Rebelde

Mel

La figura de Durham se alejaba iluminada por las luces rojas y azules del coche de policía.

-Siento lástima por Adele. Un hijo mata al suyo propio. Y ella se queda sola, uno bajo tierra y otro entre rejas. Es algo cruel.

-Acudió a nosotros porque probablemente sospechase algo. Quería quitarse el remordimiento de no haber hecho nada. Ahora estará en paz

Eric y Sebastian pasearon por las calles de la ciudad, dando un largo rodeo hasta llegar a casa. Sin embargo, cuando pasaron al lado del portal, Seb tiró de Eric hacia afuera

-¿A dónde me llevas?

-A casa-le guiñó un ojo pero no había tono de broma. Algo iba mal. Seb dirigió una mirada discreta a la figura de negro que les seguía.

-Claro, vayamos a casa-se acercó mucho a su oreja y susurró-cuanto tiempo lleva siguiéndonos

-Desde que salimos de la estación-contestó en otro susurro. Se separó un poco y continuó en tono normal- ¿qué tal si vamos a celebrarlo antes?

-¿A aquel restaurante pijo otra vez? No, gracias

-Sé de un pub normal y corriente donde podríamos brindar ¿Has oído hablar del Marfil?
-No, pero me gustaría.

La persona que les estaba siguiendo se sentó en una mesa. Estaba en una esquina, fingiendo que atendía el móvil. Seb se levantó y fue a la barra

-Dos ron colas, ¡Esta noche estamos de celebración, Mel!

-¿Y eso?
-Otro caso cerrado

-¡Eso es fantástico!
-Yo diría más bien que tengo a mi lado una persona adecuada

-Me alegro por ti. Aunque deberías tener cuidado. Hay pirañas en el agua...

-Tengo una un par de mesas por detrás. Dime algo que no sepa.

-Dicen que el otro día te metiste en una pelea. Es un rumor del rellano de tu escalera.

- Él ha puesto precio a mi cabeza- a Mel no le hacían falta más explicaciones. Ella y Seb habían sido amigos desde el colegio y sabía que clase de panorama tenía en su casa

-Estás tejiendo tu red. Pero ¿llegarás a terminarla antes de que venga la tormenta?- Melinda puso los hielos en los vasos.

-Avanzo muy lento. No sé cuando va a atacar. Por ahora me limito a estrechar el cerco

-No quiero que se repita la historia. Tengo miedo que el monstruo que se despertó hace 100 años, vuelva a por más.-al hacer mención de la guerra Mel resopló y un mechón largo y rubio se despegó de su cara

-Haré lo que sea necesario

-Este sitio no necesita más mártires debajo de la carretera- echó una cantidad generosa de ron en los vasos de tubo

-Intentaré que no nos maten, aunque no te prometo nada.

-Al menos tú estás avanzando. Yo me he quedado atrapada

-¿Cuál es el problema?

-El capullo de mi ex. Dice que no puede vivir sin mí, que se va a matar, le he bloqueado de todas las redes sociales te lo juro...pero encuentra forma de volver a escribirme. Me he cambiado hasta de número.

-Así que Jason está comportándose de manera asquerosa... Mel por favor, ve con cuidado. Si tienes miedo al terminar el turno, sabes que puedes llamarme y sabes dónde encontrarme si algún día decide presentarse en tu casa. Recuerda que mi casa está abierta...

-A quién lo necesite ahí fuera. Tranquilo, me mudé hace poco. No me encontrará tan fácilmente. Debería dejarte. No debería hacer esperar a tu chico-le guiñó un ojo-No te puedo decir que tienes mal ojo, es mono