"Los siete años que pases aquí como residente de cirugía serán los mejores y los peores de tu vida."
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Eleanora Amedeo es la pasante de primer año más joven en adornar los pasillos del Seattle Grace. Demasiad...
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S8 EP01
"¡Buenos días!" llamó April, la cafetería estaba ocupada con cirujanos y residentes charlando. El nuevo año de residencia había comenzado, y April se empeñaba en que todos desayunaran para hablar de sus especialidades. "Y, uh, ¡bienvenidos a su último año de residencia!"
Casi todos la ignoraron, y Eleanora le envió una sonrisa triste antes de volver a preparar su sándwich de desayuno. Sintió que Mark golpeaba sus caderas y ella levantó la vista, con la ceja levantada.
"¿Sí?"
"¿Planeas preguntarme por los altos de la Cirugía Plástica?" Se burló, Eleanora negó con la cabeza riendo.
"Me hablas de los altos de la Cirugía Plástica casi todas las noches, y de alguna manera todavía me estoy especializando en Neuro. Tal vez quieras trabajar en tus habilidades de campaña."
Mark hizo una mueca de dolor y se llevó una mano al pecho en tono de broma. "Me hiere, Dra. Sloan."
"Y usted lo hace demasiado fácil, Dr. Sloan." Contestó ella, dándole un rápido beso en su mejilla antes de agarrar más huevos para su plato.
Mark comienza a hacer el suyo también, y cuando alcanza una cuarta rebanada de tocino, Eleanora le golpea la mano. Sus cejas se levantan y vuelve sus ojos heridos hacia ella.
"No necesitas cuatro rebanadas de tocino, Mark." Le dijo ella, levantando una ceja. Él refunfuñó algo, y antes de que Eleanora pudiera pedirle que lo repitiera, Jackson se interpuso entre ellos.
"Buenos días, Ella." Saludó a su amiga antes de dirigirse al Cirujano Plástico. "Dr. Sloan, esperaba hablar con usted sobre una tutoría."
"Y con eso," Afirmó Eleanora, agarrando su plato y dirigiéndose a la salida, "haré mi salida y me comeré mi sándwich de desayuno y mis huevos en paz. Jackson, asegúrate de que no se robe más tocino. Me gustaría que mis hijos tuvieran un padre que no esté plagado de enfermedades del corazón."
Eleanora sonrió cuando Mark soltó un pequeño grito de protesta, pero siguió adelante. Al acercarse a una mesa, se fijó en Meredith. Ambas mujeres se congelaron, mirándose fijamente por un momento.
Había pasado una semana desde su pelea, y aunque Eleanora no se arrepentía de lo que había dicho y Meredith aún no había dicho que se arrepentía de sus acciones, era evidente que ambas se echaban de menos.
Cristina las había mantenido al tanto de la otra, y Eleanora sabía algo por Derek. Eleanora respiró profundamente antes de acercarse a la alta mujer rubia, enviándole una pequeña sonrisa.
"Buenos días, Meredith."
"Buenos días, Eleanora." Meredith le envió una propia sonrisa, picoteando la magdalena que tenía en sus manos. Eleanora respiró entrecortadamente, el nerviosismo la llenaba.
