido lavantó la cabeza y fulminó a ambos con la mirada.

—No sean idiotas. —farfulló, tajante.

—De hecho, TaeHyun... —intervino Kai— creo que SooBin tiene razón.

—No. —gruñó, estampando de nuevo la cabeza contra la espuma de la cama.

Ambos menores rodaron los ojos.

—Si quieres puedes seguir haciendo papel de león en celo y gruñir todo el día mientras lloras en mi cama —empezó SooBin—, pero si de verdad quieres algo con BeomGyu, tienes que poner de tu parte, TaeHyun.

El mayor gimoteó audiblemente, su voz siendo amortiguada por la espuma de la cama y las sábanas.

HueningKai no tardó mucho en caminar hasta Kang, sentándose en el filo de la cama y en cuestión de segundos, siendo imitado por SooBin.

—Vamos, Tae —animó Kamal—. Ya es tiempo de admitirlo.

Kang murmuró cosas inentendibles, gruñendo y a la vez reincorporándose de mala gana.