DEJÉ DE SER NOBLE Y ME CONVERTÍ EN PLEBEYO

43: El abrazo de las hadas

A decir verdad, hice rosquillas fritas para Emery-san mientras Bobles-san y los demás cocinaban la cena.

No tuve tiempo de ir a comprar un regalo para ella y no vendieron dulces asequibles por aquí.

Para los plebeyos, los postres eran un bien de lujo que disfrutaban comiendo de vez en cuando. Las rosquillas fritas cubiertas de azúcar seguramente harían feliz a Emery-san.

El único postre que consiguieron los guardias fueron las frutas.

Aún así, los huevos, el azúcar, la harina y la leche se utilizaban en la cocina. Incluso había un polvo que se podía utilizar como bicarbonato de sodio.

Yo, que comía postres todos los días como noble, hacía rosquillas fritas con el conocimiento que había adquirido cuando ayudaba en la cocina. Los ingredientes se pagaron con mi salario.

Bobles-san no pudo soportarlo más cuando vio mi tímida figura freír los donuts, así que me ayudó.

Después de limpiar en el comedor, compartí algunas rosquillas con el personal de la cocina y me llevé el resto cuando fui a visitar Emery-san.

De todos modos, la apariencia de los donuts era normal, pero era delicioso si lo digo yo mismo. También se puede degustar el sabor. Seré feliz si todo el mundo lo disfruta.

La luz de la luna que iluminaba mi camino aligeraba mi estado de ánimo. Tenía los donuts en la mano. Un olor dulce me hacía cosquillas en la nariz.

No tengo nada que ver con Dick-san. No pasó nada con él, así que estoy a salvo.

◊♦◊♦◊♦◊

"Ayesha, bienvenido".

Emery-san me abrazó justo después de verme.

Ella me abrazó fuertemente, que era algo que no hubiera esperado de su apariencia.

... Es doloroso... Emery-san.

"..."

Mi voz no salía porque me sorprendía y me apretaba fuertemente... Miré el contenedor que tenía en mi lugar.

Emery-san tomó el contenedor y me dejó ir.

Miró dentro y dijo feliz: "Woah". Sí, me alegro de haber hecho donuts.

"Los niños ya están durmiendo, así que les daré estos donuts como golosinas para mañana".

Sostenía los donuts como si fueran muy importantes y los ponía en el estante.