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La familia se había reunido esa mañana a desayunar, ya era 25 de diciembre, navidad, oh dulce navidad.

El pequeño Soobin había pasado el rato con el pequeño YeonJun, aunque no podían hacer mucho a sus 3 mesesitos, balbuceaban y se abrazaban, incluso Seojun podía jurar que había visto a Soobin dejando un beso babeado en la mejilla de su hijo.

Claro pero es una suposición, pues eran bebés y era normal que entre ellos se babearan.

Mientras que Yeonjun había recibido una sonaja rosa muy linda por parte de sus padres, que se había vuelto la favorita de este en pocas horas, Soobin recibió unas ropas de bebé de parte de su abuela alfa mientras que la omega le había regalado un hermoso collar que esperaba que en el futuro usará como una pequeña herencia.

Los papás del pequeño soobin le habían regalado a YeonJun un peluche de pato y Dorothy sabía que este no lo soltaría al igual que la sonaja que en estos momentos estaba babeada.

En la tarde la familia Kim se había ido para preparar su fiesta familiar navideña como les era costumbre.

Habían pasado el dia haciendo nada más que platicar y ver las típicas películas navideñas, "el príncipe de navidad" Uh a JiMin le fascinaba la omega que se dedicaba por su trabajo como periodista y le habían permitido sacar una sección únicamente del príncipe que regresaba a su hogar para la coronación y se terminaban enamorando.

La noche calló tranquilamente mientras que las madres de JungKook dormían con el cachorro, la pareja se encontraba en su habitación iluminada por la luna y la chimenea mientras se repartían dulces besos.

El volumen de estos estaba aumentando, el alfa empezaba a desesperarse, con cuidado recostó al omega que antes estaba sentado en su regazo, los cabellos rubios en su frente, dándole un aspecto tierno a pesar del sonrojo y la calentura del momento.

JungKook deseaba poder tomar una foto de ese momento, besó delicadamente cada parte del rostro de su pequeño omega y besó la marca, lo que los unía, la que les hacía sentir lo mismo que el otro y les conectaba.

Delicadamente quito las prendas del omega y este hizo lo mismo con el entre besos, caricias y dulces susurros, Jeon se esmeraba acariciando cada parte de JiMin, y este tocaba el fuerte pecho de su alfa y con su otra mano acariciaba su mejilla.

—¿Listo? -JiMin no dijo nada y asintió, Jeon entró de a poco en su omega y para distraerle de aquella incomodidad le besó con pasión siendo respondido, los chasquidos de los besos resonaban por toda la habitación, poco a poco por petición de JiMin se movió levemente.

El rubio jadeó levemente y Jeon aumentó el movimiento sin llegar a ser brusco, JiMin dejó un chupeton en su pecho y besos, junto con algunos rasguños en la espalda de su mayor las cuales seguramente mañana por la mañana se notarían los chupetones en su pecho y los rasguños en su fornida espalda.

JiMin suplicaba que JungKook no se detuviera, pues en momentos bajaba la velocidad de sus caderas haciendo un vaivén lento y y torturador para el Omega.

—No me detendré -besó las tetillas de JiMin y este se retorció, dio un viaje de besos y chupetones hasta el cuello del omega e inhaló el aroma a vainilla y fresas que tanto amaba, El rubio sintió escalofríos ya que la nariz de JungKook estaba algo fría y había tocado su cuello en el proceso- Te amo

—Y yo a ti, Mi alfa -las embestidas aumentaban, los jadeos y los choques de las dos pieles sonaban en la habitación, todo ese lugar olía a ellos dos, sus aromas mezclados con un toque a excitación, JiMin podía sentir aquel nudo o mariposas en el vientre bajo, indicando que muy pronto sé correría, El Omega lloriqueo Y se aferró aun más a su espalda, jeon tomó esto como indicación de aumentar las embestidas para llegar al climax junto a su omega, el acercó su rostro nuevamente al de su pareja, besándose lentamente y bajo entre besos hasta el cuello justo donde estaba la marca, justo cuando los dos liberaron su esencia, JungKook encajó sus colmillos renovando la marca y haciendo aún más fuerte el climax.

JiMin puso su mano entre los cabellos oscuros de su alfa y los jalo levemente, el peli negro lamió y besó la marca para que cicatrizara más rápido, el rubio soltó otro pequeño gemido al sentir el miembro dentro de él creciendo aún más por el nudo, los besos no pararon hasta que el nudo se esfumó algunos largos minutos después y Jeon pudo salir de su omega, la entrada de este aún escurría lubricante natural y algo de semen manchando los muslos internos del rubio.

—Te amo mucho JungKook, de verdad -El mencionado acercó el cálido y pequeño cuerpo al suyo y lo abrazó, dándole calor.

—Yo también de amo mucho JiMin, más de lo que crees, en esta y en la siguiente vida te buscaré y siempre te voy a buscar, no importa donde estes o con quien, siempre seré tu alfa y tu mi omega.

JiMin beso la frente del alfa y unieron sus manos, él pelinegro dejó un beso es la mano blanquecina de su omega, sellando una promesa.

Una promesa de amor eterno.

THE KING 𝑘𝑜𝑜𝑘𝑚𝑖𝑛 (editando)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora