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CAPITULO 26

Harold

Mis dedos estaban fríos, tenía a Jake encima de mi y besándome de manera apasionada; claro que le correspondía, pero fuera de mover los labios, no estaba haciendo nada, todo era muy rápido y no como yo lo esperaba. Creí estas cosas se planeaban y así, pero ahora no podía pensar en más que en aportar algo, a lo que sea que estuviéramos haciendo.

Alguna vez uno de mis compañeros, estaba viendo porno en el salón de clases, así que se giró para enseñarme el vídeo, me puso su teléfono en toda la cara y fue inevitable ver a una señorita desnuda junto a un hombre en las mismas condiciones; aunque en la corta escena aún tenían algunas prendas, gracias a dios no ví mas. Fue en ese momento en que perdí un pequeño porcentaje de mi hermosa virginidad ocular.

Así que como no quedaba otra opción, lo poco que ví, lo aplique con Jake.

Pase mis manos a sus caderas, sin más, las deslicé por los costados de su torso hasta llegar a su pecho... Y ya, fue lo ví; ¿¡Que se hace ahora!?, ¿¡Que procede!?, Tiene que haber algo más. Sabía que tenía que hacer gracias a la ciencia y las cosas sucias que platican mis compañeros de clase, pero no entiendo porque no vamos directo al grano. Jake bajó los besos a mi cuello y fue cuando más me asusté.

Le di un empujón leve, tirandolo de lado en la cama, inmediatamente abrace la almohada y me hice huevito sobre ella.

— ¿Q-que pasa? — escuche decir a Jake en el borde de la cama, no quería contestar, estaba tan apenado que las orejas las sentí calientes.

— Harold, perdón... — me levanté al escucharlo, sin mirarlo negué apretando los labios. No era culpa de el; bueno de nadie de echo.

— y-yo — aclaré mi garganta y seguí — necesito saber cómo se hace y después... Solo así, me animaré. —  al no escuchar respuesta gire la cabeza, y casi de forma inmediata recibí un beso de su parte. Al menos no está enfadado conmigo

— no te preocupes, tengo hambre vallamos a comer algo. — sonreí al verlo tranquilo.

Bajamos a comer galletas para distraernos de la escena que arme, no me siento listo para hacer ese tipo de cosas, pueden llamarme ridículo o cobarde; pero todo es mejor a su tiempo.

Dereck

Tuve problemas con el trabajó, todo para poder tener el libre el día del cumpleaños de Dylan, no recuerdo si le festejamos algo cuando cumplió el año, ni siquiera recuerdo haberlo felicitado, en ese momento estaba tan ocupado con otras cosas que ni siquiera le ponía atención a como Fernanda trataba a nuestros hijos, de todas formas yo no soy mejor que ella; jamás fui paciente con ellos, aunque con la llegada de una cabeza más razonable que la mía, también llegaron nuevas formas de pensar, aún tenía mucho tiempo para abrazar a mis hijos eso si, creo que no cualquiera lo aprecia, por eso voy a intentar tener un buen año.

Regresando a lo de hace unos instantes... Viéndolo del lado víctima. Harold tenía todas las razones para defenderse, aunque supongo que son otros tiempos y en mi época había mejores personas; los adolescentes de esta época son muy crueles con la gente y con ellos mismos, debo atreverme a decir que el simple echo de no aceptarse a ellos mismo en una simple fotografía ya es algo preocuparte; supongo que ahora es per que antes, en mi época avanzaba el que más esfuerzo le ponía a las cosas. Porque hasta el amigo más pobre acabo su carrera universitaria; parece ser que lo que mueve al mundo en estos tiempos ya no es el hambre, sino la popularidad.