hungría; race

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| il privilegiato

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| il privilegiato

Uf. 

En esas dos letras se resumía lo que había sido ese domingo.

Un gran "uf". 

Aunque para Leclerc también podía ser un "la concha de tu madre Stroll me arruinaste la carrera pedazo de gil". 

En ese final de domingo, en el medio de la tranquilidad de una cafetería vacía y un bello atardecer provisto por la ventana a su derecha, Isabella intentaba bajar el dolor de cabeza masajeándose la sien al ritmo de Willow de Taylor Swift, como si eso pudiese hacer mas efecto que los dos analgésicos que se había tomado con el café.  

Había sido un día largo y nada había salido de la mejor manera. 

Solo había un persona que a esa hora del día estaba dispuesto a irrumpir, todavía consumido por la ira de una carrera desperdiciada.

Y el grito que sonó por fuera de sus auriculares le hizo dar cuenta que había llegado.

-¡Isabella! ¡las redes están descontroladas, me siguen diciendo racista! ¿podés publicar algo? ¡no sé, una placa, un texto, algo!

Ok, la situación era un toque complicada, Isabella le daba la derecha en eso. Con los incidentes de Silverstone todavía latentes, ciertas profundidades de las redes habían sacado a relucir algunos dichos anteriores no tan favorables del piloto, que causaban una efervescente reacción por parte de usuarios y algunos medios de menor importancia.

Leclerc había ignorado las sugerencias del equipo de prensa y se había dedicado a pasar los días quejándose con Isabella. Y ahora que tenía una razón mas grande para estar enojado, el monegasco simplemente tenía energía para quemar. 

La muchacha, cuyo dolor de cabeza de inmediato comenzó a aumentar, intentó poner todo su espíritu zen para responder. 

-Charles ¿vos entendés porque te dicen racista, no?

-¡Porque les gusta decir mentiras! ¡Odio el racismo, como voy a ser racista si-

-¿...si tenes amigos negros?- lo interrumpió ella, en un tono mucho mas bajo y algo condescendiente -Creo que eso suena aún más racista.

Leclerc, ahora sentado frente a ella, la miró confundido. Isabella suspiró.

-No es mi intención darte un seminario universitario, pero capaz que estaría bueno que antes de salir a gritar que no sos racista y que todos están equivocados menos vos, leas un poco y te informes- ante el silencio, Isabella continuó- Ser racista no es pegarle a un tipo de color, eso es la superficie, lo que se ve, pero hay demasiadas cosas atrás: microracismos, años de discriminación, violencia, invisibilización, silencio, injusticia, desigualdad económica, cosas que vos nunca entenderías porque sos blanco, rubio y europeo.

-¿Ser lo que soy me hace racista, entonces?- continuó con su postura defensiva.

Isabella volvió a suspirar, pero por alguna razón mantuvo un tono didáctico. Contrario a otros debates que había tenido -que generalmente terminaban con un "ves que sos un facho de mierda y no entendes nada, imbecil", había algo de él que la instaba a querer hablar. 

-Quizás no racista, pero sí privilegiado. Hay todo un mundo que no conoces, Charles. Los lugares, los circuitos en donde te moves, son muy cerrados. La única manera que vos lo podes palpar es escuchando y empatizando. Pero si no empatizas, no logras que esto te interpele, lo mejor que podes hacer es llamarte al silencio- Charles miraba un punto fijo de algún lugar de la sala. Pensaba- Yo no voy a publicarte ninguna reflexión de cartón- sentenció.

-Yo...solo dije que no nos pueden meter a todos en la misma bolsa. Que no me parece que...

-No sé, Charles, pero si no vas a opinar algo que haga la diferencia, mejor no opinar nada. Para tibios ya están los demás.

Isabella se llevó el ultimo sorbo de café a la boca y volvió hacia su celular.

Por el rabillo del ojo lo veía al monegasco quieto en su lugar, con la manos cruzadas, sin poder descifrar si estaba reflexionando o estaba pensando la mejor manera de mandarla a la mierda. De ambas maneras, se vio en la obligación de decir algo más.

-Date tiempo de pensarlo, lee un poco los diarios, los testimonios, hasta hay videos en YouTube para mirar y quizás desde ahí podemos pensar alguna iniciativa mejor. 

Sin salir de su estado de concentración, Charles asintió. No dijo nada más, al parecer algo de lo hablado le había quedado dando vueltas en la cabeza. Se levantó y acomodó la silla de vuelta en su lugar. 

Hizo un ademán para agregar un comentario más, aunque cuando Isabella levantó la cabeza y cruzaron miradas decidió guardárselo. 

-Leer más...ok...-susurró para sí mismo asintiendo con la cabeza antes de retirarse. 

¿Ya podía dar ese domingo por finalizado?

-

bueno, tuve muchas dudas de publicar este cap pero decidí hacerlo porque lo tengo escrito hace mil 

se que quizás les parece algo polémico o fuera de tema pero la cuestión es que en la formula 1 la diversidad es INEXISTENTE y por mas que amemos a los pilotos con nuestra vida y nos querramos casar con ellos y llevarlos a pasear, como consumidores hay que poder marcar cuando algo es insuficiente o no nos parece bien. 

obviamente todo lo que pasa aca es ficción y no representa algo de la realidad pues no conozco a charles ni voy a llegar a conocerlo, peeeero bueno, hay ciertas cositas de su realidad que me parecen cuestionables

y de todas maneras me pareció copado que él este dispuesto a escuchar a alguien hablar del tema y que esa persona sea isabella (?)

bueno nada, espero que les guste y pueden expresar su opinión pues por suerte hay libertad de expresión, gracias♥

pd: ya tengo adelantados una seguidilla de capítulos #picantes, se viene EL drama, nada, la tiro...hagan sus apuestas

red || charles leclercDonde viven las historias. Descúbrelo ahora