LAGRIMAS DE LUNA

Dos años de guerra un año de paz 4

Dos años de guerra un año de paz 4

Cuando supieron del embarazo, Jiang Yanli comenzó a tejer ropa para el pequeño sobrino que venia en camino. Jiang Cheng felicito a su hermano, pero también se sintió terriblemente incomodo, no porque la amara, sino por el lugar y la forma en la que la cría llegaría. Seria del clan Jiang o su madre le inculcaría un camino diferente, y su padre, el camino de su padre era demasiado peligroso.

Lo extraño, lo que llamó la atención de los discípulos y los sirvientes, era que el vientre no crecía. Incluso Jin ZiXuan encontraba aquello confuso, desde la audiencia en la Torre Koi, abusando de su propio desempeño, ahora aprovechaba cada fin de semana para presentarse en el Muelle de Loto, para su alegría, la doncella Jiang había pasado de dedicarle dos palabras a pasar media tarde con él.

Entre esas visitas, ni una sola vez había hablado con Wei WuXian, pero lo veía con su esposa, ella a veces parecía muy enferma, pero a la semana siguiente estaba hermosa y sana, eso sí, en seis meses su vientre apenas había crecido, si se colocaba una capa ancha, ni siquiera parecería embarazada, y si uno no hubiera sabido del embarazo, creería que este recién estaba formándose, ahora no era diferente, estaba sentada en la puerta de sus habitaciones, con un vientre apenas notorio, con la piel pálida y el cuello flaco. Se rumoreaba que había algo extraño en ese embarazo, no solo por la debilidad de la madre, o por el tamaño del vientre. había quienes rumoreaban que Wei WuXian estaba practicando su arte con su propio hijo.

Junto a Jin ZiXuan estaba Jiang Cheng, se dirigían ambos en busca de Wei WuXian, ambos sintieron al mismo tiempo la barrera de energía, ella ahogo un grito, parecía que no los había visto y solo ahora se daba cuenta de lo que sucedía.

― ¿Qué significa esto? – Jiang Cheng estaba libido de la ira en ese momento

― Lo siento, de verdad... él ha salido y... - ella estaba temblando, pese a que esa misma barrera que a ellos les impedía dar un paso más, tampoco permitiría a ningún ser demoniaco acercarse, para Jin ZiXuan esto, además, era algo horrible.

― Si nosotros no podemos entrar – dijo mirando al líder Jiang – ella tampoco puede salir... esta aprisionada ¿Por qué?

Luego supo que tampoco contaban con sirvientes que se dedicaran a esas habitaciones, Wen Qing, pasaba casi todo el día encerrada, sola, sin un solo amigo. Se entero que Jiang Yanli, tenia conocimiento de la barrera, ella solo se acercaba para preguntar si necesitaban algo. Jiang Cheng luchaba por tratar de calmarse mientras su hermana hablaba.

― A-Xian no puede cuidarla todo el día, el embarazo la ha dejado débil, si alguien la atacara...

― Si yo le hago algo ¡Es lo que insinúas!

― Hermano...

― ¡Explícate!

Jin ZiXuan tuvo que interponerse, colocando a la doncella Jiang detrás y enfrentando al líder Jiang. Le dio miedo que ella siguiera ahí, el Muelle de Loto había cambiado y no quedaban rastros de su pasado, la propia gente interna no era lo mismo, todos parecían violentos, como si, aunque la guerra termino, aun esperasen regresar a la batalla. La cortina se corrió y entro Wei WuXian, que tampoco parecía natural en ese momento. Su presencia condensaba el aire, su rabia se palpaba.

― Gracias, maestro Jin – no lo miraba, sin embargo, sabia lo sucedido un momento antes – Shijie, te importaría prepararnos un te

― ¿Quieres que salgan para matarme?

― Ja, ja, y es a mi a quien llaman paranoico, ya me he enterado de que has ido a mis habitaciones, ya hablamos de esto

― Contrólate