El dios sellado lamenta la pérdida de su juguete y la desesperación de Cale será su compensación.
Cale es enviado a otra versión del nacimiento de un héroe donde nada será igual que la primera vez, sin embargo, Cale decide asegurarse de que el dios...
Al abrir los ojos, Cale se encuentra con un techo familiar, aunque había estado aquí pocas veces en el pasado lo recuerda muy bien, la habitación del palacio Roan reservada para huéspedes de gran importancia.
- Parece que he llegado en el momento adecuado.
Al escuchar una voz tan conocida, Cale gira su cabeza para encontrarse con la mirada del príncipe heredero Alberu, del mismo modo que cuando ve la mirada llena de odio de su amigo Choi Han, su corazón duele cuando ve los ojos fríos e indiferentes de Alberu.
- Su alteza, el sol del imperio Roan, cual podría ser mi suerte para tener el honor de su presencia.
La mirada de Alberu se vuelve sombría y Cale hace una expresión llena de nostalgia.
- Parece que el Joven maestro Henituse sabe quién soy, pero aún no se ha recuperado del todo.
- Qué noble de este reino podría no saber quién es su futuro Rey.
La mirada de Alberu vacila por unos segundos, entre tanto Cale se examina y ve que sus heridas de la batalla en la Plaza de la Gloria han desaparecido, incluso las que tenía mucho antes de eso también desaparecieron, pero nota algo que lo molesta.
- Es solo una precaución, aunque indudablemente eres el héroe que nos salvó de ese ataque terrorista hace 3 días, el hecho de que supieras que habría bombas en el lugar te hace una persona sospechosa.
- Espera, ¿dices 3 días?
Pregunta Cale preocupado, mientras manipula inconfortablemente a los grilletes y las cadenas que atan sus manos, como si estuviera recibiendo un trato injusto.
- Incluso si soy sospechoso, no cree que estas cadenas son demasiado, le basta con que ponga unos cuantos guardias.
"Su tono cambió de repente a uno informal, como si estuviera hablando con cualquier conocido, al punto que casi se siente irrespetuoso"
- Se las retiraremos en cuanto responda unas preguntas.
Cale sabe que, aunque de las respuestas correctas Alberu va a seguir desconfiando de él, así que hace un gesto que le dice a Alberu que lo hará porque no tiene de otra.
"A pesar de ser un héroe, parece que los rumores de que su personalidad es un desastre no son mentira"
- Lo primero que quiero saber es ¿Cómo supo de las bombas? y lo segundo ¿Cuál es su relación con la organización que hizo el atentado terrorista?
- Cuando responda esas dos preguntas me quitara esto, ¿Verdad?
- Solo si su respuesta es convincente.
- Supongo que debe ser así.
La sonrisa brillante de negocios de Alberu es cada vez es más difícil de mantener por como esta persona le responde tan casualmente a todo lo dice, incluso un duque se sentiría intimidado por esta situación, pero para este joven noble no parece ser el caso.
- Para responder su primera pregunta, primero necesito saber si sabe que son los poderes ancestrales.
- ¿Poderes ancestrales? Por supuesto que lo sé, son esos poderes de la naturaleza que solo alguien con mucha suerte o una bendición divina puede obtener.
- Algo como eso, yo tengo varios poderes ancestrales.
- ¡¿Varios dices?!
Alberu no pudo esconder su desconcierto y por un breve segundo perdió su aura soberana.
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- Así es su alteza, tengo varios de ellos, pero debido a que mi cuerpo es débil no puedo usarlos como quiero.
- Entonces dices que sabías lo de las bombas por un poder ancestral ¿Cómo?
- Bueno, no sé cómo explicarlo exactamente, pero gracias a uno de mis poderes puedo ver algunos sucesos del futuro.
- ¿Quieres que crea esa patraña?
Cale supo que dada la personalidad de Alberu probablemente no le iba a creer su mentira, aunque lo que dijo no era del todo falso, pero como ya lo tenía previsto sabía cómo responder.
- Bueno, además de sucesos, hay otras cosas, pero no estoy seguro si aquí sea un lugar seguro para desvelar información tan delicada.
- ¿A qué se refiere?
- Estoy seguro que su alteza sabe a lo que me refiero, pero no se preocupe, no es un chantaje.
Los ojos fríos de Alberu examinaban cada una de sus expresiones de Cale con la intención de saber si realmente sabía algo o solo era un charlatán.
- Solo le diré algo, a pesar de sus circunstancias usted es la persona más idónea para tomar el trono después de su padre.
- ¿Dices que no debería ser digno?
- Es todo lo contrario creo firmemente que usted es el único digno, es usted quien no lo cree así.
- ¡Tonterías! ¡¿Crees que con esto te ganaras mi favor?!
Alberu exclamó y se aproximó a Cale con su rostro lleno de molestia, pero Cale mantuvo su expresión estoica por lo que Alberu se tranquilizó nuevamente.
- ¿Debería responder mi segunda pregunta ahora?, estas cadenas son molestas.
- *suspiro* Hazlo.
- No tengo ninguna relación con la organización terrorista, pero la tendré en el futuro.
- ¿Qué dice?
- Me convertiré en la persona que le mostrará el infierno a esos bastardos que se atrevieron a hacerle daño a mi familia.
- Pff... JAJAJAJAJAJAJA
Al ver los ojos de Cale que ardían como fuego con fuerte determinación, Alberu estuvo convencido de que lo que decía era cierto. Pero ver a un noble hablar ese vocabulario y sin vergüenza alguna delante del príncipe heredero era tan absurdo que Alberu no pudo contener la risa.
- Parece que puedo quitarte las cadenas ahora.
- Se lo agradesco su alteza.
- Una cosa más... si te sientes recuperado, deberíamos...
- Por favor que no sea una medalla en un evento tedioso ni nada por el estilo.
- ...
Alberu que en el momento le estaba quitando los grilletes a Cale se detuvo y al no ser capaz de terminar lo que estaba diciendo por la repentina interrupción, levantó la mirada para encontrarse de frente con Cale quien estaba haciendo una expresión de disgusto.
- Ah... comprendo, en ese caso debes decirme si deseas algo, sería una vergüenza para la familia real si el héroe que salvó a todos de ese terrible incidente no recibe algo.
- Dinero
- ¿Perdón?
- En ese caso quiero dinero, entre más sea mejor.
- ¿Uh?
- Por cierto, ¿puede darme también una poción sanadora de alta calidad?
No importaba si ya se había hecho a la idea que esta persona tenía una personalidad difícil, Alberu no se acostumbró a su comportamiento directo y poco educado. Pero esto estaba a un nivel diferente, ¡le estaba pidiendo dinero como si fuera la cosa más natural del mundo!
- Bueno, eso que me pide se lo podemos dar sin problema.
