Capítulo 2 "Vacío"

1K 164 111
                                    




Harry había pasado todo el tiempo que le permitieron en aquella habitación con su abuela, los medicamentos hicieron su efecto manteniendo alejado el dolor del cuerpo de Elizabeth pero no del corazón de su nieto.

Tuvo que abandonar el lugar con los ojos hinchados y el pecho oprimido, necesitaba estar en el trabajo y volvería más tarde hasta que; el tiempo y la vida misma tuvieran compasión de ellos regalándoles un poco más de tiempo compartido.

Caminó hasta su auto directo a su tienda, no había tiempo para una ducha así que lo pospondría para la tarde. Mientras conducía pensaba en cuán frágil es la vida, cuando parece que las posibilidades del mundo parecen infinitas para él pero no para Elizabeth y eso dolía.

A pesar de que los años habían pasado, Harry la visitaba puntualmente cada día, ellos nunca se separaron, siendo su Nonna el único pariente que el muchacho tenía. Los únicos Styles en el mundo.

El día transcurrió lento, su semblante no había cambiado, el cansancio acumulado se notaba en los músculos adoloridos de su espalda, en los dedos que se crispaban y en la tonalidad verduzca con tintes marrón debajo de sus ojos.

Estaba por cerrar su floristería cuando revisó su teléfono, tal vez por vigésima vez; había enviado un mensaje de texto a su novio para decirle lo que pasaba con su abuela y cuánto estaba sufriendo por ella, pero solo recibió un ok como respuesta.

Se sentía agotado en todos los sentidos, pasó una de las peores noches de su vida y la única persona que era su fuente de amor se estaba apagando frente a sus ojos sin que él pudiera evitarlo y, el hombre que se había incluido en su vida desde hacía dos meses, era incapaz de mostrar algo de apoyo.

Conoció a Mike desde hacía un año cuando llegó a la floristería por primera vez, había pedido un arreglo muy sencillo y Harry le había obsequiado un lirio dentro de este, un gesto amable pero sirvió para iniciar una conversación.

Harry se negó a tener nada con él en un inicio, algo no se sentía bien y había mantenido su distancia hasta que Mike comenzó a insistir y aparecerse en su tienda, eso había sorprendido al rizado.

Mike había vendido muy bien la imagen de sí mismo que quería dar a Harry, analizó sus necesidades y calibró suplirlas de manera excelente los primeros días. Lo llenó de atenciones y cuando calculó que ya había capturado su atención comenzó a mostrarse tal cual era.

Él era guitarrista en una banda que no había logrado nada en realidad, solo esporádicas presentaciones en bares escondidos y cuestiones de drogas, un tipo joven que decía escribir canciones pero sin mayores logros, alcohólico, casi inactivo. A veces se instalaba en su departamento y cuando el rizado intentaba una conversación coherente, Mike solo enfurecía, gritaba, y se marchaba. Ignoraba los suficientes días a Harry hasta que este se disculpara y prometiera no volver a hacer, lo que sea que haya hecho, Harry no tenía claro qué. Era un manipulador.

Pero al inicio era diferente y Harry quiso intentarlo en serio, comenzó a actuar como un novio enamorado, y se esforzaba por estarlo, era atento, le daba dinero, llamaba o le enviaba mensajes durante el día solo para saludar y saber qué tal iba, pero entonces Mike dijo que lo asfixiaba y que odiaba que lo controlara, así que Harry dejó de hacerlo.

Mike nunca llevó a Harry a alguna presentación de su banda, casi nunca salían y cuando lo hacían; no le tomaba la mano a pesar de que Harry lo buscaba. Comenzó a criticar su aspecto físico como; sus uñas pintadas, los anillos en sus dedos o las ropas estampadas.

—Te ves ridículo, no saldremos a ningún lado hasta que las retires, y cámbiate de ropa ¡maldición Harry! —la mirada dura le erizaba la piel— No me hagas gritarte, no me hagas enfurecer —Harry no respondía, solo aguantaba sus lágrimas mientras cambiaba su atuendo y retiraba aquellos colores de sus uñas. —Lo hago por ti Harry, es por tu bien ¿de acuerdo?

Era claro que se avergonzaba de cómo lucía y gradualmente lo usó como condicionantes, hasta que el rizado dejó de usarlos por completo, Mike era un controlador.

Harry no lo reconocería jamás delante de su abuela, o de nadie más pero se sentía enfermo y odiaba en silencio la sensación de vacío que sentía cuando estaba con él.

Pero era el único chico que lo había considerado y Harry le creyó cuando Mike dijo que ser tan femenino solo lo hacía ver ridículo y que por ello nadie volteaba a verlo.

Abrió la puerta de su departamento, reconoció algunos rastros de que Mike había estado ahí, ropa sucia acumulada en el suelo de la habitación, colillas de cigarrillos, cajas de comida rápida y botellas vacías de cerveza por la sala, pero ninguna nota, tampoco había recibido un mensaje.

Mike era así, a veces desaparecía por días y solo hasta que se quedaba sin ropa limpia o dinero acudía a Harry, con promesas de tener por fin un proyecto exitoso que les daría la fama y el dinero que tanto buscaban, ¡patrañas!

Si tuviera que describir lo que estaba sintiendo tal vez diría "vacío" aquel espacio en su pecho que nadie más podía llenar, "enojo" sería la siguiente en su lista y "decepción" vendría después. Sentía como si estuviese frente a una invasión a su espacio, a su vida; en la plena desolación de su dolor siendo ignorado.

Levantó un poco el desastre y se dirigió a su habitación, tomó una breve ducha, el agua caliente solo aumentó un poco el cansancio de su cuerpo, ansiaba una siesta, su cuello estaba adolorido debido a la mala posición de la noche anterior mientras durmió un poco sentado junto a la cama y sosteniendo la mano de Elizabeth.

Con su pulgar e índice masajeando el puente de su nariz decidió que tal vez la situación con Mike no era tan complicada y era solo el cansancio lo que le quemaba. Decidido a no predisponerse, tomó su teléfono y le marcó. Una larga espera y finalmente obtuvo una respuesta.

—¿Qué pasa Harry? —su tono seco, quizá solo era un mal momento para él también, de pronto Harry se sintió avergonzado de llamar y parecía más tímido, Mike le hacía sentirse pequeño.

—Hola... lamento molestar —quiso llorar, se mordió el labio para apagar el llanto, probablemente no pararía —yo... ehmm estoy en mi departamento y me pregunto si vendrás hoy.

—No lo sé ¿Por qué? ¿Qué necesitas ahora?

—N-nada, es solo que ... bueno yo no... no, ehmm...Es solo que...

—¡Odio cuando tartamudeas!

—Lo siento, lo siento... lamento mucho molestar. Mi abuela enfermó y ...

—¡¿Estás llorando?! Carajo siempre es lo mismo contigo! ¡Deja de llorar!

—Perdón, lo lamento... es que pensé que... por favor Mike solo quiero que vengas conmigo a verla porq...

—¡Agg No, no lo creo ¿Por qué me haces esto Harry? Sabes que no me gusta ese lugar y estar rodeado de esos viejos que huelen mal—no había cuidado en su tono, claramente no quería acompañarlo... ni hablar con él.

—Por favor ¿Mike? Por fav...

—No —había decisión firme cuando respondió —Lo haría si pudiera pero tengo una presentación hoy . Escucha Harry, estoy ocupado, llamaré después.

La llamada finalizó no había terminado y la frustración ya se dispersaba en su pecho. La sensación era abrumadora. Después del caos de hace unas horas junto a la cama de su abuela y el corazón aún doliendo, una desesperación por tener un hombro en el cual llorar, una mano que lo sostuviera.

Harry solo anhelaba lo que muchos quieren; alguien en quien apoyarse, pero se había cansado de pedirlo, había aceptado que nunca lo tendría.






.................................................................................

"Eres amad@?¿eres besad@ con amor y pasión? ¿eres sostenid@? Si la respuestas es "No", recuerda que siempre tendrás una nueva oportunidad para salir de ahí y empezar de nuevo.

Gracias por leer.

MAKI <3

&quot;Las tardes con Arthur&quot;Место, где живут истории. Откройте их для себя