O14 | Trust me

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Jimin estaba parado en un escenario junto a otros seis chicos. No veía sus caras pero curiosamente se sintió tranquilo, como si hubiese estado allí toda su vida.

- ¡Jimin! ¡Saludemos a ARMY! - gritó un muchacho alto.

¿ARMY? ¿Quien es ARMY?

De repente, comenzó a sonar una canción que no creyó conocer y...

- ¡Mocoso! - grita su hermano Chanyeol. - ¡Qué sueño pesado tienes, maldita sea! - le tiende su teléfono. - Te están llamando desde hace un par de minutos, si sigo escuchando ese tono de llamada me va a explotar la cabeza.

- A mi me hacen explotar la cabeza tus gritos, hyung... - toma una almohada y se la tira a la cara. Acto seguido se vuelve a tapar con sus frazadas, sosteniendo en sus manos el teléfono que aún sonaba.

Había cerrado sus ojos intentando en vano dormir otra vez, mientras Chanyeol se daba por vencido retirándose de la habitación de su hermano menor y aquél dispositivo electrónico seguía sonando sin parar.

- No. - abre los ojos bruscamente. - Así no voy a poder dormir, ¿quién está levantado a esta hora de la madrugada para molestar a otros...? - mira la pantalla de su celular, viendo que eran las 06:13 de la tarde. Abre los ojos en grande, alarmado. - ¿Tanto dormí? - suspira y atiende la llamada de uno de sus contactos: Hyung Gruñón.

- Yoongi hyung, buenas tardes... - dice algo desganado y adolorido. Afortunadamente aún no recordaba lo que había hecho la noche anterior.

- Uhm, hola Jimin. - Yoongi estaba... ¿nervioso? ¿Era eso posible? - Llamaba para preguntarte como estabas y para hacerte una propuesta...

- ¿Cómo estoy? - repite. - Bueno... Digamos que he tenido mejores días, hyung. - ¿Usted cómo es...? - corta la oración en el momento en que su mente recreó las memorias de la pasada noche.

¿Hyung lindo? ¿Un besito en la nariz...? ¡Se había subido sobre él como si fuese su hermanito menor!

Dios santo, que nadie lo deje cerca de alcohol nunca más en la vida. Definitivamente era su peor enemigo...

Suerte que Yoongi - por lo menos con él - tuvo paciencia. Según Jungkook, el mayor no solía tomar esa clase de responsabilidades o cuidados en sus manos.

- Eh, ¿cómo está usted, Yoongi hyung? - pregunta finalmente.

Min hubiese querido ser sincero, diciéndole que por su culpa había dado vueltas en su cama toda la noche, siendo él una persona capaz de dormir muy fácil y por mucho tiempo.

- Bien, Jiminnie. Me alegro que estés bien, teniendo en cuenta tu... uh... estado la noche anterior.

- Con respecto a eso, quería pedirle disculpas por todo el show de ayer... - Yoongi no lo pudo apreciar, pero Jimin rascaba su cuello dados los nervios en ese instante.

- No hay problema, Park. Lo entiendo perfectamente. - Yoongi se recuesta en su cama, mirando el ventilador girar arriba en su techo. - ¿Sabes? Quería proponerte algo para nuestra performance...

- Lo escucho, hyung.

- No ensayemos más.

¿Acaso Min Yoongi se había vuelto loco?

- Hyung, tenemos poco menos de un mes hasta la muestra...

- Lo sé, lo sé... - contesta. - Pero estaba pensando en qué... - iba a contarle cuál era el motivo de aquella extraña petición, pero decide guardar ese secreto para después.

- ¿Ya quiere dejar de verme? - bromea.

Aunque en realidad no lo era por completo.

- No es eso... Claro que no. - suspira. - ¿Confías en hyung, Jimin?

Se hace un incómodo silencio que hace temblar a Yoongi. ¿En qué momento pensó que aquellas palabras serían las adecuadas?

- S-si, hyung. - los segundos hasta la respuesta de su dongsaeng se hicieron eternos. - Confío en usted.

Min sonríe casi sin quererlo del otro lado del teléfono, para luego despedirse de Jimin por tiempo indefinido.

Porque además de faltar un mes para la muestra, faltaban sólo días para que empiecen los tan temidos exámenes finales.

Quién sabe cuando esos dos podrían volver a verse...

Performance [Yoonmin]Where stories live. Discover now