Luego de seis años en un internado, Kyle vuelve a South Park para enterarse de que todo a su alrededor había cambiado, incluso Eric Cartman; quien demostraba un comportamiento sospechoso para los ojos de aquel judío.
Aferrado al pasado y a las idea...
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Sheila había vuelto a casa muy tarde... demasiado. Tocaban alrededor de las cuatro de la madrugada cuando aparcó su auto en el garage y caminó hasta su cuarto sin hacer nada de ruido. Obviamente ni Kyle ni su hermano se percataron de ello puesto que se habían quedado dormidos, pero cuando ambos se levantaron para ir a la escuela, sus corazones volvieron a los respectivos lugares una vez que vieron las pertenencias de su tutora, cosas que se hallaban sobre la sala de estar.
El pelirrojo pudo ir a la escuela más calmado... pero aún así seguía con ese malhumor. No solo por su madre, sino que por el simple hecho de tener que ver la cara de Stan y Carman durante aproximadamente cinco horas.
Llegó a la escuela temprano, pero no tanto como para ser el primero en el aula. Había un grupo de chicos con los que no había hablado en su vida, en primera fila las amigas de Wendy y en un rincón se encontraba la parejita feliz, Token y Clyde.
El pelirrojo pasó a un lado del grupo de chicas y se sentó a cierta distancia de ellas, puesto que Stan y los demás normalmente tomaban su lugar al final de la clase para comer, dormir o hacer cualquier otra estupidez... y no se encontraba de humor como para escuchar los tontos comentarios de Kenny, las cursilerias que el hippie le dedicaba a su novia o aguantar el absurdo silencio que Cartman guardaba; la sola presencia de ese gordo le molestaba.
—Chicas, yo creo que lo estamos perdiendo —escuchó salir de una de las féminas; y él, como era todo un "curioso" levantó la mirada de sus apuntes para enterarse de quien se trataba —. ¡Él a penas contesta mis mensajes!
—Rebecca me dijo lo mismo —aportó Nicole —. Cartman se está aislando de nosotras, pero ¿Por qué?
—¿Alguna dijo algo que lo molestara? —dicho eso todas negaron con la cabeza.
—¿¡Y si se consiguió una novia!?
—¡¡Ni lo digas!! —protestó Bebe —. ¡Si Cartman tiene una novia me partiría el corazón en miles de pedazos!
—¿Qué hay, chicas? —Y al escuchar tales palabras salir de la boca de un joven que había entrado recientemente al aula, todas se abalanzaron hacia él, menos la rubia que anteriormente se encontraba nerviosa por las suposiciones de sus amigas, puesto que trataba de limpiar las pequeñas lágrimas que se habían formado... pero simplemente no podía —. Bebe ¿Qué te ocurre?
