Swan-Mills: El despertar [SwanQueen]

Hermanas de sangre

I

Emma y Regina llegaron a la tienda de Mr. Gold en un abrir y cerrar de ojos, literalmente, Regina las teletransportó con su magia. Aparecieron impecables, sin un solo rastro de harina en su piel, y justo delante del mostrador detrás del cual se encontraba Belle haciendo apuntes en una libreta sobre lo que leía en un libro que sostenía con su mano libre.

"Habéis llegado" dijo Belle en voz alta y Regina tuvo que contenerse para no poner los ojos en blanco ante la obviedad de esa afirmación. "Este es el hechizo del que te hablaba" la castaña fue directa al grano y giró el libro para que la reina pudiera leerlo. Mientras Regina consultaba las instrucciones de esa maldición, Belle le explicaba la historia detrás de ese libro y como había dado con esa opción de contactar con el otro lado. "Es el único hechizo que he logrado encontrar que no requiere sacrificios de sangre. Sigue tratándose de magia oscura, pero dentro de lo que hay es la mejor opción"

"Este hechizo, Belle... requiere a dos personas con la sangre de Cora para contactar con ella" musitó Regina alzando la vista hasta las pupilas caramelo de la bibliotecaria.

"¿Cómo?" por primera vez en todo ese tiempo Emma Swan reaccionó y se acercó para comprobar ella misma lo que había dicho su novia, leyendo por encima el párrafo marcado por el dedo de la reina.

"Lo sé, pero como te he dicho es la forma menos... cruel de hacerlo" informó. "Los demás hechizos son más bien maleficios, requieren que alguien sea asesinado o torturado o mil cosas atroces"

En ese momento, las tres mujeres escucharon el tintineo de un bastón golpeando el suelo en la trastienda del local y, en cuestión de segundos, Rumplestiltskin cruzó el umbral para encontrarse con ellas.

"Rumple, dime que no es la única forma de hacerlo" pidió Regina con ojos suplicantes.

"Lo siento... pero necesitas a Zelena para hablar con Cora"

Esa frase fue como un puñetazo de vuelta a la realidad para Regina. Las palabras del libro eran claras y no había otra interpretación posible. Necesitaba a alguien que compartiera sangre con su madre y la única persona viva y que se encontraba a su disposición que cumpliera ese requisito era su dichosa medio hermana. No obstante, muy en su interior esperaba que hubiera otra forma, pero oír a su padre formular el nombre de Zelena y afirmar que ella era su única esperanza de lanzar ese hechizo la hizo derrumbarse. No había hablado con esa bruja desde que la vencieron en la plaza del reloj, se había estado pudriendo sola y aislada en el mismo psiquiátrico en el que había ingresado a Henry. No quería darle la satisfacción de pedirle su ayuda, no cuando sabía que la pelirroja pediría algo a cambio, algo que probablemente no sería capaz de darle.

"Entonces olvidadlo" dijo Regina cerrando el libro de mala gana, dando un fuerte golpe en el mostrador de la tienda con él. "Prefiero no saber nada. Superé la muerte de mi madre hace tiempo, hablar con ella solo fue una estupidez que se me ocurrió en un momento de vulnerabilidad. Puedo vivir sin saber qué más secretos me ocultó" lo dijo tan rápido, tan decidida y temblando tanto que absolutamente nadie, ni una sola alma en aquella tienda se lo creyó.

"¿Nos intentas convencer a nosotros o ti misma?" preguntó Rumple, que conocía a Regina y su lenguaje corporal mejor que nadie, bueno... quizás Emma le igualaba, pero él la había visto crecer y sabía cuando intentaba ocultar sus sentimientos.

"Papá, sabes que no puedo..." suspiró. "Me costó mucho tener contacto con Bae, se me hacía muy raro tener un hermano del que desconocía su existencia y necesité mucho tiempo para comenzar a tener una relación con él. Y eso teniendo en cuenta que Bae es una buena persona, Zelena es horrible y ha intentado matarnos a todos"