Capítulo 9:

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Advertencia:

En esta historia el prometid@  de Mei es absolutamente incierto, lo que quiero decir es que aún no daré a conocer con exactitud quien es exactamente. Así que adivínenlo durante el resto de la historia. hagan como si nunca vieron su cara en el  manga, porque ahora no sabemos quien es él. sin más sigan leyendo.

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Lo siento:

Pov Mei:

No podía soportar estar cerca de ella.

Entonces... ¡PORQUE SIMPLEMENTE NO PUEDO ODIARLA DE UNA VEZ POR TODAS!.

Con ambas manos sostenía mi cabello con fuerza, necesitaba hacer algo para lograr sacarla de mi cabeza. Así que tome nuestro collar con el anillo en el cual ella trabajo para comprar y lo sostuve con fuerza en mi mano. Necesitaba olvidarla de alguna forma aunque duela, tenia que alejarme de ella a como de lugar. Así que empezare a borrar cualquier rastro de ella en mi. Empezare por lo que más me mantiene atada, ¡ese maldito anillo! ', me hace feliz pero me recuerda que no puedo cumplir nuestra promesa... Pero sé con seguridad que Yuzu... Ella esperara por mi, siempre lo hará, estoy segura.

Así que con mucha fuerza lo arroje hacia la calle desde el balcón de mi casa, si se le podía llamar así. Lo más lejos posible de mi. Entonces cuando estaba lo suficientemente tranquila salí de mi trance, ¡¿QUÉ DEMONIOS ESTABA HACIENDO⁈. Corrí como loca buscando el puto anillo, abrí la puerta y salí como perro que lleva el diablo, sin embargo cuando llegue casi sin aliento a la calle, a donde tenia que estar tirado aquel anillo, ya... No estaba.

No puede ser, no lo pude haber perdido, tendría que estar tirado, me puse a buscarlo como retrasada mental en la calle, revise cada maldito lado minuciosamente pero aun así no encontré el maldito collar. Esto no puede estar pasando, ¡ESE ANILLO NO PUEDE PERDERSE!. Es mi culpa. — ¡ES MI MALDITA CULPA!. — Grite, parada en medio de la calle. Pero aun así, me importa un bledo, he perdido voluntariamente la conexión mas cercana a Yuzu, si tenia que arrojarme de un acantilado lo haría con tal de encontrar ese maldito anillo. — ¡Joder! — nuevamente grite y corrí hacia la mansión a encerrarme en mi habitación.

Me tumbe en la cama y comencé a llorar por horas. Los golpes de mi rostro ya habían sanado en su totalidad, pero el dolor que siento en lo profundo de mi, no se compara en lo más mínimo a el dolor que sentí al recibirlos. Cuando termine de llorar ya era de noche, tenia los ojos rojos de tanto llorar pero eso no importo. Tome mi celular y marque aquel número, necesitaba lograr sacarla de alguna forma de mi vida... Y esta... Era la forma que debía tomar.

(Conversación telefónica entre prometid@ de Mei (lo llamaremos A) y Mei):

A: ¿Si?, ¡hola Mei! - dijo con voz suave.

Mei: Quiero... adelantar nuestro matrimonio - dije con voz ronca mientras me hacia bolita en la cama y me tapaba con las sábanas de pies a cabeza.

A: ¡¿Eh⁈ - dijo sorprendid@ - ¿Estás segura? - pregunta con voz levemente preocupada.

Mei: Nunca he estado mas segura en la vida. Quiero heredar esa academia lo mas pronto posible. - digo intentando sonar lo más segura posible.

¡¡Por favor, tomemos caminos separados‼ - CITRUS (EN EDICIÓN)Dove le storie prendono vita. Scoprilo ora