LA TIERRA MÁGICA

CAPÍTULO 15// LA RESURRECCIÓN

Los contactos de Melissa fueron  suficientes para salir de reino del bosque sin ser vistos, llegado a la frontera del antiguo reino, las cuales ni tan siquiera estaban vigiladas en demasía y entre la oscuridad de la noche nos adentramos de nuevo en dicho bosque fantasmagórico, el cual estaban en constante erosión y muerte y constantemente patrullado por las tropas de los seres oscuros a las que al principio dimos esquinazo, no obstante era evidente que cuando llegamos a la ciudadela de las hadas tuvimos que elaborar un plan para poder colarnos dentro sin crear un conflicto, cosa que era casi imposible, debido a que esa noche casualmente habían mas criaturas de lo normal y estaban concentradas hablando su lengua prohibida, pero que era evidente que estaban tramando algo como era de costumbre con la diferencia que estaba vez redoblaban en numero de orcos y trolls que normalmente habitaban esa zona, lo que quería decir que sería un ataque y no una mera escaramuza fronteriza con los elfos. La sombra estaba moviendo sus peones de nuevo en un tablero que aún para nosotros no estaba definido.

- Jack: Veo más factible esperar a que salgan todos - comentó entre susurros-

- Melissa: pero es mi reino lo que atacarán no me puedo quedar los brazos cruzados.

- Alicia: Si informamos de esto Lumina sabrá que la hemos desobedecido y no hemos continuado con la misión y tu rey sabrá que nos hemos colado en su reino sin permiso de verdad quieres eso - pensó mejor- ¿Por qué no le envías una carta a alguien de tu confianza de la corte-

- Norber: Si exacto, podrías hablar con Ruelleh, la secretaria del interior.

Melissa redactó una carta breve, pero concisa con la gravedad de la situación y el inminente ataque, al cual después depositó en una de las patas de su lechuza para ser entregada a su amiga de la corte real y una vez todos los monstruos se fueron de la ciudadela en ruinas salimos de nuestras posiciones para buscar las dos tablas que faltaban para saber el final de la historia de las hadas, cosa que no fue nada fácil, ya que por lo general dicho pueblo acostumbraba a dejar constancia de toda su historia, sin embargo no a simple vista, así pues estuvimos cerca de dos horas buscando sin resultados aparentes.

- Alicia: ¡Mirad! ¡aquí hay una tabla que no había visto!

- Melissa: A ver - comento muy curiosa haciéndose un hueco-

"Tambores enemigos suenan en nuestros bosques ante una imparable ocupación por parte de las criaturas oscuras, el guardián ha intentado detenerles, pero son demasiados para él. Cada vez están más cerca, el miedo se extiende por nuestras tierras, la hierva se está tiñendo de sangre, los árboles muriendo y la tierra enfermando, las hadas que no mueren luchando mueren de hambre, el guardián, llora, lucha y cada vez está más débil, los tambores cada vez están más cerca, pronto---INCONCLUSO---"

- Norber: Estaban realmente aterradas... no sabían lo que hacer y lo peor es que su muerte fue lenta y agonizante - le afectó la información y tocó afectado la tabla-

- Melissa: Y yo quiero saber que narices están haciendo nuestros compatriotas mientras nuestro viejo aliado sufría  - habló molesta y con ira-

- Alicia: Escucháis eso - escuchó un susurro ... libérame - Está cerca y atrapada... - salió corriendo-

- Jack y Norber: ALICIA ESPERA - la siguieron mientras Melissa hacia guardia en la puerta de la ciudadela-

Los dos jóvenes siguieron a la chicas de los cabellos dorados antes de que se topase con alguna criatura non grata, sin embargo llegaron tarde puesto que Alicia ya había entrado en la cama en forma de bóveda de cañón  donde había un túnel subterráneo con unas escaleras algo erosionas y musgosas. Cuando los tres tocaron dichas escaleras, estas desaparecieron creando un tobogán obligándonos a descender bruscamente hacia el interior de la cavidad finalmente cayendo bruscamente hacia otra estancia en ruinas y llena de lianas donde al final se encontraban una raíces doradas en las cuales habían un capullo de plata de un tamaño considerable, lo que nos provocó una gran incertidumbre, debido a que de el emana una energía extraña y fuerte. Además que Alicia no paraba de escuchar ese alarido pidiendo libertad, por lo que la joven en contra de la voluntad de sus amigos, casi como si estuviese hipnotizada toco dicho capullo provocando un resplandor de engería la instante y este empezando a agrietase, así que  Jack creo un escudo de hielo que protegió a los tres del resplandor para mas tarde romperse con una onda energética.