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Título: Instantáneas.

Un año después de conocer a Shisui, Naruto aprendió algo que sin duda ya debería haber sabido.

"Oye, Shisui". Llamó el rubio, rezagado unos metros detrás del amable Uchiha y su estoico mejor amigo en el campo de entrenamiento 44.

"¿Sí Sunshine?" Él canturreó de vuelta, riéndose por lo bajo ante su gruñido irritado.

"¿Cuántos años tienes de todos modos?"

Ambos Uchihas se habían detenido en seco, girando y esperando a que el rubio los alcanzara.

"¿Estás bromeando no?" Shisui preguntó con incredulidad, volviéndose hacia Itachi. "'Tachi-chan, está bromeando... ¿verdad? "

"Hmm". El cuervo distante gruñó.

"¿Qué quieres decir con que habla en serio? ¡¿Cómo es posible que no sepa cuántos años tengo?!" exclamó Shisui.

"¿Hn?"

"B-bueno, no... nunca dije cuando nos conocimos, 'tengo diez'. Y nunca dije nada sobre cumplir once años hace dos meses".

"¿Hn. Hn?"

"¡Por supuesto que sé cuántos años tiene!" Shisui resopló. "Ella tiene nueve ahora. Cumplió nueve hace dos meses, y tú cumpliste nueve en junio".

"Hmm". Itachi gruñó, la comisura de su boca se levantó ligeramente.

"Oye... ¡Tienes razón!" exclamó Shisui. "¡Ahora sí sabe cuántos años tengo!"

Naruto simplemente se quedó inexpresivo.

Dos años después de conocer a los dos Uchihas, Naruto se había acostumbrado a que el hermano menor de Itachi, Sasuke, los acompañara en sus desventuras o le exigiera a Itachi que abandonara al rubio y a su mejor amigo para entrenar con él.

También había aprendido que Sasuke se sentaba junto a ella en clase, y estaba avergonzada con razón de que no se hubiera dado cuenta de que por eso un montón de chicas rabiosas y deslumbradas intentaban mutilarla todas las mañanas. Desafortunadamente, en algún momento, Sasuke decidió que eran rivales, y siguió y siguió diciendo que si podía vencer a una rubia sin nombre (que actualmente no podía) en una pelea, entonces definitivamente podría vencer a Itachi (lo cual muy bien podía). y finalmente pudo demostrarle a su padre que valía mucho, salir de su hermano mayor por la sombra de un año y convertirse en el legítimo heredero de los Uchiha.

Naturalmente, Naruto no creía que iba a suceder, ya que Itachi ya se había saltado varios grados gracias al estatus de prodigio y ya estaba en su último año en la academia. Así que se rió en la cara del Uchiha más joven hasta que se puso azul y se ganó el odio puro de otra persona.

Era viernes, después de entrenar en el bosque de la muerte, Naruto había reparado a sus tres hijos después de un encuentro particularmente desagradable con un tigre gigante. Estaban todos de vuelta en su casa donde les estaba cocinando algo de comer. Shisui e Itachi hicieron su misión personal hace mucho tiempo llevarle la compra para que no muriera de hambre o algo así.

Por supuesto, ella les dio el dinero para que le compraran las cosas ahora, porque después de las primeras veces que aparecieron con comida, se sintió mal porque gastaron su mesada en comestibles. La única razón por la que todavía les permitía hacerlo era porque odiaba el mercado del pueblo.

Era el deslumbramiento y el insulto central.

Ahora, ella no tenía que ir allí y no se sentía culpable por aprovecharse de ellos. Problemas resueltos.

El poder del sacrificio humano. | 𝗦𝗵𝗶𝘀𝘂𝗡𝗮𝗿𝘂 |Where stories live. Discover now