Don't Leave Me Now (DLMG #3) [Remastered]

81. Serenity.

~Harper~

El profesor termina con la clase de cuatro horas sobre historia del periodismo, dando por terminado mi primer día de clases. Aunque al principio todo ha sido realmente extraño, comparando dos campos que no tienen nada que ver con el periodismo, las clases han terminado focalizándose en lo que me interesa, gustándome más de lo que había esperado entonces.

Dirigiéndome a la salida, soy adelantada por una chica y su séquito de amigas, mientras que escucho mi nombre a mi espalda. Al darme la vuelta, me encuentro con Chris Dawson, el chico que se me sienta detrás, y el que parece ser su mejor amigo, Nick Rooney.

– ¿Sí? ¿Necesitáis algo?

– Lo cierto es que si, preciosa. —Me dice el apuesto y alto chico, mientras que el otro intenta evitar mi mirada— Necesitaba preguntarte si alguna vez te han dicho que eres la chica más bonita del lugar.

Sin poderlo evitar, alzo una ceja mientras me cruzo de brazos. «¿Me está hablando en serio?» me digo a mi misma, fijándome del todo en los dos chicos frente a mí. Chris es alto de cabello castaño claro y ojos oliva. Se nota que hace mucho ejercicio y que está orgulloso de mostrar sus músculos debido a sus ajustados ropajes. Por otro lado, Nick es algo más bajo, de ojos azules y cabello rubio y, al contrario que su amigo, no parece querer mostrar su cuerpo, ya que lleva ropa más bien ancha.

– Gracias, sí que me lo han dicho alguna vez. Mi marido es el hombre más tierno del planeta y estoy muy enamorada de él por ello. Así que... Si no necesitas nada más...

– Así que casada, princesa... No me extraña, la verdad. Con lo guapa e inteligente que eres cualquiera sería afortunado, pero, si alguna vez te cansas de él o te apetece probar nuevas experiencias... Ya sabes dónde estoy.

– Chris... Basta... —Dice el otro muchacho en un susurro— ¿No ves que no está bien?

– Oh, ya veo... ¿Y qué dirá la chica que acaba de salir? ¿No es acaso tu novia? ¿Cómo se llamaba? ¿Melanie?

– Ni ella ni yo somos celosos así que no pasará nada. Además, no te creas que va a haber sentimientos de por medio, preciosa. Solo son dos adultos disfrutando de sus cuerpos...

– Todo un galán, sí señor... Adiós, chicos. Ha sido todo un placer conoceros.

Sin permitir a ese estúpido mujeriego abrir la boca, retomo el paso hacia la salida para encontrarme con mi marido quien, a pesar del tiempo que he sido entretenida, todavía no ha llegado al punto de reunión que escogimos anoche para encontrarnos al finalizar las clases. Espero y espero, pero no parece llegar. De repente, veo a Jayden acercarse a mí, saludándome con un abrazo y dos besos.

– ¿Cómo han ido tus primeras clases? —Me pregunta, con una amplia sonrisa.

– Han sido interesantes, la verdad. —Respondo, soltando un largo bostezo que he intentado retener desde hace rato— ¿Las tuyas?

– Increíbles. Me lo he pasado como un niño en una tienda de juguetes. Pero bueno, no quiero aburrirte con mis historias. ¿Estás esperando a Brandon?

– Así es... Habíamos quedado aquí, pero... Voy a tener que hacerle un mapa porque no lo he visto ni siquiera salir de su facultad. —Digo, señalando con el dedo un edificio a lo lejos.

– ¿Acaso ha salido alguno de sus compañeros o algún alumno de allí? —Niego con la cabeza, al recordar que no he visto gente con mochilas salir todavía— Pues todavía estarán en clase entretenidos con algún tema... En fin, yo me voy ya que aún estoy cansado del vuelo y eso que ya han pasado dos días...