«Todos somos el trébol de una persona»
Rose Dawson es una estudiante muy aplicada, con muy buenas calificaciones. Eso logra que su universidad le otorgue una pasantia de trabajo a una de las mejores Editoriales en Dublín, Irlanda, solo por 6 meses...
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Rose
Me levante con un resfriado terrible, por causa de la llovizna de anoche, parpadeo varias veces refregando mis ojos y veo que me dormí con el buzo de aquel chico. Solo al recordarlo me da un escalofrío en todo el cuerpo, no sé qué fue lo más vergonzoso de anoche, que no sabía mi dirección para irme sola y haberme perdido o que le haya dado lastima para que me dé su buzo anoche, definitivamente lo segundo, podría haberme ido en taxi, que él me lo iba a pedir, pero no sé la razón por la que cambió de opinión y me acompañó hasta mi departamento, para el colmó él vive en el mismo lugar y es mi vecino ruidoso.
Miro el buzo que tenía puesto aún, frente al gran espejo que estaba a un costado de mi cama, me acercó descalza sintiendo el piso frío, estiró los brazos a los costados comprobando que me queda gigante, hago una pequeña mueca rara y me la quito, se me da la necesidad de inhalarlo, pero no tendría los resultados que esperaba, solo huele a humedad por la lluvia, aunque no estuviera mojada.
La dejo en el cesto de ropa sucia, elijo la ropa para ponerme ahora y voy al baño a darme una ducha relajante. Luego de cuatro canciones reproducidas, entré vestirme y peinarme, salgo del baño y empiezo a ordenar el cuarto, no sin antes poner la ropa sucia, entre ellas el buzo de ese chico Angus, al lavarropas, después de haberlo hecho y ordenado el cuarto, me fui a desayunar tostadas con mermelada y queso crema con café, mientras esta vez sí estar mirando el pronóstico del tiempo para hoy.
Mientras lavaba los trastes pude oír desde aquí la música a todo lo que da, Everytime de Simple Plan sonaba desde su departamento, debo admitir que por ahora no tiene un mal gusto musical. Tarareo la canción mientras termino de lavar, esta vez el pronóstico ha dicho que no lloverá todo el día de hoy, algo bueno, lo extraño es que el clima cambie cuando quiere y lo malo es que hará 35°C así que tendré que cuidarme de que no me de mucho el sol en la cabeza o si no me desmayare, busco mi gorro piluso de color amarillo, me hago un poco de ondas en el pelo y me miro un poco en el espejo del baño.
Me miro las pecas que tengo, no son muchas, pero a mí en lo personal nunca me gusto tenerlas, una de mis inseguridades es esas, más otras cosas más, suspiro rendida de haber pensado en eso y me maquillo para nada exagerado, agarro mi cartera, las llaves y salgo del departamento.
Me detengo por un rato a escuchar lo que ocurre en el departamento de Angus, no escucho su música ruidosa, si no un instrumento, acordes de una guitarra, un momento...¿será que el toca la estará tocando la guitarra o será solo el sonido de la siguiente canción? No me quedo pensando mucho en eso la verdad, porque mi estómago está rugiendo por algo de comida, así que sigo mi camino hacía el ascensor.
Cuando estoy en la planta baja al salir del edificio me choco con una chica.
—Uy, perdón no te vi— dije disculpándome y al mismo tiempo maldiciéndome a mi misma por ser tan tonta.
