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CAPITULO 27

- veo que irán a festejar, no creas que no sé que día es... - mire su pequeño estómago, al parecer no perdió ni un segundo, estaba embarazada.

- hem sí, estábamos a punto de salir, ¿A qué venías? - pregunté serio.

Ella suspiró, de su bolso sacó un sobre con unos papeles en él; me los entrego rápidamente, al tenerlos en mis manos los leí para darme cuenta de que eran los papeles de divorcio en común acuerdo.

Ella podía ver a los niños cuando quisiera y yo tenía que dejarla verlos. Mire a Fernanda y ella se quitó los lentes, una vez más pude ver esos ojos grandes y expresivos que siempre tuvo. Ella y yo nunca debimos ser más que conocidos, más que los hijos de los amigos que nuestros padres, todo sobre nuestra obligada relación fue un completo error.

- sé que es un mal momento, pero saldré de viaje y necesito dejar esto en orden... Espero no sea un inconveniente, de todos modos supe que tu abogado ya estaba trabajando en ello... Solo necesito tu firma. - dijo intercalando su miranda conmigo y con nuestros hijos, parecía no saber qué hacer.

- yo... ¿Tienes pluma? - ella rápidamente sacó de su bolso una pluma.

Tome la hoja en la que se supone debía firmar, le di una rápida mirada a mis hijos y otra a Fernanda, firme y sin más rodeos entregue el sobre. Estaba por decir algo cuando una pequeña riña se formó dentro del coche del que venía Fernanda. Un niño de unos seis o siete años bajo toda la ventana del automóvil dejando ver a tres chicas y dos chicos.

- ¡Carl! - gritó el chico más cercano a la ventana

.

- que fastidio contigo... ¡Tonto! - dijo una de las chicas.

- tonta tú, tonta, ¡Tonta! - se escuchó mientras cerraban la ventana.

- perdón por eso... Y-ya me voy, hem, niños - estiró la mano a Dafne y está casi sin dudarlo la tomó.

- mamá... ¿Qué es? - pregunto apuntando a su estómago.

- es obvio que un bebé, mensa. - se burló Travis mirándola seriamente.

Harold

Dafne miraba a mamá como cuando se fue por primera vez, como esperando que de alguna forma ella pudiera arrepentirse y regresar. O puede que sea lo que yo quería y por eso lo mire de esa manera, muy dentro de mí, admito que aún quiero mucho a mi mamá. Aunque por lo que se alcanza a ver, mamá es más feliz, ahora... Sonríe.

- es niña... - le contesto mamá a Dafne ignorando que Travis había insultado la había insultado.

- mamá, ¿Nos vas a venir a ver? - volvió a preguntar Dafne, está vez con su voz en un hilo.

- si todo va bien con el embarazo, prometo venir a verlos talvez la próxima semana. - mamá le acarició la cabeza sonriendo.

- oye. - dijo Travis mirando fijamente a mamá.

- dime Travis... - ella parecía querer sonar amable, estaba haciendo su mejor esfuerzo, se le notaba.

- ¿Podrías llamarnos cuando Nazca? - pregunto serio.