Capítulo 21: El tío Hugo

329 33 1
                                    

Recapitulando ya había bajado del elevador y me disponía a tomar una micro devuelta a mi departamento a empacar mis cosas cuando choqué con cierta persona que nunca creí toparme en Ecomoda.

—Hay fíjate por donde vas feo cuatro o...—el señor alzó la vista mejor y me reconoció— ¿Ángel? ¿eres tú?

—Tío Hugo no pensé verte por acá.

Me acerqué a abrazarlo pero me apartó con algo de asco.

—Ash no me toques de lejitos.

No había cambiado nada era el mismo payaso de siempre.

—Perdón tío ya me iba.

—Espérate ahí me tienes que contar el chisme no me puedes dejar así dame tu número para ponernos al día y contarnos todo.

La verdad no tenía nada que perder aparte era buen amigo de mi madre no debía desconfiar de él.

—Está bien.
—Una vez termine mi reunión aquí te alcanzaré en tu casa.

¿Mi casa? hay no Tito... debía esconderlo del señor Lombardi o se pondría a saltar sobre la mesa algo que en serio odiaba era a las ratas. Él de seguro llamaría a salubridad por lo que no debía ver a Tito en ningún momento.

—Don Hugo tiempo sin verlo ¿qué hace aquí?
—Sólo quería ver tu próxima colección darling ver que estés perpetuando mi legado Gigi.
—Sí lo he hecho maestro.
—Cuéntame ¿conoces a un chico de lentes? con ropa algo pasada de moda y...
—¿Se refiere al asistente de Camila Mendoza? nombre te tengo que contar todo lo que ha hecho ese mequetrefe.

Mientras ellos se reían de mis desventuras estaba en mi cama hecho bolita sólo podía pensar en lo que me había hecho mi doctora tenía que olvidarla debía olvidarla y poner tierra de por medio.

—C-Camila.

Terminada mi chilladera puse a Tito en el cuarto de Patricio y me dirigí a atender a mi "tío favorito".

—¿En serio vives en este cuchitril?— decía con notable inconformidad al sentarse en mi sofá de segunda mano— incluso pensé que me habías mandando mal la dirección.
—Vivía en unos días me regresaré a Madrid con mis padres.
—Haber haber ¿no me digas que te enamoraste de tu jefa?
—...

En ese momento mi cara se puso en blanco mierda ¿cómo lo supo?

—¿Es verdad? guau así que la historia se volvió a repetir qué ironía.
—¿Cuál historia? explícate tío Hugo.
—Primero que nada ¿tienes té de valeriana?
—Sí.
—Pues tráelo porque cuando te cuente esta historia te va a dar algo.

Le hice caso y le traje el té de valeriana que tenía para irlo bebiendo entre ambos, ahí me contó la desgarradora historia que ustedes conocen sobre mi madre y los padres de Camila.

—No lo puedo creer ¿cómo el señor Armando fue capaz de hacerle eso a mi madre? y peor aún estando comprometida con él.
—Bueno tu mami también era un poco burris en ese tiempo.

Lo miré con una cara de póker.

—...
—Pero no te esponjes y sígueme contando ¿en serio tu mamá te negó que trabajaba en Ecomoda?
—Así es, cuando vaya a España la voy a confrontar... sólo me falta esperar mi liquidación para poder viajar.
—Puedes usar mi jet privado darling considéralo un favor.
—Gracias tío Hugo.

En ese momento se escucharon pasos desde el cuarto de Patricio.

—Esas son ¿ratas?— dijo don Hugo con notable asco.
—N-No tío... deben ser los vecinos.
—Ánimo chico espero puedas superar todo lo que la hija del Armandeitor te hizo.
—Ojalá.
—Y si necesitas vengarte avísame~

You've reached the end of published parts.

⏰ Last updated: Oct 13, 2022 ⏰

Add this story to your Library to get notified about new parts!

La hija de Betty la feaWhere stories live. Discover now