—No te muevas—ordena el entrenador, pero Scott ya estaba parado y en el momento en el que se enderezó su hueso sonó volviendo a su lugar original.

—No pasa nada. Estoy bien—soltó una pequeña risa

Alicia mira a Allison un tanto nerviosa y luego dirigió su mirada al resto de las personas que estaban en el lugar.

—Podría jurar haber escuchado su hueso literalmente rompiéndose desde donde estaba—dijo Mellisa, mirando con preocupación a su hijo

—¿Lo escuchaste?—inquiere el entrenador—. Yo lo sentí.

—Lo digo enserio, chicos. Estoy bien—vuelve asegurar el adolescente.

Desde el rabillo de su ojo Alicia pudo ver a Gerard dando miradas extrañas, Allison se dió cuenta entonces, volvió a caminar hacia su abuelo.

—Deberíamos irnos—murmura hacia su abuelo.

—Espera—dijo Gerard—. Quiero preguntarles algunas cosas—terminó de hablar mirando a Alicia y Scott.

─ 𖥸 ─

—No irás—niega Hayley rotundamente

—Por favor, mamá—suplica—. Si algo le pasa a Scott yo puedo protegerlo.

Gerard Argent los había invitado a cenar a Alicia y a Scott, obviamente, la alfa de la manada lobo creciente se negó a dejar ir a su hija a una cena en la casa de unos letales cazadores. Elijah Mikaelson estuvo de acuerdo, sin embargo, estaba tranquilo. Sabía perfectamente que los Argent no se atreverían a tocar a su sobrina si saben lo que les conviene.

Scott se encontraba esperando a su amiga en la puerta del auto, viendo como la castaña hablaba con madre. Gerard miraba con curiosidad al hombre de traje que se encontraba dándoles la espalda, no lo había visto en el pueblo cuando llegó. Scott se enderezó en su lugar cuando vió que Alicia caminaba hacia ellos luego de una pequeña charla con Hayley.

—¿Nos vamos?—su voz era de falsa tranquilidad.

El anciano asiente con la cabeza y les indica a ambas chicas a que se sentarán en la parte trasera del auto. Haciendo así que Scott, se sentará a su lado. Alicia estaba sentada en la parte derecha y Allison en el medio, disimuladamente la cazadora agarra la mano de la castaña y entrelaza sus dedos. Alicia podía notar los nervios en el aire. Tanto de Scott, como el de Allison.

Con su pulgar la Mikaelson acaricia la mano de la chica regalándole una diminuta sonrisa, Allison tenía ganas de recostar su cabeza en el hombro de Alicia, pero se contuvo.

—Todo saldrá bien—le susurra Alicia tan silencioso como pudo para que solo escuchara Allison, y probablemente Scott también.

Allison le sonrió un poco haciendo notar sus hoyuelos. Alicia podía sentir los ojos de Gerard mirarlas por el espejo retrovisor. El trayecto era silencioso y un tanto tenso, en un momento el mayor tosió llamando la atención de los adolescentes. Alicia levanta la vista notando de que ya habían llegado, rápidamente cuando los dos hombres bajaron la castaña apretó la mano de su amiga, reconfortándola.

Salieron del coche ambas chicas y entraron a la casa.

—Han vuelto. La cena está casi lista—escuchó la voz de Victoria

𝐓𝐑𝐈𝐇𝐘𝐁𝐑𝐈𝐃 | 𝐓𝐞𝐞𝐧 𝐖𝐨𝐥𝐟Donde viven las historias. Descúbrelo ahora