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POR ALGUNA RAZON HADANAE ESTABA RARA, había pasado una semana desde que Maggie y Gleen la adoptaron, haciendo que en esa semana, conocieron al matrimonio y a Hadanae como la familia Rhee.
Sin embargo, desde hace unos días, Hadanae andaba rara.
A tal grado que casi no insultaba a nadie.
Pero hoy se había superado.
-- Buen día ¿Soñaste con Johnny Depp? -- Pregunto Gleen divertido, sirviéndole el desayuno de ella, esperando una respuesta, sin embargó ella no respondió.
-- ¿Ocurre algo, linda? -- Pregunto Maggie, colocando una mano en su hombro.
-- No tengo hambre -- Fue lo único que dijo, antes de subir las escalera de su casa.
Hadanae paso entre el pasillo, cerrando la puerta de su habitación, recorriendo con la mirada su nuevo espacio.
Las paredes eran blancas y había una cama matrimonial, había colocado posters que habían en una tienda abandonada y unos discos que encontró hace unos meses. Mientras que su skate descansaba en la orilla de la habitación.
Hadanae se tiro a la cama sin hacer, planteando volver a quedarse dormida.
-- Hada -- Escucho que decían atrás de la puerta, era Maggie -- ¿Pasa algo? ¿Te traigo algo de comer para acá? ¿Te sientes mal?
-- No, gracias -- Respondió con su cara en la almohada, escuchando como Maggie soltaba un suspiro, y luego escucho sus pasos bajar por la escalera.
Maggie volvió a ingresar a la cocina, bajo la atenta mirada de Gleen atenta, estaba preocupado por Hada.
-- ¿Qué dijo? -- Pregunto Gleen comiendo su tostada.
-- No se, solo me dijo "No, gracias" -- Repitió sentándose junto a su esposo -- Esta así desde hace tres días ¿Sera por la adopción?
-- No creo... Ella estaba feliz, digo, se veía feliz -- Dijo Gleen confundido.
-- Creo que deberíamos preguntarle a Rick, el sabe como tratar adolescentes -- Dijo Maggie tomando su café.
Se escucharon pisadas.
-- Iré a andar en skate -- Dijo Hadanae avanzando hacia la salida, junto con su vehículo.
-- A las seis tenemos la fiesta de bienvenida, vuelve a las cuatro -- Le dijo Maggie tranquilamente.
