CAPÍTULO 22 | TENTACIÓN |

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— idiota — rió.

— ¿entonces?

— me gusta tú mirada — confesó.

¿Mi mirada? ¿por qué?

— ¿por qué? — pregunté sonriendo.

— me hace sentir segura

— ¿ah si? — dije poniendo mis ojos turnios y luego reí.

Ella soltó una carcajada.

Nos quedamos mirando en silencio, puse mi mano derecha en su espalda baja y la acerque a mi.

— ¿sabes qué? — sonreí mirandola.

Ella levanto sus cejas.

— yo si extraño tus besos — puse mi mano izquierda en su menton acercandolo al mio.

Ella no dijo nada, solo me miraba con esos enormes ojos negros. Roce mis labios junto a los de ella, provocandola...Si, eso quería.

Ella sonrió corriendose unos centímetros más atrás y luego fue ella quién entrelazo sus dedos en mi cabello y me beso. No me quede atrás y la seguí...Mis manos bajaron a su espalda baja y la apegue aún más a mi cuerpo, ella seguía besandome intensamente y, diablos, esta chica está matandome.

Puse mi mano en su muslo haciendo que subiera a mi cadera, ella sonrió confundida.

— arriba — sonreí juguetón.

Ella de un pequeño salto subio ambas piernas a mis caderas. Adoraba la forma de poder manejarla con tanta facilidad. En este momento amaba el F.A por darme musculos.

Camine unos cuantos metros lejos de las cabañas y más adentro del mini bosqué y me puse de rodillas, ________ quedo tendida en el cesped, la mire con perversidad en mis ojos...diablos.

— ________'S POV

Su mirada y su seguridad lo hacían tan malditamente perfecto qué no me arrepentía de nada.

Lo tome del cuello y lo acerque a mi haciendo qué se acostara encima de mi.

Seguíamos besandonos, pero luego de unos segundos yo estaba sobre él. Ambos con la respiración agitada, completamente lúcidos y mirandonos a los ojos.

— no quiero ir mas allá — dije sentandome con las piernas a cada lado de su cadera.

Él levanto su mirada para luego enarcar una ceja.

— ¿bromeas? diablos, me dejas así para luego irte — dijo molesto.

— yo no..

— estoy bromeando — rió.

— eres un imbécil ¿sabías?

— soy el imbécil qué te enamorará darling — sonrió sobervio.

— ¿por qué tienes tanta seguridad?

— porque me conozco

— y yo me conozco a mi y sé que no me enamorare de ti

— dices ¿solo esto? — preguntó señalandonos.

— ¿esto qué?

— ¿solo quieres provocarme?

— no — sonreí.

— con esto no se juega, podemos terminar desnudos debajo de unas sabanas — contestó seguro.

— ¿te aprovecharás?

— claro que no, solo haré qué lo desees tanto que ambos querremos...mirame ¿tengo cara de que me sobrepasaría contigo?

— si — reí.

— cuando ambos quieren no se le llama así

Maldita personalidad que tenía.

Estuvimos en esa posición un largo tiempo conversando estupideces hasta qué nos pusimos de pie para ir a la cabaña.

Llegamos y entramos en silencio.

— sueña conmigo bonita — sonrió perverso mientras abria la puerta de su habitación.

— no quiero tener pesadillas — susurre.

— ¿puedo soñar contigo? son las pesadillas más lindas

— claro, solo trata de no amanecer exitado — bromeé.

Él carcajeo para luego acercarse a mi y apegarme contra la muralla.

— tom, puede despertar alguien — susurre.

El se encongió de hombros apoyando sus labios contra los mios...Me beso está vez lentamente para dejarme en una nube.

— buenas noches — volteó y entro a su habitación.

Quise golpearlo por dejarme así, Definitivamente no me iba a enamorar de el.

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Maratón 2/2

Ganar perdiendo | Tom HollandWhere stories live. Discover now