UNO

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El sol comenzaba a lastimar mi cara, así que decidí levantarme de mi cama, al hacerlo tan rápido tuve un dolor punzante en la cabeza, después procese que básicamente ayer me pasé de copas, a veces se me olvidaba que tenía una responsabilidad muy grande en mis manos.

Me dirigí al baño a tomar una ducha, mientras en mi cabeza recordaba que es lo que tendría que hacer hoy, pues necesitaba seguir complaciendo a mis clientes.

- Otro día más - Suspire mientras me secaba el cuerpo, me coloqué mi ropa, una ropa que gritaba "empresario importante", como si manejara acciones y contratos millonarios con marcas.

- ¿Señor? - Tocaron a mi puerta.

- ¿Dime?¿Qué pasa? - Hable mientras terminaba de ponerme los zapatos.

- El señor Bae está en su despacho - Asentí y aquella persona se fue, de inmediato camine hacia mi glorioso cuarto de negocios. Un cuarto que diría yo era hermoso, estantes con libros a los costados, y un ventanal enorme de frente a la puerta, con magníficas vistas, pues me dejaban ver casi todo Seúl.

- Buenos días - Mi voz retumbó en el cuarto, pude notar un pequeño sobresalto en mi cliente - ¿En qué puedo servirle?

- Bueno... yo... -

- No tenga miedo, somos discretos con estas cosas, porque supongo que no pidió verme solo para mandarle flores a quien sea por el que está aquí ¿verdad? - El hombre frente a mi de apellido Bae me entregó una carpeta, era fácil notar su casi entrada a los cincuenta.

-Lo necesito muerto...- Mis ojos miraban a un joven que sobrepasaba los veinte años - El... El embarazo a mi hija y no quiere hacerse cargo del bebé -

-Bien - Cerré la carpeta y comencé a hablar - Le ofrecemos la opción de que se le dé un pequeño susto a esta persona, en este caso pidiendo o exigiendo que se haga cargo del bebé, si no acepta lo aniquilaremos y en caso de que no quiera que el cuerpo se encuentre me lo tiene que especificar porque se le debe notificar a Clean Today para hacer esa parte -

-Wow, pues... Creo que es buena opción, si el no recapacita pueden matarlo, aquí está el cheque con los siete millones de dólares que le prometí ¿Sería todo?

- Necesito que me firme esto - Miro confundido aquello - Es para asegurar que no nos hará cargo después del trabajo hecho, esto es por nuestra seguridad también, no es la primera vez que a alguien le remueve la conciencia y decide levantar una denuncia en nuestra contra para cerrarnos, así que en caso de que abra la boca será aniquilado también - El señor asintió sin miedo - Bien, hoy es... viernes, así que el lunes a más tardar recibirá la noticia del trabajo hecho o la aceptación del muchacho para con su hija - Me levanté de mi silla para despedirme, mientras llamaba a Bo-Gum para que se lo llevara - Mi amigo lo llevara a la salida.

Me senté a hacer la asignación, en este caso utilizaríamos a solo tres asesinos, pues era un chico delgado y sin protección, así que sería más fácil de manejar la intimidación o el asesinato, mientras archivaba, escuché como Namjoon abria la puerta de mi despacho, junto con Seokjin, estos dos eran basicamente mis unicas columnas en las cuales anfianzarme, no solo eran socios, sino tambien mis hermanos.

- Taehyung...-

-¿Qué pasa Nam? Respira - Dije sin despegar mi atención de los documentos.

- Nos acaban de robar tres millones de dólares - dijo Seokjin al ver que Namjoon no se animaba a decirme.

- ¿Qué? - Me levanté rápidamente - ¿Como mierda es que se pudieron meter a robar Namjoon?

- Tae, fue mientras los transportaban a el banco - Habló Jin

- No me jodas Namjoon, ¿Como teniendo la mejor seguridad de todo puto Seul es que nos roban 3 millones? - Los dos se miraron como pensando en si decirme o no - Si no hablan les vuelo la cabeza -

- Los que transportaban el dinero dijeron que quienes se llevaron el dinero tenían algo en peculiar - Me acerqué a donde ellos estaban, pues ni siquiera se atrevieron a llegar a mi escritorio- Tenían una "J" en la muñeca izquierda - Abrí mi boca sorprendido, pues lo que acababan de decir era algo muy grabe, un chiste de muy mal gusto.

- Es una broma ¿no? - Él negó y yo suspire - Seokjin llama a la Trinidad, diles que es urgente que hablemos, y tu Nam dile a los transportistas que como no sea cierto les vuelo la cabeza en frente de sus hijos, nadie se mete conmigo ni con la trinidad - Nam y Jin salieron del despacho y yo regrese a mi silla, masajeando mis sienes.

- ¿Estás bien? -

- Por favor Bo-Gum, vete, tomate el dia libre no quiero desquitarme contigo precioso - No era secreto que este chico de linda sonrisa y cuerpo hermoso era mi acompañante de vez en cuando, no estábamos en una relación pero las teníamos. El de inmediato salió del cuarto.

- A las Diez de la noche, en el "Gold" - Jin dijo desde la puerta

- Bien... Prepara todo, si lo que Nam dijo es verdad probablemente tengamos que iniciar una masacre - Jin se acercó a sentarse en una de las sillas frente a el escritorio.

- Sabes, siempre que te veo tomando este tipo de decisiones sé que papá estaría orgulloso

- Ojalá lo este, hago todo lo posible para mantener esta mierda a flote, pero ahora no se que voy a hacer, sabes que la Trinidad es punto y aparte, la disolución de esta nos afectaría en gran manera, tengo miedo Jin.

- ¿Miedo? ¿El gran V teniendo miedo? Eso es nuevo, sabes que Nam y yo te protegemos hasta la muerte.

- Que cursi eres hyung, eso deberías estar diciéndoselo a Nam no a mi - Sus orejas se pusieron rojas - ¿Cuando le diras que te gusta?

- ¿Estás loco? Somos hermanos, sería como incesto, aparte es obvio que el no me ve como algo más. -

- Entre más tiempo pases callado, la probabilidad de que el se enamore de alguien más crece, aparte creí que ya habías superado esto de "somos hermanos". Somos hermanos porque crecimos juntos, no porque tengamos la misma sangre, así que si no te le empiezas a insinuar lo haré yo por ti -

- No te atreverías -

- No me pruebes, así que comienza tu plan de "enamorar a mi hermano" - El avergonzado salió del despacho.

Una vez solo reflexione sobre lo único que me importaba, pues mis "hermanos" eran lo único que me quedaba pues nuestros padres habían fallecido ya hace un par de años, aun recuerdo el dia en que mi padre sabiendo lo mal de salud que estaba decidio dejarme el negocio, me tuve que enseñar a trabajar y echar a delante todo lo que teníamos los Kim, sin ayuda de mi padre fue difícil, pero tenía Jin y Nam que siempre estuvieron ahí para apoyarme después simplemente esto se volvió mi pasión.

- ¿Cómo se supone que resolvamos esto papá? - Mire al cielo por el ventanal detrás mío antes de levantarme y prepararme para junta en la noche-













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Es mi primera historia de vkook y estoy muy nerviosa de si les pueda llegar a gustar.
Por favor si fue de tu agrado te pido que me ayudes a compartirla con más gente que le guste este tipo de historias.

LITTLE PROBLEMS - VKOOKWhere stories live. Discover now