9

399 51 11
                                    

Chaeryeong y Ryujin caminaron en direcciones opuestas haciendo como si nada hubiera pasado, ambas un poco avergonzadas tras haber sido encontradas en una posición algo comprometedora. Yuna por otro lado, quería quitarse de la cabeza la imagen de la que según ella era la recatada mejor amiga de su hermana.

La presentación había terminado con la ovación de pie de todo el público, Yeji se enterneció al ver como Lia aplaudía y gritaba por su hermana con tanto cariño y energía, era la primera vez que la veía ser tan ruidosa y era adorable.

—¿No te vas a despedir de tu hermana? —Preguntó Yeji mientras caminaban a la salida del recinto, Lia negó ya que realmente no tenía ganas de ver a su padre ni mucho menos a su madrastra. —La llamaré luego, ella sabe cómo son las cosas entre yo y mi padre. —Yeji asintió, no queriendo incomodar más a la mayor con preguntas con respecto a su familia, creía que ya había hecho suficiente de eso. —¿Crees que Chaeryeong y Ryujin hayan tenido una escapada romántica? —preguntó la más alta, creando risas automáticas entre ambas creyendo que sus mejores amigas eran demasiado opuestas como para poder compartir mas de cinco minutos juntas. —La verdad es que Chaeryeong nunca tuvo muchas ganas de venir, seguro que se fue antes de que empezara. —Yeji por otro lado pensó lo mismo de parte de su mejor amiga, después de todo pareciera que no eran tan diferentes en ciertos aspectos.

—¿Te puedo llevar a casa? ¿O eso es ir muy rápido? —Yeji tenía sus manos guardadas en sus bolsillos y vio a Lia divertida luego de preguntar aquello. Lia estiró su diestra y robó la mano ajena de su bolsillo para así entrelazarla con la propia. —Me parece correcto, aunque no voy a casa. Me quedaré con Chaeryeong hoy. —Yeji no podía estar más contenta con la respuesta y más todavía con sus movimientos, pese a querer ir lento, Lia hacía las cosas de forma bastante seductora.

Las dos chicas caminaron sin soltarse de las manos, compartieron ideas y sueñas en lo que para ellas pareció ser un corto trayecto pese a llevar caminando una buena cantidad de minutos.

—Vaya, tu amiga debe tener mucho dinero. —Era imposible no asombrarse por el tamaño de las casas del barrio en el que se encontraban, Lia observó sus alrededores pareciendo no encontrarle mayor maravilla ya acostumbrada a la vida por esos lados de la ciudad. Se preguntó entonces qué diría Yeji al saber que su casa era del doble del tamaño de las casas que se encontraban ahí, intentó no pensar tanto en aquello y asintió. —Sus papás trabajan duro. —Yeji rió yo también trabajo duro dijo para sí misma, intentando que todo el tema de salir con alguien adinerada no se le subiera a la cabeza. De pronto Lia paró de golpe y Yeji se detuvo junto a ella que veía la casa a su costado haciéndole entender que habían llegado a destino.

—Gracias por traerme, la pasé muy bien contigo hoy. —Seguían sin soltarse las manos, pero sabían que ya era momento de hacerlo. Yeji tomó la iniciativa y rápidamente guardó su mano en el bolsillo como era de costumbre. La menor se despidió y se dio la media vuelta, siendo tomada por Lia antes de comenzar a caminar, sus labios chocaron en un torpe y corto beso de despedida. —Vete con cuidado ¿si? —Yeji asintió, ahora tenía energías suficientes como para caminar toda la distancia que le quedaba por delante.

.

.

.

—Si sabes que yo planifico mis outfits semanales pensando en el mes, tenerte aquí usando mi ropa me quita muchas opciones. —Se quejó Chaeryeong, quien ya estaba comenzando su rutina de noche. —A lo mejor deberías traer más ropa. —Aconsejó la menor, sentía que por algún motivo las cosas entre Minah y Jisu difícilmente fueran a mejorar en el futuro cercano lo que implicaría tenerla pasando varias noches a su lado. Lia cerró su libreta en la que dibujaba algunos bocetos que se le habían venido a la cabeza y comenzó a estudiar la figura de su mejor amiga. —No tengo ganas de ver a mi mamá, quizá le podría pedir a Seungcheol que me traiga algunas cosas. —Pensó, sabiendo que el chico haría cualquier cosa que ella le pidiera.

Amor entre telas.  / YEJISUWhere stories live. Discover now