Alguna vez, al verlas ¿no has sentido una sensación extraña? Siempre ganan, pero... ¿nunca has deseado que pierdan? ¿que sufran? ¿que se acabe tanta... felicidad? Yo... si te soy honesto... sí, lo deseo.
Cuando, ella, regresó de la luna, yo estaba...
al notar que la niña ya estaba dormida, se levantaría lentamente, procurando no despertarla la niña al notar la falta de calor se aferraría mas a su peluche de rainbow dash, la peliarcoiris, cubriría lentamente a la pequeña, y por ultimo le depositaria un dulce beso en la frente, que haría sonreír, a la pegaso naranja
- buenas noches hermanita- dijo la pegaso celeste. su voz se perdería entre las gotas de lluvia que aun golpeaban la ventana, con fuerza
abriría la puerta de la habitación con lentitud procurando hacer el menor ruido posible. - te quiero, rainbow dash- diría la pequeña voz
-y yo te amo- saldría de la habitación
al bajar las escaleras, se encontraría con las dos señoras, bebiendo té
-ya te vas?- preguntaría la señora lofty, al ver que dash se dirigía a la puerta
-así es señora- diría abriendo la puerta, dejando entrar el viento frió y la brisa húmeda
-pero, no puedes salir con este clima- la señora holiday se levantaría de la esa- si gustas, puedes quedarte a dormir en el sofá- señalaría el sofá, que se veía bastante cómodo
-muy amables las dos, pero tengo que irme. mañana tengo entrenamiento con los wonderbolts, y no quiero llegar tarde- daría un paso a la calle
-cuídate, querida- se despedirían las dos, a la vez
-hoy tomaras tus pastillas para dormir?- le preguntaría la señora holiday a su pareja
-ya las vertí en le té- respondería, sonriendo
afuera, el agua fría la bañaba por completo, era como estar bajo una regadera, muy fría. procurando no mojarse mas empezaría a correr, pero al recordar lo que le dijo scootaloo voltearía al tejado, que efectivamente estaba vació.
pero esa fue una conclusión demasiado alejada de la realidad pues la noche al ser lluviosa y oscura, seria perfecta, para que una hembra de aegypius monachus, se escondiera en las sombras, sin ser detectada. al ver como la pegaso celeste se alejaba se acercaría a la ventana de la niña, para confirmar que seguía durmiendo, y efectivamente, la niña dormía tan placenteramente, como para notar que un pegaso encapuchado, entraría a la casa
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unas pocas horas después, ni un alma se encontraba despierta pero la niña se despertaría de golpe, al escuchar un gran estruendo que se provenía de el primer piso, una gran figura negra pasaría volando en frente de la ventana, parecida a un buitre. unos segundos después se encontraba paralizada al escuchar como unos cascos caminaban por el primer piso, pero estos sonidos de cascos eran desiguales, pues dos cascos se escuchaban como si tuvieran unas botas gruesas, y los otros dos sonaban metálicos. la niña no sabría que hacer, y solo se encontraba desesperada por encontrar una salida.
de repente se comenzaría a escuchar como empezaba a subir las escaleras- tía holiday?, tía lofty?- peguntaría rezando por que no fuera mas que una broma de mal gusto de parte de sus tías, pero ellas nunca le harían algo así. los cascos caminarían por el pasillo hasta detenerse en frente de la puerta, de la niña- celestia, por favor protegerme- rezaría con lagrimas en los ojos. la perilla de la puerta giraría lentamente hasta poder abrir la puerta, la puerta se abriría rechinando, pero solo se abriría un cuarto de esta.
-comenzamos?- una voz metálica entraría por la puerta
la niña al escuchar esto soltaría un grito de desesperación. la ventana se abriría de golpe dejando entrar la lluvia, en este momento de distracción una luz blanca segadora entraría por la puerta, a toda velocidad abriéndola por completo en el proceso. la pequeña pegaso se escondería bajo cama donde apenas cabía.
la luz se detendría, pero el agua seguiría entrando por la ventana, la niña no se daría cuenta que se había orinado de el miedo, pero eso no importaba ya, solo quería salir de esa situación- tía lofty!!- le gritaría a una se sus tías sin recibir respuesta alguna.
después de unos pocos minutos al no escuchar nada mas que la lluvia que entraba por la ventana. la pegaso naranja, retendría el valor suficiente para salir de su escondite. lentamente se asomaría, y al no ver nada saldría por completo- tranquila scoot- se diría a si misma viendo con inseguridad a todos lados- estas dormida- se diría a si misma, dirigiéndose a la puerta- te dormiste- se calmaría un poco- ... y estas soñando con un, imponente, hijo de perra , con voz demoníaca.
estaría a punto se salir por la puerta, cuando detrás de ella se escucharía una voz metálica- oh... si...un sueño- la niña rápidamente voltearía a ver, encontrándose con un pegaso, cubierto por ropa gris y roja, al estar oscuro y encapuchado, lo único que se vería de su cara serian dos puntos blancos, brillantes, donde deberían estar sus ojos- los sueños son sitios muy divertidos ¿o no?- le preguntaría el pegaso a la niña, a la cual le costaba incluso respirar por el miedo. sentía la necesidad de gritar pero estaba petrificada- todo esta en tu mente, ¿así que, por que no disfrutarlo?- después de decir esto se abalanzaría sobre la pequeña pegaso. los cascos metálicos estaban sobre la garganta de la niña, que quería gritar por auxilio pero fue inútil-shhh- dijo el pegaso gris al ver el intento fallido de scootaloo por gritar.
esto fue todo lo que escucho la pequeña indefensa, antes de que todo se volviera negro
