Existen siete reinos en las tierras de Bangtan, una princesa, ella tendrá que contraer matrimonio con uno de los príncipes para heredar el trono. ¿A quién escogerá?
Un caballo blanco y uno negro, los pelajes que creaban contraste con la hierba verde que cubría el campo ecuestre del palacio real. A su alrededor se habían colocado varias tribunas de metal y varios espectadores se hallaban sentados en sus filas.
Taehyung arriba de Magnus y Seokjin en Eustavias.
— ¡Pueden hacerlo! —tú les gritaste sin importar que varias personas te miraran de forma reprobatoria y juzgadora por ser una princesa.
Corrían por el campo ecuestre con velocidad, mientras que los jinetes les daban órdenes antes de que saltaran los determinados obstáculos que se mostraban a lo largo del circuito.
En un momento preciso, el príncipe Seokjin se vio alterado al mismo tiempo que Eustavias se detenía a medio camino, el caballo blanco de pie frente a un muro de increíble altura. El muro tenía por lo menos nueve pies de alto.
Eustavias se dio la vuelta una vez que el príncipe le dio la orden de hacerlo, y el coordinador del concurso le habló para decirle algo. Seokjin hablaba con Taehyung, y los dos tenían expresiones ilegibles. Sin embargo, los otros competidores también se detuvieron ante ese muro cuando fue su turno de completar el circuito, al parecer ninguno de los caballos quería enfrentarse ante tal desafío.
Pero entonces Taehyung empezó nuevamente con su recorrido.
Y tú abriste los ojos con fuerza a la vez que te levantabas de tu asiento para verlo con mayor claridad.
Los mechones cafés del cabello de Taehyung le salían por el casco negro y se movían con el viento producido por su rápido trote. Magnus saltó obstáculo tras obstáculo, barra tras barra, y se aproximaba al dichoso muro sin temor en la mirada, la primera vez no había llegado hasta aquel punto, ya que le pertenecía al príncipe Seokjin la última mitad del recorrido. Pero ahora Taehyung había recorrido casi todo el circuito por sí solo.
Y Magnus se elevó por los aires como un Pegaso, uno de esos caballos alados que aparecían en los dibujos de los relatos antiguos, y pareció volar como si fuera uno de esos sorprendentes animales fantásticos.
Magnus voló con su inmaculado salto y cayó al otro lado del muro con una destreza sorprendente en las musculosas patas, y siguió corriendo como si no hubiera hecho un grandioso esfuerzo, porque la verdad parecía que no había sido un esfuerzo para el caballo. Magnus no se veía adolorido ni nada relacionado, y relinchó con alegría cuando Taehyung sonrió al llegar a la línea final del circuito, cubierta por cuadrados negros y blancos de mármol sobre la hierba verde.
Exclamaciones de victoria.
— ¡EL PRÍNCIPE SEOKJIN KIM Y EL JINETE ENCANTADOR TAEHYUNG KIM DEL REINO DEL AMOR SON LOS GANADORES!
Los otros competidores se vieron decepcionados tras el anuncio del hombre con el megáfono de metal platinado en mano, pero al igual que todos los espectadores, no podían ocultar el asombro que se les reflejaba a lo largo de todo el rostro.
— ¡Estuvieron majestuosos!
Llegaste emocionada a lado del príncipe Seokjin y Taehyung tras haberte abierto paso entre la gente, los que te miraron con una sonrisa una vez que hubieron bajado de sus caballos, una medalla de oro colgaba en el cuello de cada uno.
—Gracias, princesa —te dijeron los dos chicos al unísono sorprendiéndose a sí mismos.
Seokjin se vio apenado.
—Aunque, en realidad, fue Taehyung quién hizo la mayor parte del trabajo —se expresó con una sonrisa al apretar con sus manos extendidas los hombros del mencionado—. Ese salto fue mejor que todo lo que he visto desde que nací, sin excluir lo que hizo el día de ayer al salvar a ese niño.
Taehyung se rio.
—Muchas gracias —dijo el chico con la sonrisa rectangular—. Pero en todo caso, es a Magnus a quien debemos darle todo el mérito...
Taehyung dejó de hablar al verte correr hacia delante, y extendió ambos brazos creyendo que te dirigías hacia él.
— ¡Te amo, Magnus!
Pero en lugar de eso, le diste un abrazo en el lomo al caballo que dejó salir un soplido como si estuviera avergonzado, y acto seguido le diste un beso en la oreja que tenía la marca de pino. El olor del animal era agradable y te recordó a un montón de paja, la piel suave y negra, restregaste tu mejilla contra el pelo de su crin.
—Creo que ese caballo tiene más suerte que nosotros... —masculló el príncipe y Taehyung solamente dejó salir una carcajada—. ¡Pero bueno, vayamos ahora a la fiesta!
El príncipe Seokjin se veía animado y tanto Taehyung como tú lo miraron expectantes.
— ¿La fiesta? —Taehyung le preguntó.
—Sí, la fiesta que se hace después del concurso para todos, ya sea que hayan ganado o no. Es parte de la tradición —anunció al tomarte a ti y a Taehyung del brazo por igual.
— ¿Espera que lo acompañemos? Pero, ¿dónde será? —lo preguntaste al mirar de reojo al príncipe y a Taehyung que tenía la cara impresionada.
Magnus se comía una flor azul en el fondo.
—Será en mi sótano. ¡Prepárense!
Espero que te haya gustado la lectura♡.
Si lo deseas puedes seguirme en instagram @alexibalu para encontrar poemas y pensamientos escritos por mí.
Instagram de mis minicomics, memes y frases lectoras: @oasisdelibros
Gracias por tu apoyo,
Alex.
Siguiente capítulo el próximo lunes.
Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.
