¡El Lobo Del Rencor! "Gowther X Tu"

"TRECE"

"En el pueblo"

En cuanto llegamos, junto a los pecados saltamos hacia el templo del cielo, y por lo visto no vinimos Hasta aquí sólo a turistear.

De un movimiento rápido en mi mano apareció mi tesoro sagrado, al caer de un movimiento rápido acabe con varios demonios rojos y grises, esto seria sólo un juego de niños.

Caminaba tranquila por el lugar, ninguno de los demonios aquí era rival para mí, los acababa en cuestión de segundos.

Guarde mi tesoro sagrado y me dispuse a dispararles con mi ballesta.

Llegue hasta a un pequeño monté en el que se encontraban los chicos que habían terminado con uno de esos caballeros negros,  aunque ese tipo no era negro, pero da igual.

Los ignore y continúe caminando por el lugar aniquilando a demonios.  

A lo lejos divisé a el capitán peleando con el líder de esos caballeros, quien apuñaló a un anciano. Di un salto y aterrice dónde el capitán.

- ¡Capitán!

Gritamos todos al unísono, me acerqué al capitán quien estaba inconsciente.

Gire sobre mi propio eje y de la roca en forma de huevo comenzó a emerger una criatura.

De un salto aterrice cerca aquella criatura, saque la venda que cubría mi ojo liberando así mi lado demoníaco, a mi cuerpo le fue cubriendo la oscuridad, y sentí como deje de tener el control de mí, pero tenía una meta clara en mi mente "Voy aniquilar aquella criatura cueste lo que cueste"...

Pov Narrador

En resumen, gracias a la ayuda de la castaña pudieron vencer a aquel ser.

Pero el utilizar su lado demoníaco tuvo su precio, precio el cual fue pagado al instante, aquel precio se basaba en la pérdida de humanidad, transformándola poco a poco en un ser sin sentimientos, egoísta y a alguien a quien no le importaría mancharse las manos paro conseguir su objetivo.

Ella se convertiría en lo que su verdadero pecado dicta. Egoísmo.

Aquello fue explicado y comprendido por todos los presentes.

Gowther sabía a la perfección que de aquello se arrepentiría, pero no tenía opción, y si el quería salvar a su amada tendría que hacerlo.

El se acercó a la joven y apoyo su mano en la frente de ésta.

Y todo recuerdo de los pecados o los mandamientos fue convertido, y sólo para ella se trataría de un simple sueño, y tal ves ni siquiera se acordaría de este.

El muñeco dejo a la joven cerca del molino donde vivía su abuela, y a la mujer le hizo lo mismo que a su nieta, solo que ella no tendría recuerdo alguno de aquello.

La dejo allí dispuesto a irse, pero había algo dentro de sí que no lo permitía. No podía irse así sin mas.

Gowther se acercó a la joven que se encontraba dormida bajo un roble, el se agachó hasta quedar a atan sólo centímetros de su rostro, aquélla ves sería la última vez que podria admirar el rostro de ella. Y sin dudarlo le besó, aquel beso no era uno normal, aquel beso demostraba todo el amor y dolor que sentía el muñeco.

Fue separándose de ella y la miro con lágrimas en sus ojos, le dolía, le dolía dejar a su amada por el propio bien de ella, y aunque él no quería, tenía que dejarla allí...