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KyungSoo estaba muy orgulloso por como había quedado adornada aquel salón donde seria la velada. SeHun lo había halagado entre besos y susurros lo excelente que habia quedado, juro darle un hermoso regalo por su esfuerzo, tanto a él como a SungYeol y a Joy. Alabo su excelente gusto y creyó que mas de uno estaría envidioso por tener a alguien como él. Ya que no solo era hermoso, si no también tenía otras cualidades.

KyungSoo se dejaba abrazar y alabar por SeHun mientras lo abrazaba por la espalda entrelazando sus manos en su vientre mientras le repartía besos en su nuca y cuello. Le encantaba aquel lado de SeHun. El estrés y trabajo nunca le permitían hacer aquel tipo de cosas pero cuando se permitía aquello, KyungSoo disfrutaba de esa faceta de su amante. Porque nadie creería que Oh SeHun se pusiera a hacer pucheros mientras decía palabras dulces.

-Te quiero tan hermoso y deslumbrante hoy - le susurro SeHun mientras le acariciaba el vientre y estomago.

-¡Quiero que me tengan mas envidia de la que ya me tiene al verte! ¡Quiero que sepan que solo eres mío!

KyungSoo volteo para mirarlo a los ojos y le sonrió cálidamente mientras alzaba una mano y con esta le acariciaba una mejilla.

-¿Pero que te pasa? ¿Por qué estás tan meloso? ¿Dónde está mi SeHun? - bromeo KyungSoo.

-No arruines el momento y has lo que te digo - ordenó mientras le daba una palmada en el culo.

-Apurare que la gente llegará en unas dos horas.

-¿Para quien es esta fiesta? - KyungSoo no pudo mas y le pregunto. Se moría de ganas por saber a que se debía dicha velada.

-Es por dos razones muy importantes.

-¿Dos razones? - preguntó KyungSoo con los ojos perplejos por la duda.

-Deja de ser metiche y anda a arreglarte. Te quiero despampanante - SeHun lo arrastro hacia el baño.

-¿Dime de que se trata? - KyungSoo puso su mejor cara para poder sacarle algo.

-Hoy cerrare el negocio de mi vida y por ello daremos un gran paso. Haré lo que eh querido hacer desde hace mucho - dijo SeHun mientras pasaba un mechón de cabello de KyungSoo atrás de su oreja.

-¿Daremos? - KyungSoo seguía sin entender nada.

-Deja de ser tan preguntón y anda a bañarte. Me daría un baño contigo mientras te follo en la bañera pero aun tengo algo que hacer.

KyungSoo no protesto mas, sabia que no le podría sacar mas a SeHun. Corrió a apurarse que en dos horas no podría apurarse, aún tenía que alistar a los niños ya que por una extraña razón SeHun los quería en la velada a diferencia de otras ocasiones. Cosa que se le hacia demasiado raro.

-

El traje que SeHun le había regalado para que usase en aquella ocasión había dejado con la boca abierta a KyungSoo. Mas cuando Minseok le había dicho que los adornos que tenía en la fina camisa de seda eran diamantes mismos. Llevaba puesto un traje blanco por completo, salvo los zapatos. La camisa como ya se había mencionado era de seda con adornos de diamantes en el cuello, no eran nada extravagantes puesto que eran pequeños pero notorios a la vista, demasiado para ser exactos. El saco del traje era precioso, las mangas tenían un fino encaje que eran agradables a la vista y le daba un toque de encanto. Ahora entendía porque SeHun no le había permitido verlo hasta ahora.

KyungSoo se miraba de arriba abajo sin poder creer que después de dos hijos su figura resaltará de esa hermosa manera y su piernas se vieran tan bien en aquel pantalón blanco que se entallaba a la perfección en ellas.

NicotinaWhere stories live. Discover now