Soulmates [BL story]

༄𝐕𝐀𝐂𝐀𝐂𝐈𝐎𝐍𝐄𝐒

El resto del curso fue bastante normal, exámenes, quedadas, resacas y muchas llamadas a mi madre para decirle que no dormiría en casa, aunque tampoco eran demasiadas, solía dormir fuera una vez a la semana. Los exámenes finales a mí se me dieron muy bien, a Ryn ni le hizo falta estudiar y Nim simplemente se esforzó tanto como pudo, en cuanto a Khaos... Se puede decir que lo intentó. Tuvimos que ayudarle a volver a estudiar para que pudiese recuperar el temario que suspendió, con suerte no tardamos mucho y cuando llegó el día de su examen le acompañamos a clase y le esperamos por la tarde para darle la enhorabuena como padres orgullosos.

Khaos consiguió aprobar todo y lo celebramos yendo al cine a ver una película de acción, no era mi género favorito pero tampoco me disgustaba. La fiesta la terminamos en casa de Ryn, aunque sus padres estaban allí no nos dijeron nada sobre ruido o normas. Ryn nos llevó a la cocina para que cocinasemos algo para la cena, nos decidimos por unas hamburguesas, aunque no preparamos las nuestras; Ryn preparó la cena de Nim, Nim la de Ryn, Khaos preparó mi cena y yo preparé la suya. Volvimos al cuarto de Ryn y salimos al balcón a cenar, la casa de Ryn era realmente grande, no era un piso como mi casa o un duplex como la de Khaos, era más bien un chalet de los grandes en un buen barrio, cualquiera diría que ese desastre de persona vendría de una familia adinerada y de buena reputación.

Ryn y Khaos recogieron su cabello en una coleta alta para no mancharlo al comer y todos cenamos en silencio, nos concentramos en la comida y las bebidas que Ryn trajo de incógnito desde la habitación de sus padres, eran básicamente un par de botellas de vino y una de champán. Al terminar llevamos los platos y vasos sucios a la cocina antes de volver a la habitación, me tumbé sobre la cama y suspiré en señal de que había comido mucho.

-¿Te gustó la cena? -Preguntó Khaos con un tono burlón mientras se sentaba a mi lado y pinchaba con su dedo mi tripa.

-Sí, cocinas bien. Y como sigas haciendo eso lo más probable es que vomite -. Dije sin mirarle, tenía mis ojos cerrados para relajarme un poco.

-No vomites en mi cama, mis padres me matarían -. Dijo Ryn levantándose del suelo y apartando la mano de Khaos de mí para asegurarse de que no me pasaría nada, o más bien de que a su cama no le pasaría nada.

-No voy a vomitar, era solo una forma de hablar -. Dije mirando a Ryn y abrazando una de sus almohadas y dándome la vuelta mirando hacia la pared.

Nim apartó a Ryn de mí y dejó que Khaos hablase conmigo para que no me durmiese justo cuando íbamos a jugar a un par de videojuegos. Al final terminé por no dormir y estando bastante enérgico, jugamos varias rondas al Call of Duty Black Ops IIII, algunas fueron partidas contra zombis y otras partidas entre nosotros diviéndonos en dos equipos. Después de eso jugamos al Mortal Kombat y por último y para calmarnos un poco jugamos un Gran Prix de Mario Kart.

Para dormir Ryn trajo un par de colchones y los puso en suelo dejando sobre ellos un par de mantas y algunos cojines. Ryn y Khaos durmieron en el suelo y yo dormí en la cama con Nim ya que pensamos que sería lo mejor para todos, especialmente para Nim, quien nos narró un cuento antes de ir a dormir, aunque yo me dormí a la mitad de la historia así que nunca sabré cómo termina.

Durante la noche Nim y yo no estuvimos muy alejados, de hecho hubo un momento en el que hasta nos abrazamos para dormir debido al frío. Aunque tuve que ir a dormir con Khaos después de que Ryn me chantajease sobre las cuatro de la mañana diciendo que me daría diez euros si le dejaba dormir con Nim.

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Un par de semanas más tarde mi madre me avisó de que tenía que hacer mis maletas junto con las de mi hermano porque nos había apuntado a un campamento de verano en un pueblo rodeado de montañas. Se lo comenté a Khaos que convenció a sus padres de apuntarle también y fuimos juntos. Kris y yo íbamos un asiento delante de Khaos en el autobús, había poca gente así que podía sentarse solo, de vez en cuando se levantaba del asiento para asomarse a hablar con nosotros y gastarme alguna broma estúpida que hiciese a Kris reír.