PELIGROSA OBSESIÓN ✤ soojun/ʸᵉᵒⁿᵇⁱⁿ

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—Es que eso no tiene sentido. No puedo estar enamorado de él, porque simplemente es algo que no quiero sentir y que... no conozco y que...

—Ya deja de querer ponerle patas y pelos... estás enamorado y punto —me interrumpió HueningKai.

—Sí, sino no harías todas las cosas que haces —Agregó Taehyun.

—¿Qué hiciste ayer en su cita? —preguntó HueningKai.

—Bueno yo... llegué y me senté con ellos a cenar. Toque a Yeonjun por debajo de la mesa... aunque vale decir que él comenzó —me defendí.

—¿Lo tocaste? eres un cerdo —me acusó Taehyun.

—Él comenzó —me quejé.

—Pero ¿Por qué? —preguntó HueningKai.

—Porque me pidió que me fuera y no me fui y le dije que hoy iríamos los tres al partido de los Lakers le gustara o no, y entonces él me dijo que si quería jugar que jugara, pero que él también iba a hacerlo —les conté.

—¡Un momento! ¿Acabas de decir partido de los Lakers? —dijo HueningKai.

—¿Llevaras a Yeonjun y a Johnny al partido? —dijo sin poder creerlo Taehyun.

—¡Bueno! No podía dejar que salieran hoy y perderme el partido por estar detrás de ellos. Algo tenía que hacer... y no se me ocurrió mejor cosa que invitarlos al partido —me defendí.

—No puedo creerlo, ¿Qué te pasó amigo? De verdad esto ya me preocupa —dijo HueningKai.

—Quiero llorar, quiero... quiero a tu primo Soobin —habló Taehyun.

—¿Acaso tú también vas a querer un psicólogo? —le preguntó HueningKai.

—¿Podríamos ir por orden y concentrarnos en mi problema? Después vamos a todos los problemas de ustedes —les dije.

—Tu problema es simple y sencillo... tienes que ir agarrar a Yeonjun y decirle: Yeonjun yo no sé en qué momento pasó, ni cómo. Pero te amo, y no puedo dejar de pensar en ti... me he vuelto un completo idiota... un poco más de lo que ya era. Y ahora todo mi mundo depende de ti... de tu mirada, de tu sonrisa. Solo quiero estar contigo y que seamos felices. Por favor, se mío para siempre —habló cursimente. HueningKai y yo estallamos en risas. ¡Oh dios, eso no podía ser cierto!

—¿Eso es lo que estás pensando decirle a mi primo? Te lo digo amigo, se te va a reír en la cara. Eres demasiado cursi...

—Que bajo concepto tienes de Beomgyu, es lindo, eso derrite a cualquiera quieran o no. Pueden comprobarlo ¿Cuántas veces usaron a Neruda o a sus equivalentes para conquistar? —nos preguntó.

—Tienes razón —dijo HueningKai.

—La única diferencia es que esta vez cuando se lo diga, si es que me animo a decirle le hablaré desde el corazón —dijo totalmente cursi. Fruncí el ceño.

—Hermano... me emocionas. Eso se llama tener los pantalones bien puestos y amor por otra persona además de ti —lo felicitó HueningKai.

—Lo sé, la diferencia entre Soobin y yo es que yo sé cuándo ser humilde —se defendió.

—Ustedes dos no me están ayudando... solo me están hundiendo —les reproché.

—No es eso Soobin, sino que intentamos hacer que entiendas que no todo en la vida es sexo y atracción física... está permitido que sientas amor por la persona con la que te acuestas —me aclaró HueningKai.